"¿Traicionado? Sánchez no tenía ningún derecho a ofrecer la Pelota al PNV y politizar el deporte"

Después de más de tres décadas al frente de la Federación Española de Pelota (FEP), Julián García Angulo (Ciudad Real, 1952) no se presentará a las elecciones en las que podría haber optado a su novena reelección. "Es hora de retirarme a mis aposentos", comenta el dirigente más longevo del deporte español, quien atiende a El Confidencial desde su despacho de la sede de la FEP, en la madrileña calle Ferraz.

Aunque solo sea por su larga experiencia como federativo, el manchego conoce perfectamente los entresijos del deporte español. Si a ello se le suma que no es de los que intenta ser políticamente correcto, sino decir las cosas como las siente y piensa, escucharle ayuda a entender muchas cosas. Entre ellas, que la nueva Ley del Deporte no ha servido para solucionar lo que debía solucionar, de ahí que ya se haya quedado vieja.

En su caso personal, al estar al frente de un deporte tan singular como la Pelota, Julián García Angulo ha tenido que lidiar con la oficialidad de las selecciones vascas, una vieja reivindicación del PNV que formó parte de las negociaciones para apoyar los Presupuestos de Pedro Sánchez e, incluso, sus investiduras. Así, a finales de 2022, el grupo nacionalista arrancó al presidente del Gobierno un acuerdo "histórico" para reconocer la oficialidad de las selecciones vascas de surf y pelota.

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En todo caso, dicho acuerdo quedaba supeditado a que contase con la aprobación de las respectivas federaciones internacionales, lo que limitaba su alcance, pero dejaba la patata caliente en manos de las federaciones españolas. Así, el respaldo de García Angulo fue fundamental para que la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIPV) vetara la presencia de Euskadi de forma oficial, aunque esto es algo que en breve podría cambiar. De esto y otros temas hablamos con el manchego.

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PREGUNTA: En la hora del adiós, ¿qué nota pone a sus ocho mandatos como presidente de la Federación Española de Pelota?

RESPUESTA: No me atrevo a ponerme una nota, pero lo que sí puedo decir es que nos encontramos una situación muy compleja. Con un presidente que había entrado en prisión por una serie de irregularidades. Tuvimos que afrontar incluso auditorías del Tribunal de Cuentas. Pero, con el esfuerzo de todos, logramos salvar esa situación y poco a poco lavamos la imagen de la FEP. Fue un trabajo arduo y difícil, aunque pusimos unas bases sólidas para ir creciendo paulatinamente. Puedo decir que dejo una FEP que goza de una gran reputación y un saneamiento, que se logró con el sacrificio y el esfuerzo de todos los estamentos que configuran nuestro deporte.

"Nos encontramos una situación muy compleja, con un presidente que había entrado en prisión por cometer una serie de irregularidades"

P: ¿Cuál es el mejor recuerdo de su gestión que se lleva?

R: Haber trabajado en consenso con las federaciones autonómicas y los estamentos de la Pelota. Lo hicimos durante todos mis mandatos, aunque en los últimos años esta relación se ha visto alterada por las desavenencias con algunos presidentes de territoriales que, por intereses personales, han roto ese consenso. También haber llevado las actividades de Pelota por todo el Estado e, incluso, por el mundo. Con competiciones y/o actividades que nos han servido en muchísimos casos para la promoción, lograr visibilidad y acometer mejoras en el parque de instalaciones, frontones y/o trinquetes, que estaba muy envejecido.

P: ¿Y el peor?

R: La politización que algunos han hecho de la Pelota, además de los mencionados intereses personales que han roto el consenso del que hablaba. Estas dos cosas han hecho y están haciendo mucho daño a nuestro deporte.

"Lo peor que he vivido es la politización que algunos han hecho de la Pelota, además de intereses personales que han roto el consenso"

P: ¿Hay algo concreto que le hubiera gustado hacer y le ha sido imposible?

