El deportista a seguir | "No me pongo límites": la joya del tenis marroquí que triunfa con 16 años

El tenis puede presumir de ser uno de los deportes más democráticos que existen en el mundo. Con una raqueta, mucho trabajo y esfuerzo, cualquier jugador puede pelear desde el otro lado de la red por derrotar a los mayores favoritos del circuito. La calidad es la que marca la diferencia, pero un jugador puede llegar lejos con su simple esfuerzo. Muchas veces se ha visto cómo un jugador inferior es capaz de ganar al favorito: la derrota de Alcaraz con Marozsan en Roma.

Sin embargo, existen algunos países con no demasiada tradición en el mundo del tenis y Marruecos es uno de ellos. El país africano hace más de dos décadas que no cuenta con un jugador de talento, desde que Younes El Aynaoui se retirara allá por 2008. Ya van varias décadas de dura transición por el desierto, sin un jugador capaz de estar entre los mejores del mundo y de luchar por levantar títulos ATP. Pero, ahora, una joven estrella empieza a apuntar muy alto.

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Rubén Rodríguez

Precisamente un año antes de la retirada de El Aynaoui, un joven nacía en Casablanca (2007) y muy pronto descubrió que el tenis era una de sus grandes pasiones. Solo unos años después, ya se antoja como la gran promesa del tenis marroquí y uno de los africanos con mayor proyección. Hace solo unas semanas, se le ha podido ver en el Mutua Madrid Open y apunta a que, en cuestión de años, ya brille por el circuito en busca de ser el mejor marroquí de todos los tiempos.

Reda Bennani ya puede presumir de ser el 36º del mundo júnior, eso sí, siendo uno de los más jóvenes de la categoría, donde se enfrenta a jugadores hasta dos años mayores, una diferencia importante en una edad tan temprana. Y, a pesar de ello, puede presumir de ser uno de los jugadores más en forma del circuito ITF, donde este año ya ha levantado un título (el J200 de El Cairo) y donde empieza a mostrar grandes maneras para poder llegar a ser profesional.

A pesar de su juventud, esta es su tercera temporada ya como tenista, donde las estadísticas le confirman como un jugador que destaca eminentemente en tierra batida, que tiene un gran nivel en pista rápida y que, en hierba, aún sufre en exceso. De hecho, ha disputado un total de 97 partidos en su carrera, donde puede presumir de haber ganado 73 (un 75% de éxito)... mientras que en hierba ha perdido la mitad de los partidos que ha jugado, donde claramente tiene que mejorar.

Bennani no es un jugador excesivamente alto pero, aun así, sabe sacar un increíble rendimiento a su juego. Tiene una gran derecha desde el fondo de pista, es rápido de piernas y, sobre todo, sabe intuir dónde acabará la jugada. De hecho, ese tenis le ha permitido, tras ganar en El Cairo, jugar en el ATP 250 de Marrakech, donde llegó a ganar un partido, ante Vit Kopriva. Tan buenas fueron las sensaciones que el Mutua Madrid Open no dudó en ofrecerle una wildcar para que disputara el torneo.

"Es un gran honor y un privilegio para mí ser invitado a jugar el Mutua Madrid Open este año. Tener la oportunidad de participar en uno de los torneos más prestigiosos del mundo con apenas 16 años es algo muy especial. Estoy muy agradecido y daré mi mejor nivel para que todos sientan orgullo, especialmente la comunidad árabe que tanto me apoya. Este es el principio de una carrera profesional en la que no me pongo límites", declaraba Bennani al torneo.

Tras dar sus primeros pasos en el circuito ATP, que le han permitido colocarse como el 1.058 del mundo, el joven marroquí quiere seguir quemando etapas en busca de su sueño: llegar a ser tenista profesional. De momento, su sueño tan solo acaba de comenzar, pero está convencido de poder llegar muy lejos en los próximos años. Y, por qué no, convertirse en el mejor jugador de la historia de su país. De momento, Reda Bennani ya ha comenzado a dar sus primeros pasos.