Björn Borg, leyenda del tenis: "Ganar o perder depende de las ganas de jugar el último punto"

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Björn Borg es una leyenda del tenis, pues el exjugador sueco ganó 654 partidos en individuales y perdió 140 en toda su carrera. Ostenta 11 Grand Slams, siendo el sexto que más tiene tras Djokovic (24), Nadal (22), Federer (20), Pete Sampras (14) y Roy Emerson (12).

Ganó 66 títulos ATP Tour, conquistó seis coronas en Roland Garros y otras cinco más en Wimbledon. Tres años consecutivos (1978-80), Borg consiguió el doblete Roland Garros-Wimbledon.

Una de las frases más célebres de Björn Borg es "ganar o perder un partido depende de las ganas que usted tenga de jugar el último punto".

El que fuera número uno del ránking de la ATP destacaba por su melena rubia y por mantenerse frío en los momentos de presión. "Lo más difícil para un jugador de tenis es el apartado mental, lo psicológico", señaló Borg en una entrevista con la ATP.

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"Vale, tienes que estar en forma, esa es una parte. Pero, mentalmente, cuando saltas a la pista, estás solo. Si juegas en un deporte de equipo o algo así, siempre puedes esconderte detrás de otros compañeros", explicó el exjugador sueco.

Borg destacó el aspecto mental para llegar a ser el número uno del mundo: "Pero en el tenis, estás solo. Tienes que tomar la decisión. ¿Qué debería hacer? Debes tener esa personalidad, la capacidad de manejar esas situaciones. Creo que esa es la diferencia entre ser el número 1 y el 100. Todo el mundo puede jugar muy buen tenis, pero para estar en la cima, para ser el número uno, psicológicamente es muy difícil".

El extenista alcanzó el número uno mundial a los 21 años, siendo el sexto jugador más joven en alcanzar la cima del tenis. Borg terminó su carrera con 109 semanas en total como el mejor jugador del mundo.

En la entrevista detalló lo que se debe tener para alcanzar ese puesto: "En primer lugar, debes tener motivación, gran corazón y tenacidad. Tienes objetivos: 'Ya conseguí esto, pero quiero ser mejor'. Tienes que amar lo que haces. Cuando sales a la pista de tenis, tienes que amar cada momento".

Se definió como alguien muy competitivo: "Perder no formaba parte de mi personalidad", reconoció Borg. "Lo más bonito era ganar. Eso es por lo que como niño —cuando creí— entrené, sacrifiqué tantas cosas en mi vida. Pero lo bonito es que ganas. ¡Guau! Lo es todo".