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De hacer historia a cambiar pañales: así es la gran 'desconocida' de las 'semis' de Wimbledon
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Tatjana Maria SE MEDIRÁ A ONS JABEUR

De hacer historia a cambiar pañales: así es la gran 'desconocida' de las 'semis' de Wimbledon

La tenista alemana, 103ª del ránking WTA y poco acostumbrada a llegar a estas alturas de los grandes torneos, tiene en sus manos poder romper con un muro de hace más de 42 años

Foto: Tatjana Maria celebra su pase a semifinales. (EFE/EPA/Andy Rain)
Tatjana Maria celebra su pase a semifinales. (EFE/EPA/Andy Rain)

"¿Vas a celebrar la victoria a lo grande?", preguntaban los periodistas a Tatjana Maria tras clasificarse a las semifinales de Wimbledon. Su respuesta, no dejaba a nadie indiferente: "Para nada, ahora me toca cambiar pañales". Y es que la veterana jugadora alemana es, sin ningún género de dudas, la gran sorpresa del torneo: ahora, enfrente tendrá a la gran favorita, la tunecina Ons Jabeur, un hueso duro si quiere meterse en la primera final de un Grand Slam... a sus 35 años.

Maria es una de las muchas jugadoras de clase media del circuito, una 'trabajadora' del tenis sin demasiados focos, pero que lleva toda una vida ligada a una raqueta y que, en los años finales de su carrera, está viviendo su gran despegue. De hecho, hasta la fecha, su mejor resultado en un Grand Slam fueron los treintaidosavos de final que alcanzó precisamente en Wimbledon en 2015. Ahora, está a un partido de meterse en la gran final del torneo. Casi nada.

Foto: Nadal y Moyá, en un entrenamiento. (EFE/Cati Cladera)

Pero Tatjana Maria tiene aún mucho más mérito por lo conseguido si tenemos en cuenta de que, en el último año, prácticamente no ha competido tras haber sido madre. Hace escasos meses, tras el nacimiento de su segunda hija, decidía volver a las pistas con la intención de disfrutar de sus últimos años de tenis a nivel profesional, antes de colgar la raqueta y dedicarse a su familia... pero el destino le tenía guardada la mayor sorpresa de su carrera deportiva.

Ubicada en el puesto 103 del ránking de la WTA y muy lejos de las rondas finales de los principales torneos, la alemana está sorprendiendo a todo el mundo por su manera de jugar en Wimbledon. Bien apoyada por un contundente saque y con la clara mejora de su revés en los últimos meses, ha ido eliminando a rivales de mayor entidad hasta plantarse en todas unas semifinales. Y, por qué no, seguir soñando con un triunfo que sería legendario.

Maria llegaba a Wimbledon con la intención de competir y seguir recuperando sensaciones tras su vuelta a las pistas, pero lo que no podía ni imaginar era lo que ha conseguido en la hierba londinense: meterse en todas unas semifinales y jugando un tenis de mucho nivel. Tras derrotar a su compatriota Jule Niemeier por 4-6, 6-2 y 7-5, se ha puesto a un paso de meterse en la gran final y, por qué no, tratar de hacer algo que solo una tenista ha hecho en toda la historia.

Sería en 1980 cuando la australiana Evonne Goolagong ganaba la final a Chris Evert (6-1 y 7-6), en un partido que significaba mucho más que un título. Y es que aquella victoria, hace ya más de 42 años, es la primera y única vez en la Era Open en la que una jugadora que ha sido madre ha sido capaz de ganar un Grand Slam. Ahora, Maria puede lograr romper una barrera histórica para reivindicar que el triunfo nada tiene que ver con la edad y sí con el esfuerzo.

A lo largo de su carrera, solo suma dos títulos WTA (Mallorca 2018 y Bogotá 2022) pero, ahora, tiene en sus manos una oportunidad única en su carrera. "Es un sueño compartir esto con mi familia. Hace un año estaba dando a luz y ahora... ¡Esto es una locura!", afirmaba tras derrotar a Niemeier. Una 'desconocida' se ha plantado en las semifinales de Wimbledon y quiere seguir soñando. Es su momento y Maria no está dispuesta a desaprovecharlo.

"¿Vas a celebrar la victoria a lo grande?", preguntaban los periodistas a Tatjana Maria tras clasificarse a las semifinales de Wimbledon. Su respuesta, no dejaba a nadie indiferente: "Para nada, ahora me toca cambiar pañales". Y es que la veterana jugadora alemana es, sin ningún género de dudas, la gran sorpresa del torneo: ahora, enfrente tendrá a la gran favorita, la tunecina Ons Jabeur, un hueso duro si quiere meterse en la primera final de un Grand Slam... a sus 35 años.

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