Carlos Alcaraz olvida los problemas y a su "no enemigo" Nadal para volver a sonreír en París

Carlos Alcaraz ya está en dieciseisavos de final de París-Bercy, el último Masters 1.000 de la temporada, tras derrotar en primera ronda al japonés Yoshihito Nishioka. El tenista español recupera así la sonrisa tras la derrota frente a Felix Auger Aliassime en Basilea, tratando de dejar de lado los problemas físicos que atraviesa y de conseguir lo que su "colega" y "no enemigo" Rafa Nadal (quien cayó eliminado en primera ronda ante Tommy Paul) nunca ha logrado en su carrera: levantar el título en esta pista parisina.

La temporada ya está tocando a su fin y Alcaraz la está acabando con la lengua fuera. A pesar de sus 19 años, la exigencia de su calendario y de sus logros le han llevado a sufrir ciertas dolencias que asumirá de la mejor manera posible para tratar de acabar el curso en alto. El murciano ha asegurado que los problemas no son preocupantes y que está convencido de poder tolerarlos hasta final de año, pero es el mejor reflejo de la dificultad que conlleva un deporte como el tenis.

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Rubén Rodríguez

Desde hace algunas semanas, el español arrastra molestias en una de sus rodillas que, incluso, casi le hacen no jugar en París. Y es que el trote de Alcaraz es importante: ahora mismo, suma 68 partidos en la temporada, con cinco títulos a sus espaldas -Río, Miami, Barcelona, Madrid y el US Open-, a lo que hay que sumar viajes y cambios de superficies constantes. A pesar de su juventud y de ser un portento físico, incluso un jugador como Alcaraz puede llegar a resentirse.

"Es un poco doloroso, pero el calendario es muy exigente. Estamos jugando y viajando sin apenas descansos y es normal que tengamos algunos dolores. Todos los jugadores los tienen y aprendemos a lidiar con ellos. Me siento bien físicamente y estoy listo para jugar aquí en París y en Turín la Copa de Maestros", explicaba el murciano en rueda de prensa. De momento, en su debut ante Nishioka, no se dejaron notar esos problemas físicos con los que cuenta.

Pero el número uno del mundo está seguro de poder superar los problemas físicos para pelear por un nuevo título antes de disputar las ATP Finals, aunque sabe que no será nada sencillo, pues el cuadro está lleno de jugadores de primerísimo nivel. Todos los grandes están en la pista francesa, en el último gran campeonato previo al Torneo de Maestros, del que ya hay que quitar de la ecuación tanto a Medvedev como a Rafa Nadal.

Y es que, por primera vez en la historia, dos tenistas españoles lideran el ránking de la ATP, algo nunca antes visto en la historia de nuestro deporte y que podría ser sinónimo de rivalidad. Aunque nada más lejos de la realidad: "Nadal no es un enemigo. Es cierto que Rafa está luchando por el número uno, pero fuera de la cancha nosotros somos colegas, al menos es la forma en que lo veo. No es mi enemigo y, más allá de esa relación, intentaré seguir siendo el número 1", explicaba el murciano, horas antes de la eliminación de su compatriota.

Ahora, tras conseguir la primera victoria en París-Bercy, la intención de Alcaraz es continuar con la línea de juego ascendente en busca de un nuevo título antes de que acabe el curso, aunque el siguiente rival no será nada sencillo: Grigor Dimitrov. Soñar es gratis.