Los dos tensos minutos entre Munar y Kokkinakis en Madrid: "No vuelvas a decirme que me calle"

Jaume Munar derrotó este viernes a Tallon Griekspoor en segunda ronda del Mutua Madrid Open. Pero, una ronda antes, el tenista español logró desembarazarse de Thanasi Kokkinakis para lograr seguir vivo en la capital española, en un partido donde el balear tuvo que sacar su mejor juego para remontar y cerrar el partido. Sin embargo, la tensión fue en aumento con el paso de los puntos, tanto que, al final del choque, los dos tenistas tuvieron sus más y sus menos.

En un partido muy igualado, Munar consiguió llevarse la primera manga en el tiebreak, donde estuvo más fino en los detalles para decantar el set de su lado [7-6(7)]. Sin embargo, Kokkinakis se puso las pilas en el segundo parcial con el objetivo de tratar de igualar el choque y, de hecho, tomó una ventaja considerable para ponerse con 2 a 5 a su favor. Pero, entonces, el jugador balear volvió a brillar para llevar el choque al desempate y, de nuevo, llevárselo [7-6(3)].

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Rubén Rodríguez

Pero Kokkinakis no se tomó demasiado bien esa remontada. Y no solo por perder el partido sino, especialmente, porque el jugador australiano consideraba que el español estaba celebrando los puntos de manera más exagerada de lo que debía. De hecho, el 111º del mundo no dudó en recriminárselo varias veces en la pista, al entender que la euforia era desmedida con los golpes ganadores. Es más, en el segundo set ya hubo un enganchón entre ambos.

Con 2 a 4 para el australiano, Kokkinakis no dudó en pedirle a Mohamed Lahyani, el juez de silla, que controlara la intensidad de Munar celebrando los puntos. Mientras dialogaban, Munar se metió en la conversación, ante lo que el australiano no dudó en espetarle un "no te callas ni un momento". Entre los abucheos del público, el umpire consiguió calmar los ánimos y que el partido se reanudara, donde el español llegó a salvar una bola de set. Pero todo estalló al final del partido.

Al término, en el tradicional choque de manos entre ambos jugadores en la red, Munar no dudó en echarle en cara su actitud a Kokkinakis, al entender que había sido una falta de respeto lo que le había dicho en pista. La tensión fue creciendo entre ambos, entre reproches y alguna falta de respeto que duró cerca de dos minutos, eso sí, sin que pasara a mayores. Los dos jugadores conversaron, cada uno dando su punto de vista, pero sin resolver el conflicto.

"No me vuelvas a decir que me calle", le dijo Munar al australiano. "¿Cómo?", respondió este. "Que no me vuelvas a decir que me calle", insistió. "¿O qué?", le espetó Kokkinakis. A partir de ahí, el juez de silla hizo amago de intervenir para evitar un problema mayor, pero ambos jugadores le dijeron que estaba todo controlado y que solo estaban intercambiando opiniones. Tras un diálogo tenso, no llegaron a un punto de acuerdo y cada uno se marchó a su banquillo.

Kokkinakis, que es la pareja de dobles de Nick Kyrgios y uno de sus mejores amigos en el circuito, no se tomó demasiado bien la intensidad del español en la pista, mientras que Munar no aceptó de buen grado que le pidiera que cambiara su forma de alegrarse de los puntos. Un partido tenso que creció con el paso de los juegos y que, en la red, terminó por explotar. Un cruce de declaraciones subidas de tono que, por fortuna, se quedaron solo en eso.