Shapovalov, de liarla con Nadal a estallar en el Masters de Roma: "Es estúpido, callaos la boca"

Denis Shapovalov es, sin ningún género de dudas, uno de los grandes talentos del tenis mundial. El canadiense, actual número 16 del mundo, es uno de los jugadores de nueva generación que está llamado a estar entre las mejores raquetas del momento: tiene buen saque, gran derecha, es capaz de jugar a diferentes ritmos y alturas... pero es propenso a sufrir salidas de tono en la pista. La última, en Roma, algo que el jugador califica como "algo que debo aprender a manejar".

Todo sucedió en el partido del Masters de Roma que enfrentó a Shapovalov con el local Lorenzo Sonego. El canadiense dominaba el partido tras ganar el primer set por 7 a 6 (5) y estaba ante un punto clave para evitar que se le escapara el segundo set. Tras un saque con el que lograba la igualada a 4 juegos, Sonego protestó al entender que el servicio no había entrado, algo que el juez de silla ratificó tras observar la marca de la bola... que incendió a Shapovalov.

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Rubén Rodríguez

El árbitro indicó que, efectivamente, la bola había sido mala, situación que generó que Shapovalov se quejara. Así, saltó la red para mostrarle la marca correcta, al entender que estaba mirando una equivocada, lo que provocó otro 'problema' más: el público comenzó a silbar al canadiense, mientras el juez de silla le comunicaba que iba a ser sancionado por pasar la red, algo que no está permitido en el tenis. Entonces, el tenista canadiense entró en erupción.

"Solo te estaba mostrando la marca", comenzó a explicar Shapovalov. "Llama al supervisor, esto es una gilipollez, solo te estaba mostrando dónde había botado la bola. No he hecho nada antideportivo. ¿Cómo me puedes sancionar por eso? Es estúpido", afirmaba. En ese momento, acudió a hablar con el supervisor para explicar cómo había visto la jugada, ante lo que el público aumentó sus protestas. "Callaos la boca", expresó a voz en grito contra la grada, mostrando su enfado.

El partido continuó con la correspondiente sanción para el canadiense que, a pesar de perder la segunda manga (3-6), logró dar la vuelta al encuentro y llevarse la victoria en el tercer y definitivo parcial (6-3). Al término del partido, reconoció que su comportamiento "es algo que debe aprender a manejar", si bien pidió que el tenis sea más severo con los aficionados irrespetuosos: "En la NBA son bastante estrictos con la seguridad y los aficionados no cruzan la línea. Si lo hacen, son expulsados".

Ya la tuvo con Nadal

Sucedió en cuartos de final del Open de Australia, nada más comenzar el segundo set. La primera manga se la llevó el español por 6-3, en un visto y no visto y pasando por encima de Shapovalov. Así, comenzó el segundo set, en el que servía el canadiense... y llegó su enfado. Dispuesto en pista para sacar, Nadal tiró de su habitual ritual de llevar las toallas al fondo de la pista, secarse los brazos, la cara y ajustarse la cinta del pelo. Denis no pudo más y estalló en cólera contra el juez de silla.

Enfadado por la actitud de Nadal, acudió a Bernardes a quejarse por no entender cómo no sancionaba al español por su pérdida de tiempo antes del comienzo de su servicio. No entendió las explicaciones del juez, lo que le llevó a decir gritando a los cuatro vientos "sois todos unos corruptos", una frase que repitió hasta en dos ocasiones. Una queja que no fue la única del partido y que se repitió varias veces. Varios meses después, Shapovalov ha vuelto a sacar los pies del tiesto.