Cuando a Feliciano López le toque ir a recoger a Federer al aeropuerto

Cuenta Feliciano López que hace poco más de un mes, antes del inicio de la gira norteamericana, tuvo la oportunidad de entrenar con Roger Federer en Róterdam (Países Bajos). Entre peloteo y peloteo, el español le preguntó al suizo por su calendario, sus planes para la temporada de tierra batida y su posible presencia en el Mutua Madrid Open que se juega a principios de mayo. Federer, que aún no había anunciado que repetirá el plan de 2017 y no volverá a jugar hasta la hierba, le habló muy bien del torneo madrileño, que ganó en 2006, 2009 y 2012. Uno de sus mejores recuerdos es que Manolo Santana, director del torneo, se molestaba en ir a recibirlo al aeropuerto. Trato de estrella para uno de los mejores jugadores de la historia, si no el mejor.

A partir del año que viene, el encargado de dispensar esa clase de privilegios, si lo estima oportuno, será Feliciano López, que este año ejercerá de director adjunto del evento y en 2019 relevará a Santana. El jugador toledano aún no se ha retirado, pero ya está dando sus primeros pasos en la siguiente etapa de su carrera. "Este año voy a estar jugando el torneo, principalmente. Es un año de transición en el que estoy aprendiendo muchas cosas junto a Manolo y toda la gente que trabaja ahí, pero yo voy a estar más dedicado al torneo", explicó este jueves el jugador a El Confidencial tras el el desayuno coloquio 'Mutua Madrid Open. Los retos del futuro' organizado por 'Europa Press'.

Su última participación en Madrid por la norma

A partir del año que viene se dedicará al completo a la dirección del evento y dejará de lado la raqueta por obligación, al menos en Madrid: la ATP prohíbe compatibilizar ese cargo con la participación. La edición de 2018 será la última que juegue. La primera fue la de 2002, cuando entró en el cuadro con una invitación y casi gana a Andre Agassi. En total, 17 participaciones, el mismo número de ediciones que lleva el torneo. Ningún otro jugador las ha jugado todas. Feliciano ve cerca su retirada, pero no le pone fecha. Llegará, pero más por edad que por rendimiento: los seis o siete últimos años han sido los mejores de su carrera, dijo este jueves durante el coloquio.

"Hay jugadores como Tommy Haas o James Blake que están dirigiendo torneos de la misma categoría que Madrid, en Miami e Indian Wells, incluso Tommy lo hizo en activo como yo. Creo que es muy bueno que haya jugadores recientemente retirados o incluso en activo que estén trabajando en torneos, sobre todo por la parte de tratar con los jugadores o su entorno. Luego la otra parte más interna del torneo hay que aprenderla con el tiempo. En un torneo como Madrid, que tiene una dimensión tan grande, hay muchas más cosas que tratar con los jugadores", explicó.

"Llevo mucho años jugando el torneo y conozco muchas cosas, pero otras muchas de dentro no. He vivido el torneo siempre desde el lado del jugador, y ahora tengo la oportunidad de vivirlo desde dentro y tengo mucha ilusión. Pero este año todavía voy a estar dedicado a jugarlo", continuó el tenista, que la semana pasada formó parte del equipo español que se clasificó para las semifinales de la Copa Davis.

"A veces el margen de mejora es pequeño porque el torneo de Madrid está muy arriba y el listón está altísimo. Pero creo que siempre se pueden mejorar cosas. Confío mucho en la gente que está trabajando, que ha puesto el torneo de Madrid en lo más alto. Vamos a intentar que siga ahí", explicó. Eso no quita para que aspire a cotas muy altas. "A mí me gustan los retos grandes. Me gustaría que el torneo de Madrid pueda llegar algún día a tener una categoría por encima de la que tiene ahora y que se diferencie de los otros torneos de su categoría que hay en el mundo y que pueda ser llamado un quinto 'grand slam' o algo diferente. Dependemos mucho de los permisos de la ATP, pero creo que es algo con lo que la gente del torneo lleva soñando tiempo y ojalá algún día se pueda cumplir", dijo.

Desde ya mismo, pero sobre todo desde 2019, él tendrá un papel muy importante en la consecución de esas esa y otras metas como la continuidad del torneo Madrid, por ahora solo asegurada hasta 2021. También la reintroducción de las pistas azules, rechazadas por los jugadores en 2012. El presidente y CEO del Mutua Madrid Open, Gerard Tsobanian, dijo este jueves que trabajan para mejorarlas. Con todo eso y mucho más tendrá que lidiar Feliciano López, que el año que viene cambiará el pantalón corto por el traje.