El robo a un ex tenista español en pleno encierro: "Es un país de pícaros y maleantes"

El ex tenista español Tomás Carbonell, campeón de dobles mixtos en Roland Garros (2001) junto a Vivi Ruano, ha denunciado un robo en uno de sus clubes de pádel en este tiempo de confinamiento por el coronavirus. Lo ha hecho público a través de sus redes sociales. Pese a que no es la primera vez que le pasa (la quinta en tres años), que este último se haya producido durante el confinamiento por la crisis sanitaria le duele especialmente. El antiguo miembro de la ATP, de 51 años, tiene cuatro clubes deportivos situados en la comarca del Maresme, en Barcelona.

Carbonell se ha despachado a gusto para 'Marca': "Duele más que otras veces porque en estos tiempos, que uno piensa que hay que ser solidario, seguimos en un país de pícaros, maleantes y aprovechados. Afortunadamente es una minoría, pero hace daño. Sociedad asquerosa, capaz de aprovecharse de estas circunstancias". El hurto se ha producido en la tienda situada en el interior del 'Up Pádel Club', uno de sus centros más frecuentados. De nada le ha servido tener un sistema de videovigilancia. "O pones seguridad privada por la noche o es imposible, pero entonces tendría que cerrar el negocio directamente. La policía te cuenta que llevaban guantes y que es imposible", explica.

"Se han llevado material deportivo y nos han reventado la puerta, pero debía ser gente no profesional. Otras veces se han llevado las cajas registradoras, nos han destrozado la caja fuerte, las máquinas de bebida... Hay veces que se han llevado hasta camillas, todo", indica resignado. El catalán cuenta que la situación es tal que hasta las compañías de seguro empiezan a hartarse: "Sólo una cristalera vale 1.500 euros. A poco que te roben es fácil que sea en total unos 5.000 ó 6.000 euros. El seguro, obviamente se harta de ti, responde pero claro, como ve que la cantidad que pagas es inferior a lo ellos se gastan, o te suben la prima o te invitan a irte".

Por el momento, y pese a que su suerte se repite constantemente, se niega a marcharse del polígono industrial, localizado entre Mataró y Argentona: "Me niego a que alguien quiera echarme de casa, pero sabes que tiene un riesgo. En mi caso, un albano kosovar me puso una pistola durante un robo en casa y después de aquello ya todo ha sido relativo. Estás mucho tiempo durmiendo con un ojo abierto. Estoy por poner un cartel fuera de casa diciendo que no tengo caja fuerte ni dinero", manifiesta. Aparte de su faceta como empresario, Carbonell también es comentarista de tenis para televisión. Las muestras de apoyo no le han tardado en llegar.