A la búsqueda del futuro Gómez Noya

Son las diez y media de la mañana de cualquier día del mes de julio. Un grupo de treinta niños y niñas de entre ocho y catorce años se tira a la piscina del polideportivo Carlos Ruiz en Pozuelo de Alarcón para nadar entre 100 y 200 metros según la edad, después de haber dado un par de vueltas corriendo a las instalaciones y antes de dar la última vuelta. Hacen un aquatlon. Arranca la búsqueda de un nuevo Javier Gómez Noya, referencia mundial si de triatlón hablamos.

Es una de las muchas actividades que realizan en el Campus de Triatlón para categorías inferiores que organiza el Club Triatlón Los Tigres de Pozuelo, el único que se hace en la Comunidad de Madrid y uno de los muy pocos que se organizan para niños en toda España. Y es que, hasta ahora, el triatlón estaba considerado un ‘deporte para adultos’ por su intensidad y dureza. Sin embargo, como explica Sofía Peregrina, organizadora de este Campus, “el triatlón es un deporte para cualquier persona que esté sana y en tenga un mínimo de forma física… Las distancias hoy en día se adaptan para que los chavales puedan participar como en cualquier deporte que implique la resistencia como cualidad física determinante. Las distancias se adaptan en función de la edad y categoría”.

Y, en definitiva, todo es cuestión de entrenamiento. Lo importante es ir creando escuela, que los futuros triatletas no sean deportistas derivados de otras disciplinas, sino que se formen específicamente para la práctica del triatlón y sean capaces de destacar en las tres disciplinas -natación, ciclismo y atletismo- sin que predomine necesariamente una de ellas como suele ocurrir ahora en los triatletas adultos. Esto lo han empezado a entender los clubes que ya trabajan con categorías inferiores, como Los Tigres de Pozuelo, y “ya se comienzan a ver los buenos frutos de clubes y entidades que llevan trabajando más tiempo con las canteras, chavales que se inician en triatlón desde pequeños y practican las tres modalidades por igual”, asegura Sofía Peregrina.

Un deporte de equipo

Todavía son pocos, pero “cada vez son más las personas que se declinan por los deportes de resistencia como el running, triatlón, trail… Entre los niños todavía no es una modalidad muy extendida si lo comparamos con el atletismo o natación, por ejemplo. Pero desde federaciones, clubes y organizadores hasta padres, se esta trabajando para que poco a poco los niños puedan conocer y practicar desde edades tempranas el triatlón”, asegura.

Y a eso se dedica este campus en sus dos fases de quince días cada una. Y ésta ya es la tercera edición del campus… “El primer año fue realmente un ensayo, pues hacer un campamento urbano para niños con un deporte como el triatlón fue un pequeño reto organizativo. El objetivo inicial era conseguir que todo funcionase correctamente,que estuviese bien organizado y ver si era posible su realización. En la segunda y esta tercera edición todo ha sido más rodado, ya que organizar un campus urbano de triatlón ya es una realidad, no un proyecto”, dice Sofía Peregrina.

¿Y qué hacen los niños durante una jornada de este campus? Explica Sofía que “podemos dividir el día en tres partes en general. Una primera en la que se realizan actividades-taller relacionadas con el triatlón, actividades recreativas de temas transversales como seguridad vial, primeros auxilios... En una segunda realizamos las actividades de agua en la piscina y zona de hierba, como son la natación, natación específica de triatlón o actividad recreativa. En una tercera en la que practican los deportes y habilidades deportivas como son el atletismo y el ciclismo o trabajo de las transiciones de triatlón”. Y divertirse, claro, que al final se trata de niños…

La práctica del triatlón no requiere ninguna cualidad específica, más allá del placer de hacer deporte teniendo en cuenta que se trata de una práctica multidisciplinar. La resistencia física es importante, pero como todo solo necesita entrenamiento. “Aunque muchas personas lo desconocen, el triatlón es un deporte de equipo, en el que se entrena en equipo, se compite y se practica en muchas ocasiones en equipo; y, por supuesto, se disfruta en equipo”, afirma Sofía Peregrina.

Para adultos... y niños

El campus cuenta con dos entrenadores cualificados a los que fundamentalmente se les pide “saber transmitir la experiencia en este tipo de deporte y ser conocedor, tanto con niños como con adultos, de lo que es practicar triatlón. Es fundamental saber ponerse en la piel de la persona a la que entrenas. Además, no hay que olvidarse de las etapas de evolución como deportista, de su crecimiento y formación. Por otra parte, para trabajar con niños, ya sea en triatlón como en cualquier deporte, hay que ser un buen pedagogo infantil”.

Entre otras cosas porque, a diferencia de otros deportes, los niños pueden iniciarse pronto en su práctica pero sin embargo tarde en la competición -hasta los 15/17 años no hay competiciones oficiales-, aunque algunos organizadores de triatlones empiezan a introducir pruebas para niños después de las de adultos. “Hay deportes en los que la edad de comienzo y la edad de competición no es tan amplia y es más fácil que el periodo de formación y de desarrollo competitivo este más cercano, incluso sea parejo”, comenta Sofía.

Por eso es necesaria una mayor implicación de las instituciones: “Las características propias de este deporte pueden suponer un esfuerzo extra para cualquier entidad y organizador. Sobre todo por la practica de las tres modalidades. Pero sin apoyo institucional sería imposible poder llevar acabo cualquier proyecto de este tipo. De hecho, las escuelas y entidades que cuentan y fomentan más el triatlón entre los pequeños son aquellas que cuentan con el apoyo de sus ayuntamientos y federaciones”, dice para acabar, como es el caso del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón.

Más información en www.triatlonpozuelo.com