R: Año tras año o, podríamos decir, ciclo tras ciclo, siempre trazábamos unas metas con programas y/o proyectos que de una u otra manera lográbamos alcanzar. Mi asignatura pendiente quizás sea que Euskadi se volviese a integrar dentro de FEP. Pero esto no ha dependido tanto de nosotros como de la voluntad política del Gobierno Vasco, que es quien dirige la Pelota en Euskadi, junto a ciertos entornos interesados.

"¿Mi asignatura pendiente? Quizás que Euskadi se volviese a integrar, aunque esto ha dependido de la voluntad política del Gobierno Vasco"

P: Una curiosidad, siendo usted de Ciudad Real, ¿cómo le dio por la pelota?

R: Pues son varias las circunstancias. En Ciudad Real capital teníamos un frontón descubierto, por cierto, muy malo, pero que nos dio a un grupo de jóvenes la oportunidad de realizar esta práctica deportiva. Después teníamos una federación, en aquellos tiempos provincial, que nos introdujo en la competición, con grupos de vascos, riojanos y navarros que residían en Ciudad Real, quienes, al enterarse, se sumaron. Además, yo conocía la Pelota por amigos o conocidos residentes en Madrid, con los que compartía encuentros en el frontón del Club Tejar, de Somontes.

P: Usted se ha ganado la fama de ser un directivo, permítame la expresión, más de echarle pelotas que de hacer la pelota, ¿no es así?

R: Yo he realizado muchos proyectos para la Pelota, unos mejores y otros peores, pero con mucho interés y nunca solo. Siempre con mis colaboradores y empleados de la FEP. Y la verdad es que sí, creo que le he echado muchas pelotas al enfrentarme a cierta clase política que, más que ayudar o trabajar para los ciudadanos, medran y se dedican a entorpecer nuestro trabajo.

"Le he echado muchas pelotas al enfrentarme a cierta clase política que, más que trabajar para los ciudadanos, medran y entorpecen"

P: Y hablando de los que mandan, ¿qué opina de la inestabilidad que ha habido en los últimos años en el Consejo Superior de Deportes?

R: Creo que llevamos ya demasiados años en los que el CSD se ha convertido en un órgano político más que deportivo. Eso no es bueno para el deporte español. Tanto cambio, ya sea de ministerios, ministros, secretarios de Estado y otros puestos de gestión, hacen difícil el día a día. Falta comunicación y, sobre todo, no se nos dan soluciones ágiles. El CSD debe ser el órgano en donde las federaciones deportivas españolas nos sintamos cobijados y se nos preste colaboración y ayuda.

"Llevamos ya demasiados años en los que el CSD se ha convertido en un órgano político más que deportivo y tanto cambio no es bueno"

P: ¿Cree que tener un Ministerio de Deportes ayudaría a las federaciones y a todo el deporte español en general?

R: No sé si un ministerio del Deporte, pero, como mínimo, no tener tanta dependencia de otro. Quizás depender directamente de Presidencia del Gobierno, como ya se hizo en el pasado y funcionó. Esto mejoraría muy mucho la situación por la que atraviesa el deporte en España. Se necesita interlocución directa para solventar las problemáticas presentes y los grandes retos del futuro. El modelo deportivo actual está obsoleto y, por consiguiente, no funciona. Ante grandes males, hay que poner grandes remedios, pero para eso hay que tener las ideas claras, asumir que el deporte español no funciona y plantear soluciones. Y que conste que no todo es dinero, aunque en la sociedad actual esta sea una de las principales demandas.

P: Usted también ha sido vicepresidente de ADESP, ¿cree que ha cumplido o está cumpliendo con el objetivo con el que se creó?

R: Así es, fui presidente de AFEDES, estuve en la creación de ADESP y desde su fundación ejerzo de vicepresidente. ADESP ha venido a aportar valor al mundo de las federaciones y se están logrando cosas, aunque creo que debería tener más fuerza y presencia ante los diferentes organismos, instituciones y grupos políticos. Para ello debemos posicionarnos de manera contundente ante situaciones que dañan nuestro día a día, deterioran nuestra convivencia y perjudican a la actividad deportiva.

"ADESP debería tener más fuerza y presencia ante organismos, instituciones y grupos políticos. Posicionarnos de manera contundente"

P: ¿En qué estado de salud cree que se encuentra actualmente el deporte español, en general?

