El caso Serena cambia el tenis femenino: la WTA facilita la vuelta tras haber sido madre

Hasta ahora, si una tenista sufría una grave lesión disponía de un año para recuperarse. Durante ese tiempo se le respetaba su ranking en la WTA para que, a su regreso, no tuviera que jugar fases previas de los torneos ni enfrentarse a las primeras cabezas de serie en las rondas iniciales. El caso de Serena Williams ha cambiado todo.

Lo mismo sucedía con aquellas deportistas que decidían ser madres: tenían un año de ranking protegido. Pero, a diferencia de una lesión, en este caso se sabía por adelantado que el periodo de baja iba a ser prolongado: 40 semanas de embarazo, recuperación, lactancia… Y eso sin contar las habituales complicaciones en los partos que pueden llevar a prolongadas estancias hospitalarias. Fue el caso de la tenista Victoria Azarenka.

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Rubén Rodríguez

Serena Williams se quejó. La mejor jugadora de la última década fue madre el 1 de septiembre de 2017, pero cuando volvió al circuito en 2018 había retrocedido hasta el puesto 453 en la clasificación mundial, dejando de ser cabeza de serie en muchos torneos, como en Roland Garros. Eso le hizo sufrir más de lo necesario para volver a lo más alto del tenis femenino y ha sido el ejemplo que ha llevado a la WTA a tomar cartas en el asunto: ahora serán 3 años los que se protegerá su ranking.

La WTA da más tiempo

El Consejo de Jugadoras de la WTA emitía un comunicado en el que se congratulaba de la decisión de la asociación: "Nuestras jugadoras deben sentirse cómodas y confiadas para poder pasar un tiempo fuera de las pistas y tener familia o recuperarse de una lesión, y creo que estas nuevas reglas lo respaldan".

Pero, ¿qué pasa con la jugadora que entraría a formar parte de las cabezas de serie si no se respetara el ranking de las jugadoras que regresan al circuito? Peter Johnston, exvicepresidente de la WTA, reconoce al programa PM de la ABC que “siempre hay un impacto. Cuando haces algo para beneficiar a las mejores, ¿afecta a las tenistas jóvenes?”

Es el negocio del entretenimiento: equilibrar las necesidades para que tus mejores jugadoras permanezcan en la cancha el mayor tiempo posible

La primera implicada es la tenista que deja de ser cabeza de serie para dejar su sitio a la tenista top que regresa a las pistas. Al final, como reconoce Johnston, es un tema empresarial: “El circuito es el nivel más alto y despiadado de deporte profesional, pero también es parte del negocio del entretenimiento: tienes que equilibrar las necesidades para que tus mejores jugadoras permanezcan en la cancha el mayor tiempo posible”.

Otros cambios en las reglas

La ampliación a tres años del periodo de recuperación por maternidad o lesión no es la única decisión que ha tomado la WTA. También amplía de ocho a doce el número de torneos en el que las jugadoras pueden hacer uso de su ranking protegido.

Pero la asociación que dirige el tenis femenino ha querido legislar también sobre los uniformes de las jugadoras para acabar con los problemas de vestimenta como los que se suscitaron en el pasado Roland Garros. Serena Williams se presentó en la cancha usando un vestido de una sola pieza con leggins y sin falda, algo que no estaba permitido al sobrepasar el gemelo y no llevar la falda o vestido incorporado.

Incluso el presidente de la federación francesa, Bernard Giudicelli, se quejó públicamente y aseguró que no se le permitiría volver a jugar con ese uniforme en París. Ahora, la WTA ha decidido que las tenistas sí puedan usar pantalones de compresión como los que lució la exnúmero 1 del mundo.