David Moner abandona el deporte catalán 17 años después y enfrentado con Iván Tibau

David Moner se despide del deporte catalán tras 17 años al frente de la Confederación de Federaciones Deportivas Catalanas (UFEC). Durante un largo periodo, la estrategia de la UFEC y de la Secretaría de Deportes de Cataluña que dirige Iván Tibau fue la misma, algo que no ha sucedido en los últimos meses. Su sucesor será Gerard Esteva, que llega de la mano del Alcalde de Barcelona, Xavier Trías.

De hecho, la UFEC demandó en su día al Gobierno español ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos por la regulación de la Ley del Deporte contraria a las selecciones autonómicas catalanas. En aquel momento, Tibau era el adalid de dicha posición, negándose a jugar por España. Según él, justificado en que fue apartado de la selección española de hockey por sus convicciones independentistas.

Sin embargo, durante estos años las posiciones entre Tibau y Moner se han extremado. Moner encabezó la protesta de todas las federaciones catalanas contra la Generalitat por la falta de recursos para continuar su actividad. Varias federaciones catalanas están sujetas a concurso, como la catalana de balonmano o 'handball' y otras, parece, lo harán pronto. En aquel momento, todas se fotografiaron en actitud reivindicativa con Moner a la cabeza.

Moner también se opuso a la licencia única presentada por el Consejo Superior de Deportes. Se negó a un "apaño" y a la posibilidad de que fuera CIU elque aceptara una propuesta 'bajo cuerda' en forma de enmienda al proyecto del Gobierno de Rajoy. Ante esa negativa, Cardenal optó por negociar con el PNV y de hecho así será la tramitación legislativa del proyecto de licencia única que ha acabado siendo lo contrario de lo que inicialmente quería Soraya Saez de Santamaría. La enmienda prosperará de la mano del nacionalismo vasco.

En aquel proceso, Tibau permaneció en silencio. Presume de su íntima relación con Cardenal y de que fue el inductor de la defensa epistolar de éste hacia el Barca. Ante esta situación, fue Francesc Homs quien forzó una posición activa del deporte catalán, sobre lo que se consideraba un proyecto inasumible por centralizador que siguió liderando Moner.

La marcha de éste abre un nuevo proceso en el deporte catalán. Pero no será el único cambio. La estabilidad de Artur Mas (si llega) propiciará otras medidas que alcanzarán a algo tan simbólico como el deporte catalán, que agrupa en total más licencias que cualquier otra autonomía española, pero que vive un tiempo de crisis y de deslucimiento nunca conocidos en dicho marco.