Duelo entre 'Almorox' y 'Madrileño' para celebrar el 75 aniversario de La Zarzuela

Este domingo tiene lugar el esperado enfrentamiento entre ‘Almorox’ y ‘Madrileño’ en el Gran Premio del 75 Aniversario del Hipódromo de la Zarzuela, de Madrid. ‘Almorox’, propiedad de Antonio Caro y entrenado en Francia, dio un fantástico espectáculo al ganar con un inesperado sprint final al velocísimo ‘Noozoh Canarias’ en su última actuación.

‘Madrileño’ es sin duda su rival más temible, pues ha demostrado su calidad en numerosas ocasiones esta temporada ganando, entre otros, el Gran Premio de Madrid. La expectación es máxima ante esta cita indispensable para todos los aficionados al turf, que será además, la culminación de una jornada de carreras de altísimo nivel en que el hipódromo celebra su 75 aniversario.

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Estos 75 años pueden parecer poco tiempo, si se compara con la larga historia de otros hipódromos como el de York, cuyas tribunas construidas en 1756 con un diseño basado en el de un pabellón de caza, son consideradas las primeras de la historia de la Arquitectura, o incluso si se mira a América, donde hipódromos como el de Palermo en Buenos Aires llevan 140 años de actividad.

Sin embargo, el Hipódromo de la Zarzuela se eleva hoy no sólo como una de las joyas arquitectónicas de la capital de España, sino también como un símbolo de deportividad y dedicación a las carreras. Los profesionales del turf conocen bien las complejidades de este deporte, pues desde que se erigiera en 1941, el hipódromo madrileño ha tenido que cerrar sus puertas en dos ocasiones debido a problemas de gestión, la última hace tan solo un año. Es por ello que la celebración de este domingo resulta aún más relevante, pues sirve para reconocer la tenacidad con que se ha luchado por reabrirlo y la fidelidad del público.

Un hipódromo con historia

La historia del Hipódromo de la Zarzuela comienza en 1933 con la demolición del Hipódromo de la Castellana para la construcción de los Nuevos Ministerios y la posterior asignación de unos nuevos terrenos para la construcción de un hipódromo en las afueras de la ciudad. El equipo del ingeniero Eduardo Torroja ganó el concurso de arquitectura que se celebró con un diseño que impresionó por la elegancia y la osadía de la estructura. La construcción, interrumpida por la Guerra Civil, no concluyó hasta 1941. A diferencia de otros hipódromos construidos más recientemente, el de Madrid no fue concebido con la mentalidad de consumo masivo que prevalece actualmente y que se refleja claramente en el tamaño desorbitado de los hipódromos y en el exceso de distracciones de ocio en torno a las carreras.

Es el nuestro un lugar más familiar, en que no por ello falta la excelencia deportiva, y donde es común toparse con los protagonistas habituales de la jornada, como el jockey José Luís Martínez. Si el lector no iniciado en el turf duda cada vez que conduce por la autopista A6 delante del cartel que marca la desviación al hipódromo, le recomiendo que este domingo se deje llevar y haga un alto en su camino. Tendrá la oportunidad de compartir la emoción de todos los turfistas cuando el juez marque la salida y ‘Almorox’, ‘Madrileño’ y los otros seis contrincantes se lancen a su lucha por conquistar los 2000 metros del Gran Premio del 75 aniversario del hipódromo.

Reconocimiento a un histórico jockey

Otro motivo de celebración estos días es el reconocimiento que José Luis Martínez recibirá el día martes 15 por su larga y brillante trayectoria profesional, pues el Consejo Superior de Deportes le entregará la Medalla de bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo. Martínez, orgulloso canterano del Hipódromo de la Zarzuela, aprendió a montar a caballo con 14 años en la Escuela de Aprendices del hipódromo y desde su debut a los 16 años ha sido nueve veces campeón de España y ha cosechado 997 victorias. En el año 2008 una lesión muy grave de espalda producida por una caída estuvo a punto de acabar con su carrera, pero logró superarla de manera asombrosa gracias a su tenacidad y dedicación a la que es su pasión y su vida.

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El desenlace de un cuento americano requeriría que José Luis Martínez ganara esta semana el Gran Premio que conmemora la actividad del hipódromo que le ha visto crecer precisamente cuando se reconoce también su trayectoria personal como deportista. Su monta para esta cita es la yegua ‘Rock Eyes’, preparada por Guillermo Arizkorreta y vencedora en el hipódromo de Lasarte la última vez que Martínez la monto. Su victoria sería el perfecto final, no cabe duda. Pero no nos engañemos, esto no es Hollywood y ‘Almorox’ ha venido desde Francia a ganar.