La CNMV veta el canje propuesto por San José para fusionarse con Parquesol

Por enésima vez, Jacinto Rey ha vuelto a faltar a su palabra con el mercado, aunque esta vez no por voluntad propia. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no dio por buenas las valoraciones de canje ofrecidas por San José para fusionarse con Parquesol, la operación que debía culminarse el pasado viernes 26 mediante el procedimiento de listing y que, según han explicado a este diario distintas fuentes del sector financiero, tuvo que congelarse ante las exigencias del regulador.

 

En un escueto hecho relevante remitido el pasado viernes, el equipo comandado por Miguel Zorita, vicepresidente y consejero delegado, informó del aplazamiento de la fusión por absorción de las sociedades que formarían el futuro Grupo Empresarial San José. Ninguno de los dos párrafos del comunicado ofrecía explicación alguna sobre los motivos, aunque consultados por este diario, desde la compañía aducen cuestiones técnicas y de calendario para justificar lo ocurrido.

Además de la relación de canje, en la CNMV no tienen claras las condiciones de la venta del 20% de Parquesol (un 15% de San José y un 5% de autocartera de la propia inmobiliaria) a Diego Eduardo León. El empresario argentino se comprometió a pagar 50 millones de euros a un precio de 6,21 euros por acción, la mitad de los cuales abonaría a partir de junio de 2011, mientras que el primer pago se realizaría en los tres primeros días hábiles tras la salida a bolsa, hito que aún no se ha producido.

Según estas condiciones, la transacción generaba unas minusvalías para Jacinto Rey de cerca de 130 millones de euros, cargando parte de estas pérdidas a Parquesol, que aportaba toda su autocartera a la venta. Precisamente, la CNMV ha solicitado información complementaria a San José sobre este punto, dado que la relación de porcentajes incluidos en la transacción ha permitido al empresario gallego seguir manteniendo un 50% de la inmobiliaria y por lo tanto su mayoría.

Dificultades para la refinanciación

El último anuncio de salida a bolsa se produjo a finales de mayo, cuando San José solicitó a la CNMV la obtención del código ISIN para formalizar el proceso de absorción de Parquesol. Sólo un mes antes, Jacinto Rey y Miguel Zorita habían conseguido cerrar la refinanciación del Grupo San José, que arrastra una deuda total de cerca de 2.000 millones, incluida una línea de financiación adicional de 212 millones para “cubrir potenciales desfases temporales y garantizar el desarrollo de proyectos empresariales”.

Desde la constructora con sede en Pontevedra aseguran que no tienen problemas de liquidez, “simplemente se ha tratado de trabajar en plazos muy justos”. De acuerdo con su versión, “hay una estrategia de sinergias que aporta mayor eficacia y eficiencia al Grupo” que explica la rapidez con la que se trabaja en esa dirección. Los plazos de la refinanciación, a seis años, con tres primeros de carencia, deberían permitir a Jacinto Rey aparcar las prisas, más aún cuando la bolsa todavía no ofrece buenas valoraciones.

Los bancos financiadores de San José, sin embargo, no lo ven tan claro. “Estuvimos cinco meses negociando las nuevas condiciones”, explica una entidad del sindicado. “Optamos por conceder un plazo razonable a cambio de la aportación de garantías reales (como las filiales de San José, caso de Parquesol o Duch) y la concesión de una línea de crédito que garantizara las necesidades de circulante. Es cierto que al principio no hubo buenas maneras por su parte, pero al final todos transigimos un poco”.