Sindicatos y patronal pactan el mayor ajuste salarial de la democracia

La dureza de la crisis no sólo ha obligado a Moncloa a cambiar el discurso económico. También a los agentes sociales. Tras el fiasco de 2009, sindicatos y patronal volverán a firmar un pacto de rentas, el primero desde que en 1984 saliera adelante el Acuerdo Económico y Social (AES). El pacto, en concreto, prevé incrementos salariales de entre el 1 y el 2,5% durante los tres años de duración del acuerdo, y de manera indirecta (aunque esa no sea su intención) supone una auténtica tabla de salvación para el Gobierno, que al menos podrá acreditar ante los mercados internacionales un escenario de paz social con moderación de los salarios.

El acuerdo será previsiblemente ratificado hoy por los órganos de dirección de UGT, CCOO y CEOE, y fue cerrado la semana pasada por los negociadores, que de forma inmediata elevaron su contenido a los máximos responsables de las tres organizaciones: Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, por CCOO y UGT, respectivamente; y Gerardo Díaz Ferrán y Santiago Herrero, este último en calidad de presidente del departamento de relaciones laborales de CEOE. Estos cuatro dirigentes son realmente quienes han tenido la última palabra, y ni siquiera algunos de sus colaboradores más estrechos conocían ayer lo que ha salido de las negociaciones al más alto nivel.

Se trata de un acuerdo que garantiza un escenario de moderación salarial durante los próximos años. Las alzas acordadas para este 2010 del 1%, mientras que para 2011 se situaría entre el 1 y el 2% y para 2012 estaría comprendida entre el 1,5 y el 2,5%. En 2009, un año de intensa recesión, los sueldos subieron, como media, un 2,6%.

A las empresas, por su parte, se les reconoce explícitamente el derecho a incluir en la negociación colectiva una cláusula de ‘descuelgue’ por razones económicas. La existencia de esta cláusula se incluye ya en las recomendaciones sobre negociación colectiva formuladas recientemente por la Secretaría de Acción Sindical de CCOO, aunque con limitaciones y siempre con control de los comités de empresa.

Las cláusulas de ‘descuelgue’ han sido, precisamente, el caballo de batalla del año 2009, en el que muchas empresas se negaron a abonar lo pactado en convenio.

Esos convenios eran de carácter plurianual, y de ahí que no tuvieran en cuenta el cambio de ciclo económico. Eso es lo que explica que en los que va de año 2010 los salarios pactados en convenio se sitúen ya en el 1,6%, por encima de la inflación prevista. El consenso de Funcas (que recoge la opinión de 15 institutos de coyuntura) prevé que el IPC crezca este año (media anual) un 1,3%.

Los salarios suben más en la construcción

Hasta el pasado 31 de enero, se habían cerrado 952 convenios colectivos que afectan a 164.800 empresas y 1,15 millones de trabajadores, lo que da idea de la importancia que tiene la negociación plurianual en  las relaciones laborales. Lo más singular continúa siendo el comportamiento salarial en el sector de la construcción, el más afectado  por la crisis. Pues bien, por séptimo año consecutivo, la construcción es el  sector en el que más crecen los sueldos: un 2% en los que va de año.

El pacto salarial no estará, en cualquier caso, exento de polémicas. Fuentes que conocen bien a la patronal por dentro dijeron a El Confidencial que Díaz Ferrán no va a tener fácil sacarlo adelante. Básicamente por el hecho de que inicialmente los empresarios habían propuesto que los salarios subieran un 0,3%, en línea con lo pactado en la Función Pública. “Algunos empresarios no van a entender que se dé aire a un Gobierno que se tambalea”, aseguran esas fuentes.

La debilidad de Díaz Ferrán en la propia organización por los problemas que tiene con sus empresas puede, igualmente, influir en el debate en el seno de la patronal. Se quiere evitar a toda costa que se dé la impresión de que CEOE acepta el pacto por circunstancias ajenas a la propia negociación, y eso puede explicar la presencia en las discusiones de un experimentado líder empresarial como es Santiago Herrero, presidente de la patronal andaluza.

La negociación colectiva es otro de los temas que abordará el documento, pero al tratarse de un asunto de extrema complejidad, las partes se darán más tiempo para seguir discutiendo. El resto será literatura.