Las razones para que Alcaraz sea una tormenta en el desierto: su marco y una docena de abejas
Importante victoria del tenista español en tercera ronda de Indian Wells, en un partido donde acabó con la resistencia de Denis Shapovalov firmando un choque muy completo
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fa1d%2Feec%2F38b%2Fa1deec38be0a14b1e04872bb8f616afe.jpg)
Carlos Alcaraz está jugando en Indian Wells el mejor tenis en lo que va de temporada. El tenista español está volando en el desierto californiano, donde está demostrando un elevado nivel de tenis. De momento, ha resuelto los dos partidos que ha disputado por la vía rápida, algo que podría ser anecdótico de no ser por el alto nivel de sus rivales: Quentin Halys y Denis Shapovalov. Pero el español no les ha dado oportunidad alguna, lo mismo que quiere hacer ahora con Grigor Dimitrov.
Mucho se hablaba antes del torneo de cómo podía afectar el cambio de pista al jugador español. Desde hace más de un cuarto de siglo, la superficie de Indian Wells era la menos rápida de la gira, debido al tipo de suelo y, sobre todo, a las condiciones medioambientales. Por esa razón, se decidió hacer un cambio este año, algo que podría complicar al español. Pero, lejos de hacerlo, está ayudando a su tenis, así como sus dos secretos ante Shapovalov: su raqueta... y las abejas.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F9b9%2F709%2Fa8e%2F9b9709a8eacd89d704a1fd4dc3ff3e84.jpg)
El español no dio ninguna opción al canadiense, a quien derrotó por un contundente 6-2 y 6-4. Preguntando en rueda de prensa por qué se estaba sintiendo tan bien en Indian Wells, Alcaraz lo tenía claro. En realidad, no había ningún motivo extra y sí el trabajo que había detrás de su juego, donde este año el saque y el peso de la raqueta se han convertido en dos de sus cambios principales. Pero, especialmente importante es cómo le ayuda su nuevo marco para pegar con más poder.
Alcaraz es un jugador que es capaz de sacarse derechas potentísimas de la nada para acabar con la voluntad de sus rivales. Pero esos cinco gramos de peso extra que le ha puesto a su raqueta le permite hacerlo de manera más habitual y más contundente, dos claves para dominar el juego desde el fondo. Está contento con la manera en la que está jugando un torneo que, en caso de ganar, lo haría por tercera vez consecutiva, algo que solo hicieron Novak Djokovic y Roger Federer.
"Creo que es un cambio muy positivo para mí. Antes, jugaba con un peso muy bajo, así que decidí subirlo y probar. Está saliendo bien. Durante el partido, vi que con algunos golpes era capaz de hacer daño, como cuando los hacía en carrera u otros muy específicos. Me siento bien jugando con esos cinco gramos extra, siento más la pelota. La sensación es que golpeo y la bola se vuelve más fuerte. Eso, para el rival, es difícil de controlar", explicaba.
Otra 'invasión' de abejas
Pero ese peso extra no fue la única razón de su victoria... y sí las abejas. Recordemos que, el pasado año, el partido de cuartos de final entre Alcaraz y Alexander Zverev se tuvo que detener por culpa de una invasión de abejas, donde un experto tuvo que acudir para eliminarlas y que se pudiera seguir jugando de manera segura. Este año, volvió a pasar... pero en forma de una docena de personas disfrazadas en la grada que provocaron que Alcaraz, cada vez que los veía, se partiera de risa.
Esa situación, que podría parecer una simple anécdota, fue más importante de lo que parece para el jugador murciano, pues provocó que se destensara por completo y empezara a disfrutar en la pista. Perdió cualquier vestigio de nerviosismo, agarrotamiento o dudas que pudiera tener y, simplemente, comenzó a ser feliz. Cada vez que interactuaban desde la grada o que les enfocaban en el videomarcador, Alcaraz sonreía, incapaz de contener la risa de su cara.
"Fue muy gracioso pero, aún más importante, me ayudó mucho durante todo el primer set. Estuve mirándolos y riéndome. Siempre digo que, cuando me río, es cuando más me divierto en la cancha y muestro mi mejor tenis. Probablemente, gracias a ellos he podido también enseñar este nivel de juego. No me di cuenta de su presencia hasta el segundo juego, cuando la cámara los puso en pantalla, así que fue divertido. Al final me tomé una foto con ellos, se lo merecen", afirmaba.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F3a4%2F61d%2Fdc6%2F3a461ddc6e31d3287ad19ba25198e25c.jpg)
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F3a4%2F61d%2Fdc6%2F3a461ddc6e31d3287ad19ba25198e25c.jpg)
Ahora, el español ya está en octavos de final de Indian Wells, donde se medirá al siempre peligroso Grigor Dimitrov. Será un partido complicado, donde el español tendrá que seguir mostrando su mejor nivel si quiere mantener vivo su sueño en el desierto californiano. La clave estará en ser capaz de seguir golpeando como lo ha hecho hasta ahora y, sobre todo, de encontrar la felicidad en la pista. Y, si para ello, deben de aparecer un puñado de personas disfrazadas de abeja, bienvenido sea.
Carlos Alcaraz está jugando en Indian Wells el mejor tenis en lo que va de temporada. El tenista español está volando en el desierto californiano, donde está demostrando un elevado nivel de tenis. De momento, ha resuelto los dos partidos que ha disputado por la vía rápida, algo que podría ser anecdótico de no ser por el alto nivel de sus rivales: Quentin Halys y Denis Shapovalov. Pero el español no les ha dado oportunidad alguna, lo mismo que quiere hacer ahora con Grigor Dimitrov.