¿Es la muerte del 'Big Three'? Las últimas horas del trío que cambió la historia del tenis

• Nadal - Zverev, semifinal de Roland Garros hoy

Se acaba una época gloriosa para el tenis mundial. Nunca antes en la historia -y ya es mucho decir-, tres jugadores habían dominado el circuito con brazo de hierro durante quince años, mostrando gran superioridad con respecto al resto de rivales y luchando en cada torneo por ser los mejores del mundo. El trío formado por Rafa Nadal, Novak Djokovic y Roger Federer está muy cerca de tocar a su fin y, con él, posiblemente uno de los momentos cumbre del deporte mundial.

Rafa Nadal (mañana cumple 36 años), Novak Djokovic (35 años) y Roger Federer (40 años), el 'Big Three', son historia viva del tenis y, solo entre ellos, suman un total de 61 Grand Slam. El número ya es llamativo de por sí, pero lo es mucho más si lo ponemos en contexto: es el mismo número de títulos resultante de que los tres, y solo los tres, hubieran ganado todos los 'grandes' durante quince años consecutivos. Es, sin duda, la demostración de una hegemonía nunca antes vista en el deporte.

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Rubén Rodríguez

Pero, como todo en la vida, estamos ante los últimos momentos de la etapa más brillante de la historia de este bello deporte. Todo comenzó hace unos meses con Federer. El suizo, con algunos problemas físicos, comenzó a espaciar su participación en diversos torneos, con la intención de llegar en plena forma a Wimbledon 2021... donde alcanzó los cuartos de final. Aquel 7 de julio de 2021 cayó derrotado ante Hubert Hurkacz y, desde entonces, no ha vuelto a jugar un partido.

Federer no ha anunciado oficialmente su retirada, pero no es menos cierto que, después de casi un año sin competir, tácitamente se puede estar hablando de su adiós. Pero quien sí se ha desmarcado hablando de sus últimos momentos en pista es Rafa Nadal. Su caso es curioso, pues también las lesiones son las que le han ido mermando y limitando en su desempeño, pero eso no le ha impedido ser competitivo. De hecho, está en semifinales de Roland Garros.

Pero los continuos dolores en su pie izquierdo debido a la enfermedad crónica que sufre en su escafoides han provocado que la retirada no sea una posibilidad lejana, sino que ya la haya puesto sobre la mesa: "No sé qué pasará después de este torneo. Estoy buscando una solución a mi pie, pero no la he encontrado. El público sabe que no voy a estar aquí muchas más veces", decía este miércoles tras su increíble victoria ante Djokovic. Más claro, agua.

Y es que el español está sufriendo mucho para poder competir en pista. Los resultados dicen lo contrario, pues está haciendo una de sus mejores temporadas: suma tres títulos este año (entre ellos, el Open de Australia), lleva una racha de 23 victorias por solo 3 derrotas y está en disposición de asaltar su decimocuarto título de Roland Garros. Sin embargo, solo Nadal sabe los dolores que sufre y el esfuerzo que está haciendo. Si ya habla de retirada, es por algo.

El último de este trío es Novak Djokovic, posiblemente el único de los tres que aún tiene cuerda para rato: no solo por ser el más joven, sino también porque las lesiones le han respetado a lo largo de su carrera. A día de hoy, el ránking de Grand Slam lo lidera Nadal con 21 en su poder y, en caso de ganar en París, tendría dos de ventaja sobre el serbio, quien buscaría enjugar esa diferencia para intentar liderar este trío histórico. Pero cuidado, porque el relevo generacional no se lo pondrá fácil.

Los Zverev, Medvedev, Rublev o Tsitsipas han irrumpido con fuerza en el panorama internacional y serán rivales difíciles de superar para Nole. Todo ello sin tener en cuenta a Carlos Alcaraz, el gran soplo de aire fresco del tenis mundial quien, con solo 19 años, tiene un presente y un futuro más que prometedores. Si algún día Roger y Rafa deciden no seguir en el tenis, Djokovic no tendrá un camino de rosas en los diferentes torneos que juegue. Tendrá que sudar... y mucho.

Será cuando acabe Roland Garros cuando sepamos qué ocurre con Nadal: "Hablaré de mi pie cuando acabe el torneo, daré todas las explicaciones", afirmaba el español. Pero lo que tiene claro es que, con dolor, no puede seguir jugando y si no encuentra una solución a corto plazo, ha llegado el momento de valorar si merece la pena seguir hipotecando su salud. Es una decisión que solo le corresponde a él, pero puede ser el principio del fin definitivo al 'Big Three' del tenis mundial.