El 'Tigre de Yecla' se enfunda los guantes con 52 años para ser campeón olímpico

El boxeo se lo ha dado todo a José Ortega Chumilla. Y a sus 52 años quiere volver a ponerse los guantes y pelear. 'El Tigre de Yecla', seis veces campeón de España y con dos Juegos Olímpicos a sus espaldas, reaparece en este 2016 en el ring para rugir de nuevo. Colgó los guantes en 1992, hace ya 24 años, pero nunca ha abandonado el boxeo. José Ortega Chumilla (Yecla, Murcia, 1963), dirige su escuela, el Club de Boxeo Yecla, en su localidad natal de Murcia. Allí enseña lo que ha aprendido desde que diese sus primeros golpes en 1979. Puñetazos que volverá a dar subido en un ring para cumplir un reto que quiere afrontar en este nuevo año que ahora comienza: "Quiero ser campeón olímpico".

Chumilla compitió en dos Juegos Olímpicos, Seúl 88 y Barcelona 92, como bien muestran los dos tatuajes que luce en sus brazos. Tal vez las dos participaciones de las que se siente más orgulloso. Porque como él mismo ha contado en alguna ocasión, "no es fácil clasificarte para unos Juegos y participar representando a tu país en el deporte que practicas". No en vano, Chumilla se quedó fuera de la que podría haber sido su primera cita olímpica, Los Ángeles 84, por faltarle dos meses para cumplir la edad que por aquel entonces le permitía tomar parte como boxeador, 21 años. Ahora pretender sacarse esa espinita y competir en otros juegos, 'Los Juegos Mundiales de Policías y Bomberos', su profesión desde que dejó el boxeo en activo. Un evento mundial que se celebra desde 1985 cada dos años y cuya próxima cita tendrá lugar en Montreal, Canadá, en 2017. Para ello tendrá que imponerse en los Europeos que tendrán lugar este año en Huelva.

Mohamed Ali como ejemplo

Pasada la media centena de años, José Ortega afirma sentirse "en plena forma. Mi familia siempre ha confiado en mí y sigue confiando, porque me ven en plenas facultades". Así de rotundo se expresa el veterano boxeador de la UCAM que nunca se ha roto un hueso encima del cuadrilátero. Y ya han pasado años desde que empezase a pelear en 1979, animado por su abuelo, su tutor, que le inculcó su pasión por este deporte y en el que tiene un referente: "Mohamed Ali es el deportista que más admiro, es mi favorito desde que era joven". La figura que le llevó a ganar seis campeonatos de España y pelear en 218 combates.

Aunque ahora tenga otro deportista al que dedica toda su atención, "mi hijo, al que sigo sin fallarle nunca, un grandísimo deportista que lo entrega todo en el baloncesto por su equipo, la UCAM de Murcia de la Liga EBA". Ninguno de sus dos descedientes, Gloria y José, han seguido sus pasos en el cuadrilátero, aunque "ambos han practicado el noble arte del boxeo, pero no se terminaron de convencer y el chico me preguntó qué deporte podía practicar, y le respondí que por sus reflejos, rapidez y altura podía probar el baloncesto; y hasta ahora...".

Los duros golpes de la vida

No se olvida de sus alumnos del club que dirige, como nos cuenta: "Tengo un club en Yecla con unas 30 personas, todos chicos. De ellos, algunos, los verdaderos deportistas, se comprometen con el boxeo, algo nada fácil hoy en día. Los otros se lo toman como un deporte de mantenimiento". José Ortega sabe que este deporte tiene sus detractores, pero lo entiende como "uno de los más nobles que hay, como todos los en los que hay contacto, todos lo son".

Y afirma, con cierta resignación, que "el boxeo, en España, siempre ha estado igual tratado, antes y ahora, no como en Estados Unidos, que es uno de los deportes con más seguidores y de los más practicados". Deporte que a Chumilla le ha enseñado casi todo lo que sabe y le ha ayudado a afrontar los reveses que tiene la vida. "Los golpes en el cuadrilátero nunca me dolieron, porque siempre que haces algo que te gusta, no te importa encajar, no te hace daño, pero los golpes de la vida son más dolorosos; esos que recibes fuera del ring sí que duelen", explica.

Por eso 'El Tigre de Yecla' lo tiene claro, como subraya para acabar: "He jugado a muchos deportes, he probado otras disciplinas; motocross, atletismo, judo y fútbol, pero el que de verdad me dio la vida, enseñanzas y experiencias para mi futuro, fue el boxeo. De ahí que si volviera a nacer de nuevo, sería boxeador".

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