R: Vamos saliendo para adelante gracias al esfuerzo de las federaciones, pero solamente eso. Tenemos tremendas dificultades, como incertidumbre en la financiación, pues las convocatorias salen muy tarde y las resoluciones son lentas. Llegan con mucho retraso y, cuando lo hacen, no tienen la efectividad que necesitamos. Para gozar de buena salud, lo primero que hay que tener es una Ley del Deporte acorde a los tiempos y no marcada por decisiones políticas.

P: Y antes de esa Ley del Deporte, un modelo deportivo, ¿no es así?

R: Sí, un proyecto deportivo como país, a partir del cual se dote de medios a las federaciones y sus estamentos para que podamos llevar a cabo las políticas deportivas en el plano competencial que a cada uno le corresponda. Mientras esto no lo tengamos claramente definido, poco o nada avanzaremos. Iremos poniendo paños calientes, ante situaciones coyunturales, pero no resolveremos los problemas de fondo.

"Para gozar de buena salud lo primero que hay que tener es una Ley del Deporte acorde a los tiempos y no marcada por decisiones políticas"

P: ¿Y la Pelota en particular?

R: Estamos inmersos en la misma problemática. Además, en la Pelota sobra la carga política a la que desde el Gobierno Vasco permanentemente se nos somete. Creo firmemente que eso daña al deporte.

P: ¿Lo más complejo de la Pelota es la disparidad de especialidades que tiene?

R: Así es, la cantidad de variedades de canchas, más la cantidad de pruebas, hacen muy difícil su expansión y desarrollo.

"En tanto no tengamos definido un modelo deportivo, iremos poniendo paños calientes, pero no resolveremos los problemas de fondo"

P: ¿Por cierto, por qué modalidad siente usted predilección?

R: Las tradicionales, también llamadas duras, siempre fueron las que más me llamaron la atención, por su dificultad y espectacularidad. Pero todas tienen su encanto. Hablar de Pelota para mí es algo especial y no podría quedarme con una. .

P: Como es inevitable, toca hablar de la Federación Vasca de Pelota Vasca, la Euskadiko Euskal Pilota Federazioa, y su vieja aspiración por independizarse. Como presidente de la Federación Española de Pelota, es lógico que se haya opuesto, pero ¿entiende esta reivindicación?

R: Puedo llegar a entenderla, porque en esta vida todo el mundo puede expresar lo que siente o quiere. Sin embargo, en mi condición de presidente de la Federación Española de Pelota ya expresé mi más rotundo rechazo ante la pretensión de la EEPF. Entendiendo que no solo ataca a los intereses de un miembro debidamente constituido y fundador de la FIPV, sino al propio país que representa y al modelo deportivo actual del deporte de la Pelota.

"Puedo llegar a entender la postura de la federación vasca, pero como presidente de la española ya expresé mi más rotundo rechazo"

P: Por otra parte, esto no es nada nuevo.

R: Esta reivindicación se ha presentado en varias ocasiones sin ningún éxito y sigue estando latente, alimentada por la clase política. Hubo tres intentos reseñables. Uno, en 1998. Otro, en 2002, llegando a ser presentada la propuesta por la Federación Mexicana. Y otro, en 2004, siendo presentada la solicitud por la República Dominicana. También en algunas otras reuniones entre los años 2015 y 2018. Entendemos que esta reivindicación atenta directamente contra el que hasta la fecha ha sido un modelo exitoso y de armonía en el desarrollo y la práctica de las diferentes modalidades de Pelota, tanto en el Estado como a nivel mundial.

P: ¿Puede explicar esto un poco más?

R: La FIPV es la unión de múltiples combinados nacionales. Un modelo que es replicado en la mayoría de los deportes, contrastado en competiciones internacionales y homologable al movimiento olímpico. Además, es una institución de carácter y objeto deportivo, cuya implicación activa en la política de los estados soberanos excede de sus competencias. Reconocer a la EEPF sería otorgarle un estatus similar al de las otras federaciones nacionales integrantes y reconocer un carácter y una aspiración nacionalista, cuyos resultados y posible devenir para el deporte, nadie, ni siquiera la FIPV, puede predecir.

