La venganza de Alcaraz: una sufrida revancha 'a su manera'... para acallar todas las dudas en Roma

Carlos Alcaraz ya está en semifinales de Roma, después de superar en un complicado partido a Jack Draper (6-4 y 6-4), posiblemente el tenista más en forma desde que comenzara el año y uno de los jugadores que le tenía tomada la medida. El británico es uno de los pocos del circuito que ha descubierto, gracias a su enorme variedad de recursos técnicos, la forma de hacer daño al español, pero este miércoles sufrió su venganza, una revancha que cocinaba a juego lento.

Draper lleva demostrando varias temporadas que tiene tenis suficiente como para convertirse en uno de los mejores del mundo. Sin embargo, su principal problema estaban siendo las lesiones, pues era incapaz de tener continuidad en su juego. Pero algo ha cambiado en 2025: por fin es más sólido, más estable y tiene menos problemas físicos, lo que le ha permitido mejorar claramente sobre la pista. De hecho, ya es el quinto del mundo y no tiene intención de parar.

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El Confidencial

Hasta Roma, los dos tenistas se habían enfrentado en cinco ocasiones, con bagaje favorable de 3 a 2 para el español... pero con trampa. Y es que dos de esas victorias de Alcaraz se produjeron por la lesión de Draper, que tuvo que retirarse en pleno partido tanto en los octavos de final de Indian Wells en 2023 (6-2, 2-0 y retirada) y también en octavos del Open de Australia de esta temporada (7-5, 6-1 y retirada). Pero, en plenitud de condiciones, siempre le ha complicado.

De hecho, Draper fue el encargado de eliminar a Alcaraz en las pasadas semifinales de Indian Wells (1-6, 6-0 y 4-6), en una demostración de que, cuando está fino, es un tenista muy complicado de batir. Especialmente para el español, al que el británico le ha encontrado los puntos débiles: con su amplio catálogo de golpes, intenta que juegue lo menos posible desde el fondo de la pista, que no entre demasiado en juego con su derecha y, especialmente, le castiga su revés.

Por ello, el enfrentamiento entre ambos en Roma estaba marcado como una revancha. Alcaraz quería demostrarle a Draper que, a pesar de ser uno de los jugadores más duros a los que se ha enfrentado, lo sucedido en Indian Wells había sido un accidente. Y así lo hizo, firmando un brillante partido de cuartos de final donde, haciendo un tenis de muchísimo nivel, fue capaz de desarmar al británico para conseguir una trabajada victoria que le ha permitido meterse en semifinales.

Pero el partido de este miércoles no fue más que una muesca en los enfrentamientos entre ambos. Y es que, por edad, estilo y manera de enfocar el deporte, se antoja que la rivalidad entre ambos va a ser una de las más importantes de los próximos años. Pero incluso va más allá del juego, sino también por filosofía en la pista. De hecho, el documental de Alcaraz hizo que el propio Draper reaccionara, explicando que su forma de entender el tenis no es la misma que la del español.

En Alcaraz: a mi manera, el español reconoce que es difícil lidiar con ser uno de los mejores tenistas del mundo y dejar de lado las necesidades propias de su edad. Y, así, confesaba que su filosofía era "disfrutar de la vida y ser el mejor". Eso ha sido criticado por muchos tenistas, que consideran que el deporte de la raqueta es tan exigente que, si alguien no está cien por cien centrado en él, es imposible tocar la cima. Y uno de esos jugadores fue Draper, que aboga por el esfuerzo y el sacrificio.

"Si quieres ser grande, esto es los que tienes hacer. Hay gente que tiene un trabajo más duro. Lo digo para poner las cosas en perspectiva. Practico un deporte que me encanta, viajo con gente increíble y gano una buena suma de dinero. Y si quiero sacar el máximo provecho a mi carrera e intentar alcanzar mi máximo potencial, sé que tengo que darlo todo", afirmaba. Alcaraz acabó con Draper en un nuevo duelo en la pista pero, por juego e ideas, se antoja como un nuevo duelo generacional.