Ultra Pirineu, un reto extremo contra 110 km. de montaña y casi 7.000 metros de desnivel

A las siete de la mañana de este sábado ha comenzado en el municipio de Bagà una de las más prestigiosas carreras por montaña del calendario español. La Salomon Ultra Pirineu discurre por el Parque Natural del Cadí Moixero, un paraje de excepcional belleza en lo que se conoce como el Pirineo barcelonés. Unos pocos corredores, la élite, los mejores del mundo, se zampan la prueba en unas pocas horas. La mayoría de los mil inscritos, sin embargo, tendrán tiempo más que suficiente para pensar acerca de esas motivaciones que les incitan a correr –poco-, trotar, andar y arrastrar sus maltratados músculos y articulaciones durante 110 kilómetros con un desnivel positivo de 6.800 metros. O lo que es lo mismo: subir casi siete kilómetros y temer que también los bajas.

¿Imaginaran el dolor que van a soportar cuando lleguen al kilómetro 96 de noche y les espere cruzar varias veces un rio, manteniendo un inestable equilibrio sobre piedras resbaladizas? El Confidencial hizo esa parte del recorrido de la carrera. Hablamos con Fran, el propietario del Refugio de Vents del Cadí, un punto de control estratégico. “Por aquí pasa el grueso de los corredores entre las 12 y la 5 de la madrugada. Cuando llegan llevan ya entre 17 y 22 horas andando. Aquí se cierra el control a las 8:30 de la mañana. El último corredor, aunque quizá sea más correcto decir caminante, que puede pasar por este punto ha necesitado 25 horas y media para superar una distancia de 96 kilómetros y todavía le quedan 14 kilómetros durísimos.

La difícil logística

Los responsables de la organización, los servicios médicos, tienen en este control la difícil tarea de recomendar el abandono de la competición aquellos corredores que lleguen maltrechos. Para Cesc, responsable de la logística, una prueba de ultra trail es un complejo mecanismo que funciona con objetivos claros: apoyar a los participantes, conocer en todo momento donde están y evitar que su inconsciencia, desconocimiento o confusión consecuencia del esfuerzo les ponga en situaciones comprometidas.

Esta Ultra Pirineu será recordada porque Luis Alberto Hernando conquistará con toda seguridad y por segunda vez, lo fue ya en 2015, la Copa del Mundo de UltraSky de la ISF. Lo será si pasa la Meta entre los nueve primeros. Luis Alberto es un guardia civil de montaña, un super greiman, que cumplió ayer viernes cuarenta años. El Confidencial conversó con él horas antes de la prueba. Le felicitamos, deseamos toda la suerte en la carrera y quedamos comprometidos en dedicar su nuevo Campeonato del Mundo de Carreras por Montaña a todos los guardias civiles que defienden nuestra libertad y convivencia, especialmente hoy en Cataluña. “Yo sólo os quiero repetir lo que he puesto en mi muro de Facebook: cumplo 40 años me siento más viejo y más verde que nunca”.