Eolia pleitea con un accionista tras aplazar su salida a bolsa

Los infructuosos intentos del grupo Eolia de salir a Bolsa con el fin de que sus socios puedan conseguir liquidez han comenzado a erosionar las buenas relaciones que se supone deben mantener los accionistas con los gestores. La compañía que preside Luis Carlos Croissier y que gestiona N+1 está en pleitos con uno de sus accionistas, el grupo Gesfesa, controlado por Rafael Ferrando y su familia. Ferrando es el presidente de la confederación de empresarios valencianos, y uno de los hombres de peso de la economía valenciana.

 

El pleito de Gesfesa Energía arranca por iniciativa de este socio, que, a finales del año pasado, reclamó un arbitraje ante la Cámara de Comercio de Madrid para que Eolia le pagase 14,3 millones de euros por entender que tenía derecho a venderle su participación en la compañía, el 1,92%. Eolia le denegó en principio este arbitraje, pero finalmente ha tenido que aceptarlo tras un dictamen de la institución madrileña. Está por ver si finalmente Eolia es obligada a recomprar este paquete por un precio de 14,3 millones de euros.

Por otro lado, Eolia ha resuelto el conflicto que también tenía con otro de sus accionistas. En este caso era con el grupo alemán Res, al que la propia compañía llevó a los tribunales. Eolia había adquirido en julio de 2008 a la germanosuiza Res, que tiene el 6,1% del capital, una serie de activos de energías renovables en países centroeuropeos y Francia por los que le pagó más de 50 millones de euros y unas cantidades adicionales si se cumplían una serie de condiciones.

Sin embargo, un año y medio después han surgido problemas, y Eolia ha reclamado judicialmente a Res un millón de euros por los problemas surgidos en un parque eólico en Polonia, que formaba parte del paquete vendido. Además, Eolia le ha presentado una demanda declarativa en otro juzgado madrileño a la espera de cuantificar los perjuicios causados por haberle vendido unos parques en Francia que no se ajustan al contrato, ya que no pueden vender a tarifa verde, tal como se había estipulado.

Res entró en el capital de Eolia al invertir 45,3 millones de la cantidad que cobró de ésta a través de la última ampliación de capital que se quedó sin suscribir por los socios en un 35%. El valor que los gestores concedieron a la sociedad para determinar esta ampliación fue de 754 millones de euros.

A diferencia de Res, que sí tiene un puesto en el consejo de administración de la compañía, representada por Peter Cohen, Gesfesa no ocupa un lugar entre los diez miembros del  ilustre órgano de administración, aún siendo el séptimo mayor accionista. El consejo lo preside el que fuera primer presidente de la CNMV, Luis Carlos Croissier, acompañado de nombres relevantes como los de dos de los fundadores de Preneal, la principal accionista con el 14,1% del capital, Eduardo Merigó (ex presidente de Visa y un alto cargo del Gobierno de la UCD) y José Pérez Arízaga (consejero del Popular y del Sabadell).

Sin salir a bolsa

La imposibilidad de salir a Bolsa, con dos intentos frustrados en 2008 y 2010, ha originado tensiones en el grupo, que ni ha podido captar capital para su desarrollo ni dar liquidez a sus socios, ni ha podido clarificar la gestión, todavía en manos de N+1. El año pasado consiguió 53 millones de liquidez con la venta del 49% que tenía en Danta de Energías a una filial española de la alemana RWE, consiguiendo una plusvalía de 16 millones, lo que le permitió además terminar el ejercicio con una posición cómoda de tesorería, de 62 millones, que se añaden a más de 100 millones de crédito no dispuesto.

La compañía está mejor capitalizada que otras del sector, pudiendo aguantar mejor el envite de la reducción de la prima que debe decidir Industria. Cuenta con 640 millones de fondos propios y el doble de deuda. Su potencia es de 476 megawatios a los que se añadirán otros 860 en proyecto y construcción. Los socios tienen cita a finales de este mes en una junta de accionistas en la que deberán votar sobre las alternativas estratégicas a una salida a Bolsa, que sigue siendo la preferida, y sobre la gestión social.