"Reconocer a la EEPF sería otorgarle un estatus similar al de las otras federaciones nacionales, así como una aspiración nacionalista"

P: ¿Considera una traición que Pedro Sánchez pactara con el PNV reconocer federaciones como la vasca de Pelota a cambio de que le apoyaran en su investidura?

R: El PNV aprovechó un momento en el que era consciente de su fuerza y eso puede ser lícito. Sin embargo, creo que el presidente del Gobierno no actuó ni actúa conforme a los compromisos obtenidos con los ciudadanos que le han votado. No puede ser que con estas excepcionalidades tengamos ciudadanos de primera y otros de segunda, en función del deporte que practicas. Pedro Sánchez no tenía ningún derecho a ofrecer los deportes de Pelota y Surf al mundo nacionalista.

P: No debe de ser fácil defender una postura a nivel internacional, mientras su Gobierno hace justo lo contrario...

R: Yo he defendido y defenderé el modelo actual de la FIPV, según sus estatutos actuales. Lo hice con acuerdos de mi Junta Directiva y la Asamblea General. La posición de la Federación Española de Pelota fue y es un rotundo rechazo ante la pretensión de la EEPF y de la propia FIPV de ejecutar un cambio estatuario basado en la modificación de la Ley del Deporte de España. La FIPV no puede estar a los vaivenes que los gobiernos de los países miembros en función de sus intereses políticos.

"El presidente del Gobierno no actuó ni actúa conforme a los compromisos obtenidos con los ciudadanos que le han votado"

P: Aunque al final, como en el resto de deportes, todo depende de la federación internacional. ¿Cree que Sánchez jugó con eso?

R: La nueva Ley del Deporte otorga la facultad a las federaciones internacionales de aceptar a algunas selecciones autonómicas, aunque para ello es preciso contar con un acuerdo previo del Consejo Superior de Deportes. Sánchez corrió muchos riesgos y, lamentablemente, se equivocó. No debió dejarlo al criterio federativo para que tuviésemos enfrentamientos. Lo que sí sería interesante saber es qué negoció el presidente de la FIPV con el PNV o el Gobierno Vasco para aceptar esta petición.

"Sánchez no debió dejar el tema de las selecciones autonómicas al criterio federativo para que nosotros tuviésemos enfrentamientos"

P: ¿Cree que sin usted al frente de la FEP será más fácil que la Euskadiko Euskal Pilota Federazioa logre la independencia?

R: Es evidente que yo he sido el principal obstáculo. Pero no por obcecación, sino porque pienso que su independencia no aporta nada al ámbito internacional de la Pelota. Si realmente quisiese hacer algo por el deporte de la Pelota, estaría integrada en la FEP y trabajaría para que este deporte subiera, colaborando estrechamente como hacen otras federaciones autonómicas. Euskadi no goza de independencia y está integrada en el Estado español. El modelo debería de ser el mismo. Pero está claro que se está utilizando como arma arrojadiza hasta lograr otras reivindicaciones.

"He sido el principal obstáculo para Euskadi, pero no por obcecación, sino porque creo que no aporta nada al ámbito internacional"

P: ¿Alguna de las candidaturas que se han presentado para sucederle en el cargo cree que ha sido creada con esa intención?

R: Aún no se ha presentado ninguna, aunque algunas personas sí han mostrado interés y, por supuesto, hay un grupo que trata de llegar utilizando malas artes y por intereses muy particulares. Están intentando desprestigiar a un posible candidato que manifestó su interés en presentarse, tratándolo de continuista y vinculándole a mi persona. Nada más lejos de la realidad. Mi tiempo en la Pelota española se termina y su destino estará en manos de quienes elija la nueva asamblea. Lo único que espero es que se haga con respeto.

"Aún no se ha presentado ninguna candidatura, pero hay un grupo que trata de llegar utilizando malas artes y por intereses muy particulares"

P: Para acabar. ¿Qué mensaje, consejo o lo que quiera le daría a quien ocupe su puesto tras las elecciones?

R: Que trabaje con honestidad y convicción, pensando y defendiendo al colectivo de la Pelota de toda España.