Del "te patearé el culo" al "eres mentiroso": Pacquiao y Maywheater calientan su pelea

El próximo 2 de mayo tendrá lugar el Combate del Siglo: Floyd Mayweather y Manny Pacquiao se verán las caras en el Arena Garden del MGM Grand de Las Vegas, en una de las peleas más grandes de todos los tiempos. Dos grandes campeones del boxeo tratarán de dirimir sobre el ring quién es el mejor: a un lado, el filipino, el único boxeador en la historia en ganar en ocho categorías distintas; al otro, el norteamericano, campeón mundial en cinco categorías que nunca ha perdido un combate. Y, después de un cara a cara más que amistoso, se han desatado las hostilidades.

El pasado jueves, ambos púgiles se veían las caras para promocionar un combate que se convertirá en el más taquillero de la historia. Sin embargo, poco o nada tenía que ver con el tradicional encuentro de los boxeadores para presentar una pelea: buenos gestos, sonrisas y miradas complices tuvieron lugar en uno de los cara a cara más educados que se recuerdan. Pero una vez dado a conocer el evento, se han desatado las hostilidades: ambos púgiles han cruzado declaraciones en la distancia para calentar uno de los combates más esperados de todos los tiempos.

Las expectativas que ha despertado convierten este combate en histórico: todo hace indicar que ambos púgiles se van a repartir más de 300 millones y se espera que se rompa el récord de apuestas y de espectadores en un combate de boxeo. Pacquiao explicaba a las mil maravillas lo que supone esta pelea: "Es importantísima para la historia del boxeo porque no queríamos dejar ni una duda en la mente de los aficionados sobre quién es el mejor". Después de años sin encontrar un acuerdo entre ambos, se celebrará un combate que seguro será de los más calientes de la historia.

El primero en romper las hostilidades fue Pacquiao. Nada más acabar el cara a cara, el filipino comparaba a otros rivales que ha tenido en su carrera con Mayweather, dejando al norteamericano por debajo de ellos: "No tengo ninguna preocupación. Contra Mayweather no, aunque sí la tuve contra otros púgiles como Cotto, Margarito y De la Hoya", confesaba. Y, por si fuera poco, aseguraba que la pegada de Mayweather no era demasiado potente: "No tengo ningún miedo, Antonio Margarito pega bastante más fuerte que Floyd Mayweather". Casi nada.

Si estas declaraciones no habían sido suficiente, Freddie Roach, el famoso entrenador de Pacquiao, se encargó de echar más leña al fuego: "Vamos a boxear contra el mejor del mundo, pero le vamos a patear el culo. Manny le hará un gran favor al mundo ganando a este tipo que no es un modelo de absolutamente nada", aseguraba. "Pacquiao sí es alguien en quien me gustaría que mis hijos se inspiraran", aseguraba Roach. Las provocaciones desde la esquina del filipino no han tardado en tener respuesta de Mayweather, que cree que su rival "es un mentiroso".

Mayweather no se calla con Pacquiao

"Lo que dice Pacquiao no es verdad, lo he visto en sus ojos, en su lenguaje corporal, realmente está muy preocupado, está mintiendo. Me he enfrentado a muchos boxeadores y lo sé: cuando me enfrenté a De la Hoya, me sacaba como 20 libras de ventaja, cuando peleé contra Cotto, me llevaba como 20 libras de ventaja... Cuando él se midió a De la Hoya, lo hizo en un peso pactado, cuando enfrentó a Cotto, fue en peso pactado; todos sabemos que cuando alguien pierde mucho peso, está totalmente deshidratado. Y él esta preocupado porque sabe que se va a enfrentar a un peso welter sólido", indicó el americano.

El gran combate del siglo empieza a calentarse con las declaraciones de ambos púgiles, si bien es cierto que Mayweather está más preocupado de otra cosa: "Lo mejor de mi carrera es que he hecho cientos de millones de dólares y de eso se trata", confiesa el invicto. Aún queda más de mes y medio para que tenga lugar una de las peleas más importantes de todos los tiempos y el cruce de declaraciones promete ser sólo el principio de un largo camino hasta el día de la pelea: los dos mejores boxeadores del momento calientan motores antes de enfundarse los guantes en una pelea histórica.