Djokovic es deportado tras perder su batalla judicial con Australia: "Estoy decepcionado"

Novak Djokovic ha sido deportado de Australia y no participará en el Open de Australia. Así lo decidió la justicia australiana al considerar al serbio un peligro para la salud pública del país debido las irregularidades cometidas en su entrada al territorio -reconocidas por el propio deportista-. La Corte Federal de Australia fue la institución encargada de evaluar los argumentos de la defensa del serbio en una vista de más de cinco horas. La defensa de Djokovic no logró convencer al jurado de que su actuación en la última semana entraba el marco legal. Pasado el mediodía español, Djokovic abandonaba el país en un vuelo hacia Dubai, según medios locales, en un viaje con escala antes de llegar a Serbia.

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Carlos Prieto

Djokovic se pronunció minutos después del fallo judicial a través de un breve comunicado en el que aseguró sentirse "extremadamente decepcionado". "Me gustaría hacer una declaración para abordar los resultados de la audiencia judicial. Ahora me tomaré un tiempo para descansar y recuperarme, antes de hacer más comentarios. Estoy extremadamente decepcionado con el fallo de desestimar mi solicitud de revisión, lo que significa que no puedo quedarme en Australia y participar en el Open de Australia", reza el texto. Está previsto que el serbio vuelve a tomar la palabra una vez finaliza el Grand Slam.

"Respeto la decisión del Tribunal y cooperaré con las autoridades pertinentes. Me incomoda que el foco en las últimas semanas haya estado puesto en mí y espero que ahora todos podamos concentrarnos en el juego y el torneo que amo. Me gustaría desear a los jugadores, oficiales del torneo, personal, voluntarios y fanáticos todo lo mejor. Finalmente, me gustaría agradecer a mi familia, amigos, equipo, simpatizantes, fanáticos y mis compatriotas serbios por su continuo apoyo", termina Djokovic.

En lo estrictamente deportivo, ya se conoce la primera consecuencia de la eliminación de Djokovic. El italiano Salvatore Caruso, número 150 del mundo, ha entrado como 'lucky loser' para sustituir al serbio en el cuadro masculino del torneo. Caruso se enfrentará a Miomir Kecmanovic este lunes. El número 1 del mundo pasó sus últimas horas en Australia detenido en el Park Hotel de Melbourne, lugar donde ya estuvo cinco días encerrado. A excepción de la primera vez en la que se le quitó su visado, en esta ocasión pudo reunirse con su equipo legal para preparar la vista.

A pesar de ser detenido tras la orden del ministro de Inmigración Australia Alex Hawke, que lo consideró un problema para la salud pública del país por su actitud y sus mentiras en la documentación entregada, Djokovic llegó a la vista decisiva con una pequeña victoria legal. En la sesión previa celebrada el sábado por la mañana (hora local), sus abogados consiguieron llevarse la palma respecto al procedimiento de la vista. Este se realizará tres jueces -los magistrados James Allsop, Anthony Besanko y David O'Callagha- y no ante uno, como pedían las autoridades locales. ¿Qué significa? La decisión era definitiva y no había posibilidad de apelación. Tras más de cinco horas de proceso legal, los jueces por unanimidad fallaron en contra del tenista serbio.

Australia ha derrotado a Djokovic en la batalla legal, ha sido expulsado y podrá recibir un castigo de hasta tres años sin poder pisar su territorio, que todavía se desconoce. El tenista pierde la posibilidad de competir en su torneo predilecto. Hay que recordar que el serbio está ahora mismo empatado en número de Grand Slams tanto con Roger Federer como con Rafa Nadal. Su gran objetivo es romper un empate que le permitiría sumar puntas para ser recordado como el mejor tenista de todos los tiempos. Solo el tenista español tendrá la opción de lograr el desempate en Australia, ante la ausencia de sus dos competidores.

Kyrgios, el gran apoyo de Djokovic en el circuito

Nick Kyrgios se ha destapado como el gran apoyo de Djokovic en el circuito. Rafa Nadal o Andy Murray expresaron su lamento por la situación que vive el serbio, pero también se mostraron a favor del cumplimiento de las normas. El australiano, por su parte, criticó la decisión de su ministro de inmigración, Alex Hawke: “Dijo que es una amenaza a nuestras fronteras. Él no lo es. E como si fuera un arma de destrucción masiva. Novak está aquí para jugar al tenis, no molesta a nadie. El maltrato de la gente de Melbourne en estos últimos dos años ha sido atroz".

El siempre polémico tenista australiano ha tenido además palabras de reproche para otros sus compañeros como el propio Nadal: “Djokovic me ha contactado por Instagram y me dio las gracias por defenderle. Ni yo mismo me esperaba salir ante los medios. Como persona, se siente bastante aislado por todo esto. Es una situación peligrosa para cualquiera. Cuando sientes que el mundo está en tu contra y que no tienes nada que hacer... A nivel personal, necesita el apoyo de otros jugadores. Tsitsipas, entiendo que tengas tu punto de vista sobre la vacunación. Murray, siempre políticamente correcto. Nadal, lo que sea..., pero, ¿dónde está tu apoyo a Novak? Hay que ponerse en su piel”.

Aunque Djokovic ha recibido mayoritariamente comentarios negativos por sus actos de las últimas dos semanas, el propio presidente de su país, Aleksandar Vucic, señaló a Australia como causante del conflicto: "¿Por qué lo maltratáis y por qué lo humilláis, no solo a él sino también su familia y toda una nación libre y orgullosa?". Estas palabras del dirigente chocan con las expresadas previamente con las de la primera ministra serbia Ana Brnabic, quien señaló “la gravedad” de los actos del tenista por acudir a actos públicos habiendo dado positivo por coronavirus sin respetar las normas.