La deportista a seguir | La zurda por error que se inspira en Nishikori para asaltar el trono de la WTA
Con solo 17 años, Wakana Sonobe empieza a demostrar que tiene mucho tenis que ofrecer. Su entrenador cree que llegará a ser 'top ten' y es la gran esperanza del deporte japonés
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Muchas veces, la casualidad se cruza con alguien y le pone en el camino de su vida. Siendo niños, inconscientes de lo que significa el futuro, un giro del destino hace que todo se enfoque a un plan establecido por no se sabe muy bien quién o qué. En ocasiones, un deportista se decide por una especialidad gracias al espejo que ve en sus padres; en otras, es por un hermano; a veces, por un ídolo. Y, otras, por una especie de coctelera de elementos que iluminan un sendero.
Llegar a ser deportista de primer nivel no es algo al alcance de cualquiera. No solo hay que mostrar pasión en la pista, sino que hay que tener talento, constancia y ganas de sacrificar muchas cosas en busca de un sueño. Y, cómo no, también una pizca de suerte tan necesaria en la vida. Sucede a veces que un niño comienza a jugar casi sin querer con algo que encuentra por casa y, de repente, se descubre que tiene un talento innato para llegar a romper todo tipo de récords.
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Eso es, precisamente, lo que ha ocurrido con Wakana Sonobe, la próxima gran estrella del tenis japonés. Es cierto que el país asiático nunca ha sido una gran potencia en el deporte de la raqueta, pero no es menos cierto que, en los últimos años, ha vivido un crecimiento exponencial, con jugadores que han logrado romper todo tipo de registros. Posiblemente, el primero en transitar ese camino fue Kei Nishikori, precisamente el gran héroe de infancia de la protagonista de la semana.
Solo tenía 4 años cuando Sonobe, caminando por casa, encontró una raqueta. Su hermano Ren, con 8, ya entrenaba y jugaba al tenis, pero lo que nadie podía esperar es que aquella pequeña, a tan temprana edad, esgrimiera esa arma desconocida hasta el momento y mostrara grandes cualidades para este deporte. Y, además, lo que nadie pudo explicar es por qué, de manera natural, comenzó a jugar con su mano izquierda, siendo diestra absolutamente para todo.
Quizá fue por error, pues siendo solo una niña empezó a jugar y se acostumbró a hacerlo con su teóricamente mano menos dominante. Pero, desde entonces, empezó a quemar etapas a gran velocidad. Tanto, que menos de una década después, ganó una beca del Morita Tennis Funda para mudarse a EEUU para entrenar en la Academia IMG de Florida, misma organización que ya envió allí a Nishikori, tenista al que idolatra y de quien, incluso, copia movimientos en la pista.
Y es que, en Estados Unidos, tuvo el honor de compartir entrenamientos y enseñanzas con él: "Nishikori es una estrella en Japón. Él es quien me hizo querer jugar los Grand Slams. En cuanto al tenis, me enseñó algunas habilidades, como el juego de pies, y también me habló sobre mi mente, el aspecto mental del juego". Ahora, con solo 17 años, Sonobe ya ha conseguido debutar como profesional y apunta grandes maneras para recuperar el trono perdido por Naomi Osaka.
De hecho, 2025 ha sido el año de su despegue. Empezó el curso de manera espectacular, pues tras ganar el Open de Australia júnior, hizo su debut como profesional en Abu Dabi. Y no solo fue capaz de superar la ronda previa, derrotando a tres tenistas dentro del top 100 (Hailey Baptiste, Yue Yuan y la española Cristina Bucsa), sino que mostró sus credenciales ante Ons Jabeur, a la que plantó cara en octavos, demostrando que, con 17 años, tiene un futuro prometedor.
Con gran juego desde el fondo de la pista, un drive muy poderoso y un destacado juego de pies, Sonobe empieza a confirmar que tiene mucho tenis. Acaba de debutar entre las mejores raquetas del mundo y su plan es seguir creciendo en su juego para tratar de, en un puñado de años, asaltar el trono de la WTA. "Tiene potencial para ser top 10", asegura su entrenador, Ryuji Hirooka. Solo el tiempo dirá dónde es capaz de llegar la talentosa Wakana Sonobe, una zurda por error.
Muchas veces, la casualidad se cruza con alguien y le pone en el camino de su vida. Siendo niños, inconscientes de lo que significa el futuro, un giro del destino hace que todo se enfoque a un plan establecido por no se sabe muy bien quién o qué. En ocasiones, un deportista se decide por una especialidad gracias al espejo que ve en sus padres; en otras, es por un hermano; a veces, por un ídolo. Y, otras, por una especie de coctelera de elementos que iluminan un sendero.