Un exjugador de rugby quema vivos a sus tres hijos y a su mujer y luego se suicida
Rowan Baxter, de 42 y exmiembro de los New Zeland Warriors, utilizó gasolina para avivar las llamas. Tras ello, se apuñaló a sí mismo
Rowan Baxter, exjugador de rugby y defútbol australiano, se suicidó la semana pasada en Camp Hill (Australia) después de quemar su coche, en el que se encontraban su mujer y los tres hijos de ambos, de 6, 4 y 3 años de edad. Todos murieron. Baxter, de 42 y exmiembro de los New Zeland Warriors, utilizó gasolina para avivar las llamas. Tras ello, se apuñaló a sí mismo en el pecho hasta morir.
Local media said former rugby player Rowan Baxter died from a self-inflicted stab wound after allegedly dousing his family with petrol and setting them alight in their car in Brisbane pic.twitter.com/49fblw1AA6
— Reuters (@Reuters) February 20, 2020
Ex-rugby player Rowan Baxter, wife and 3 kids dead in 'horrific' apparent murder-suicide https://t.co/HgdGjgEKhk pic.twitter.com/bLQrUfnrkF
— New York Post (@nypost) February 19, 2020
La mujer del deportista, Hannah, de 31 años, tuvo tiempo de intentar salir del vehículo, gritando: "¡Me están echando gasolina encima, salvad a mis hijos!", pero falleció al llegar al hospital Royal Brisbane debido a las quemaduras. El automóvil llegó a explotar y una patrulla de bomberos acudió a la escena del crimen alertada por varios viandantes. Uno de ellos auxilió a la mujer para tratar de extinguir las llamas.
Los menores sí murieron calcinados dentro del coche. Baxter y su mujer estaban en proceso de separación desde el pasado año y mantenían divergencias sobre el acuerdo para la custodia de sus tres hijos. Él se había retirado en 2005 de la National Rugby League australiana (NRL) y trabajaba como preparador físico.
La investigación policial de los hechos sigue abierta. "He visto algunas escenas horribles y esto está a la altura de las peores", declaró a la prensa australiana Mark Thompson, el jefe de la investigación.
Rowan Baxter, exjugador de rugby y defútbol australiano, se suicidó la semana pasada en Camp Hill (Australia) después de quemar su coche, en el que se encontraban su mujer y los tres hijos de ambos, de 6, 4 y 3 años de edad. Todos murieron. Baxter, de 42 y exmiembro de los New Zeland Warriors, utilizó gasolina para avivar las llamas. Tras ello, se apuñaló a sí mismo en el pecho hasta morir.