Con todo a favor para revalidar el título, Coma se contiene: "Queda poco y mucho"

Paulo Gonçalves (Honda) fue penalizado este jueves con quince minutos por cambiar el motor que lo relega en la lucha por el título que le ha quedado en bandeja a Marc Coma (KMT). La organización del Dakar confirmó que Joan Barreda le cedió su motor a Gonçalves mientras que Jeremías Israel, que abandonó, le dio el suyo al español. En este cambio, Gonçalves suma quince minutos y mantiene la segunda plaza de la general pero se ha quedado a 20:12 del líder Marc Coma, que se encamina hacia su quinta corona y la segunda consecutiva. Además, Barreda fue penalizado con 45 minutos por cambiar de motor por segunda vez. Una situación que Honda identifica como daños colaterales.

Coma, por su parte, prefiere no festejar todavía a pesar de tener muchas opciones de defender su corona del año pasado y sumar su quinto Dakar: “Queda poco y mucho a la vez. Si bien son dos días, si miras el kilometraje te asusta un poco así que hay que mantener la tranquilidad y hacer las cosas bien como lo venimos haciendo hasta ahora”.

La llegada a Termas de Río Hondo marcó el final del segundo tramo maratón de esta edición que fue ponderado por Coma de la siguiente manera: “Siempre es algo difícil de gestionar y que requiere un extra. Este miércoles menos 10 grados en el enlace, el jueves no teníamos ni camas para dormir: son cosas que te van sumando. Estamos físicamente bien y la moto no tiene problemas”.

Sobre la sanción de su escolta, el piloto de AMV explicó: “Sabía que este miércoles por la noche estuvieron cambiando el motor de Gonçalves y que llegó arrastrado tirando para llegar al vivac. Es parte del juego y espero que no nos toque. Cuando vayamos el sábado se podrá mirar distinto pero este viernes todavía es un puerto. Nosotros debemos evitar los errores, los fallos y los problemas”.