Es noticia
Antes del reto de Ducati, Lorenzo debe aprovechar que aún tiene la mejor moto
  1. Deportes
  2. Motociclismo
rossi sigue ganando con yamaha

Antes del reto de Ducati, Lorenzo debe aprovechar que aún tiene la mejor moto

En Jerez la marca ha demostrado estar algo por encima de Honda y a años luz de la moto italiana que tendrá el próximo año. La igualdad de materiales con Rossi, clave para su éxito

Foto: Lorenzo y Rossi, en el podium del GP de España (Reuters)
Lorenzo y Rossi, en el podium del GP de España (Reuters)

Yamahatiene, probablemente, la mejor moto del campeonato. Buena noticia para Jorge Lorenzo, que busca ser campeón del mundo por tercera vez con los japoneses en la que será su última temporada en la marca. La compañía del triple diapasón parece un punto por encima de Honda y, desde luego, a años luz de Ducati, que es la próxima estación del piloto balear. Eso es una alegría para el piloto, que aspira a ser campeón del mundo de MotoGP por cuarta vez, pero en el fondo deja también un regusto amargo. Todo avance que de a ese moto este año, sus apreciaciones necesarias para hacer de esa montura la más competitiva, se le volverán en contra cuando la próxima temporada se siente en un moto diferente y, actualmente, peor.

Lorenzo, además, tiene motivos para temer que esta temporada. Porque aunque él en público lo niegue, sería lógico que estuviese mosqueado por un posible trato de favor a Rossi, que es la apuesta a medio plazo de la compañía. No sería el primer caso, ni mucho menos, de una marca que privilegia a su piloto contratado por encima del otro. Porque al final hay que elegir. En motociclismo no entra tanto en juego la estrategia como en Fórmula 1, no hay paradas en boxes, pero sí que tiene su importancia en la clasificación.

[Rossi desfila sobre Jerez]

También en los materiales, por descontado. Es probable que Rossi tenga las mejores opciones, que los ingenieros que trabajan para ambos se centren más en amoldar su moto que la de Lorenzo. El tiempo siempre es limitado. No es un problema absoluto, en el desarrollo de la máquina es importante también la palabra del piloto, que es el que tiene que transmitir sensaciones y proponer soluciones a los técnicos para que las implementen. Es de esperar que, en eso, el trato sea igualitario.

La primera carrera desde que se supo que Lorenzo había escogido novia y no era japonesa fue un paseo para Rossi. Ni él mismo recordaba cuanto tiempo hacía desde la última vez que ganó con tanta autoridad. "Ahora puedo decir que somos fuertes y era importante hacer una buena carrera después del error de Austin, una lástima, y de no ser por él estaría ahí en el campeonato", dice confiado el italiano. El líder sigue siendo Márquez, no tanto por ser el más rápido, que no lo parece, sino por ser el que menos falla.

A Lorenzo se le cruzó por la pista un excelso Rossi y, también, problemas mecánicos. Está convencido de que si la moto hubiese vibrado menos él habría ganado. "He tenido peores sensaciones que Rossi, especialmente en las últimas vueltas, y cuando empezaba a alcanzarlo no he podido seguir recuperando la distancia y me he quedado sin una victoria que creo que podría haber llegado de no ser por ese problema de tracción en las rectas", comentaba en frío en sala de prensa.

Las sensaciones son volátiles en el deporte, aunque los dos pilotos de Yamaha tienen motivos para estar satisfechos. Este año, como el pasado, parecen haber dado con la tecla. "A partir de la vuelta diez cada vez han ido peor y por seguridad he decidido bajar mucho el ritmo y conformarme con esta segunda posición, que hoy teníamos fácil por las dificultades de Márquez, pero en otra ocasión nos podía haber jugado una mala pasada", explicaba Lorenzo. El mallorquín se ha mostrado amable con su marca y atribuye sus problemas al suministrador de neumáticos, Michelin, que aún está en fase de prueba y error en este campeonato. La china en este caso le ha tocado a Lorenzo, pero en ese punto en concreto sí que hay algo de lotería.

Rossi se quedará solo

La victoria de Rossi marca una línea importante para la temporada, porque Jerez es un circuito similar a muchos otros de la temporada. Al italiano estos últimos años le ha costado ganar. El año pasado se aprovechó del mal inicio de Lorenzo y Márquez para ganar en Qatar y Argentina. Después se impuso en Assen y bajo la lluvia de Silverstone. Este año vuelve a ganar. "Siempre que empiezo una temporada tengo el pensamiento de ganar al menos una carrera y lo he hecho siempre, menos los dos años con Ducati, y este año también, pero ésta es una victoria importante porque creo que si voy bien aquí, puedo ir bien en Mugello, Barcelona, Assen y en muchas más pistas europeas, las pistas 'old style'", comentaba Rossi.

No es baladí la referencia a Ducati, aunque en esta ocasión no parezca que haya maldad sino simple constatación de hechos. El caso es que Rossi, quizá el mejor piloto de siempre, naufragó en la marca italiana. Es una espina que nunca se sacará, un dolor para él no haber podido hacer de la moto italiana una campeona. Ese es el reto de Jorge Lorenzo, uno que ha aceptado después de que el propio Rossi le invitase a hacerlo con malos modos. Dejo a caer que era un cobarde por no aceptarlo y al final ha visto que al español no le faltan arrestos.

[Ducati, artesanía italiana para Lorenzo]

La jugada de Rossi, con las cartas como están ahora sobre la mesa, parece magnífica. Porque el año que viene será el líder indiscutido en Yamaha, no importa a quien le pongan al lado que él será quien mande. Se habla mucho de Maverick Viñales, que está reproduciendo la relación que en su día tuvo con Rossi Máquez. Cachondeo, buenas caras, rollo de mentor-alumno... total para terminar encarados y odiándose. Pero eso aún no ha llegado. En todo caso, el italiano será el líder de la cuadra. Y es la mejor que hay ahora mismo sobre el tapete. Uno de sus rivales más fieros, que en estos años ha demostrado ser mejor que él con la misma moto, tendrá que empezar de cero.

También Márquez se puede beneficiar si logra darle un punto más a la Honda estará en disposición de hacer daño, más aún con la incertidumbre de Lorenzo. Ese es, de hecho, su objetivo para esta misma temporada: "Veremos qué sucede, pero tenemos que tener paciencia hasta que llegue un pequeño empuje de Honda para intentar ir un poquito mejor"

Yamahatiene, probablemente, la mejor moto del campeonato. Buena noticia para Jorge Lorenzo, que busca ser campeón del mundo por tercera vez con los japoneses en la que será su última temporada en la marca. La compañía del triple diapasón parece un punto por encima de Honda y, desde luego, a años luz de Ducati, que es la próxima estación del piloto balear. Eso es una alegría para el piloto, que aspira a ser campeón del mundo de MotoGP por cuarta vez, pero en el fondo deja también un regusto amargo. Todo avance que de a ese moto este año, sus apreciaciones necesarias para hacer de esa montura la más competitiva, se le volverán en contra cuando la próxima temporada se siente en un moto diferente y, actualmente, peor.

Valentino Rossi Jorge Lorenzo Honda Fórmula 1 Maverick Viñales
El redactor recomienda