Las elecciones de Brasil sí importan (o deberían) a los inversores

Brasil es uno de los mercados emergentes que más ha captado la atención de los inversores y uno de los focos de crecimiento de las empresas españolas. Ahora los inversores siguen con cuidado la campaña electoral y esperan con ciertas dudas el resultado de las elecciones, que se celebran el próximo 3 de octubre.  Jim O’Neill, nuevo presidente de Goldman Sachs AM, que acuñó el término BRIC para denominar a los emergentes, dijo recientemente: “Me preocupa que los inversores piensen que estas elecciones no importan… los inversores se están dejando llevar”.  Y Bank of America advirtió hace unas semanas sobre la posibilidad de que las elecciones presidenciales de Brasil provoquen una caída a corto plazo del real. Los analistas de la entidad señalaron que “la próxima elección no debe tratarse como un suceso intrascendente”. También expertos argentinos han avisado sobre el riesgo en el mercado de divisas y han recordado que en los últimos comicios la moneda brasileña se devaluó un 40% en pocos días.  Por otro lado, desde Wall Street se espera que el sucesor de Luiz Inácio Lula da Silva  -todo apunta a que será Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores que lidera Lula- lleve a cabo un ajuste fiscal. Pero el hecho de que Rousseff nunca haya sido elegida para un cargo público genera ciertas dudas sobre si tendrá la capacidad necesaria para negociar las medidas con los miembros más a la izquierda de su partido y con la oposición.  Rousseff cuenta como asesor económico con Antonio Palocci, ex ministro de Hacienda que tuvo que renunciar en 2006 al cargo por un escándalo de corrupción. Palocci, hombre clave del éxito económico de Brasil y que se perfilaba como sucesor de Lula, probablemente no pueda presentarse nunca como presidente –aunque el año pasado fue declarado inocente-, pero su sello está detrás de las políticas del país emergente que han convencido y cautivado a los inversores.  Palocci, y las políticas que impuso, fue una de las razones por las que Pimco, la mayor gestora de fondos del mundo, hizo de la deuda soberana brasileña una de sus inversiones favoritas en los mercados emergentes, según publica esta semana Bloomberg. Tal y como ha reconocido el director general de Pimco, Mohamed El-Erian: “La mano dura de Palocci es la razón por la que nos hemos mantenido ahí”.  Por su parte, Urban Larson, gestor de F&C Asset Management, destaca que “cuanto más ve el mercado de Palocci, más feliz se siente sobre Dilma. Y Palocci se está dejando ver con la candidata presidencial en debates televisivos y entrevistas. Brasil debe convencer al mercado para continuar el sueño que materializó en su día Lula y éste reconoció hace tiempo que parte de su éxito se lo debía a Palocci.  Los analistas de Citigroup son aún más directos: “Brasil le vuelve a necesitar”. “Lo que Palocci hico como ministro puso a Brasil en el camino adecuado”.