El US Open 2025 ya está en juego en Nueva York y no solo promete noches mágicas en el Arthur Ashe Stadium. Este año, el torneo rompe todos los registros con una bolsa récord de 90 millones de dólares, la más alta jamás vista en un Grand Slam. La cifra, que supone un 20% más que en 2024, convierte a Flushing Meadows en el epicentro mundial del deporte y del dinero.
Los premios en el cuadro individual baten marcas históricas. Los campeones masculino y femenino se llevarán 5 millones de dólares cada uno, superando de largo los 3,6 millones del año pasado. El reparto continúa con 2,5 millones para los finalistas, 1,26 millones para semifinalistas y 660.000 para quienes lleguen a cuartos. Incluso en las primeras rondas, los tenistas garantizan cantidades notables: 400.000 dólares en octavos, 237.000 en tercera ronda, 154.000 en segunda y 110.000 solo por debutar.
El espectáculo también se traslada al cuadro de dobles, donde las parejas campeonas levantarán el título con un cheque de 1 millón de dólares. Las finalistas recibirán 500.000, las semifinalistas 250.000 y los cuartofinalistas 125.000. Incluso quienes caigan en primera ronda tendrán 30.000 dólares asegurados. Una estructura que confirma la apuesta del torneo por recompensar a todos los participantes, desde las estrellas hasta los que buscan hacerse un hueco.
La comparación con otros grandes torneos lo dice todo. El Open de Australia otorga poco más de 2,1 millones a sus campeones, en Roland Garros la cifra asciende a 2,9 millones y en Wimbledon ronda los 4 millones. Con 5 millones para cada ganador y una bolsa total de 90 millones, el US Open 2025 se consolida como el Grand Slam más lucrativo, el que todos quieren ganar y el que mejor paga cada esfuerzo sobre la pista.
El US Open 2025 ya está en juego en Nueva York y no solo promete noches mágicas en el Arthur Ashe Stadium. Este año, el torneo rompe todos los registros con una bolsa récord de 90 millones de dólares, la más alta jamás vista en un Grand Slam. La cifra, que supone un 20% más que en 2024, convierte a Flushing Meadows en el epicentro mundial del deporte y del dinero.