Los dos emails que han separado a España del Mundial de rugby

Unas alineaciones indebidas provocadas por unas demandas cruzadas tras el escándalo de Bruselas han terminado con España naufragando en la orilla y sin el esperado Mundial de rugby de Japón 2019. La demanda que señaló a Mathieu Belie y Bastien Fuster provenía de Rumanía, que actuó con despecho tras ser demandada por Rusia. Y todo sirvió para enterrar algo que ha pasado casi inadvertido, la petición de World Rugby de repetir el partido de Bruselas debido a la parcialidad del arbitraje de Vlad Iordachescu. A toro pasado, todo se podía haber resuelto con un par de emails...

Con un poco de perspectiva, hay que señalar que esta decisión de World Rugby es de una trascendencia desconocida. Jamás la organización mundial había solicitado que se repitiese un partido debido a la mala fe de un arbitraje. Pero analizando más a fondo la cuestión, todo esto se podría haber evitado si al conocer la designación del rumano para el Bélgica-España la Federación Española hubiese actuado por los cauces formales. España se puso en contacto con Rugby Europe a través de una llamada. La que realizó José María Epalza, exdirectivo de Rugby Europa durante años y vicepresidente de la Española, a Patrick Roben, el designador arbitral. En la misma le comentó la circunstancia y le informó sobre la inquietud que había sembrado en España la elección del rumano. Pero Roben no se dio por enterado y mantuvo al rumano. No hizo caso en este caso a la Federación Española, a la que sí atendió cuando Roben aceptó designar al expresidente de la FER Alfonso Mandado como Match Comissioner en partidos de Tier 3.

Si en ese momento España hubiese informado a World Rugby a través de un email de la designación de Iordachescu, la organización mundial habría tomado cartas en el asunto y el rumano no habría dirigido el partido de Bruselas. El problema es que no hubo una notificación formal del asunto a World Rugby hasta que se perdió el partido y se envió la queja por la actuación del rumano. Pero ya era tarde.

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Lo mismo ocurre en el caso de las alineaciones indebidas. España alega que Francia le advirtió que los jugadores eran alienables, pero los federativos españoles no refutaron esa información con World Rugby. Ni esa ni si realmente estaban 'capturados' Belie y Fuster. España debió consultar a la máxima institución del rugby mundial como se apunta en uno de los veinte folios de la resolución que se hizo pública este martes: "En caso de duda España debería haber chequeado con World Rugby cuál era la postura correcta. Así no habría habido dudas sobre qué jugadores podían jugar y cuáles estaban capturados por Francia según la regulación".

Un email habría aclarado los casos de Belie y Fuster. Y otro habría puesto sobre aviso a World Rugby sobre la irregularidad de designar a un rumano para dirigir un Bélgica-España en el que Rumanía se jugaba el pase al Mundial. Dos emails.

Este miércoles a las 12:00 horas, Alfonso Feijoo, presidente de la Federación Española, ha realizado una rueda de prensa junto al vicepresidente José María Epalza y al secretario general, Eliseo Patrón-Costas explicando su versión de los hechos y anunciando que no recurrirán la decisión al TAS, aunque sí presentarán alegaciones a la World Rugby.

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