Márquez vuelve a Austin, donde ningún bar quiso celebrar su primera victoria

“Conseguir ganar mi primera carrera en MotoGP fue una sensación indescriptible, de hecho os reconozco que me costó asimilar lo que acababa de lograr. ¡Fue un gran fin de semana!”. Marc Márquez regresa al lugar del delito, al circuito en el que empezó todo y no ha podido evitar recordarlo en su blog de Box Repsol. La siguiente parada del Mundial es Austin, un circuito que probablemente recordará con especial cariño pues fue allí donde se subió a lo más alto del podio de MotoGP. Era la segunda cita y se llevaba por delante dos records que hasta ese momento eran propiedad de ‘Fast Freddie’: Marc Márquez, con 20 años y 63 días, era el piloto más joven que lograba la pole y ganaba una carrera en la máxima categoría. Y precisamente esa juventud hizo que los bares se negaran a acoger la celebración: en Estados Unidos la mayoría de edad es 21.

El vigente campeón y actual líder comentaba que el año pasado llegaba “con buenas sensaciones por los entrenamientos que habíamos hecho en invierno”. Precisamente, en aquellos tres días de pruebas, Marc fue el más rápido. El dominio exhibido fue confirmado en los primeros y segundos libres. El susto llegó en la FP3 cuando besó el suelo para, después, ser el mejor en la última tanda y llevar la voz cantante en la Q2 con la que se configura la parrilla de salida. El resto de la historia es de sobra conocida: Márquez firmó su primera victoria en MotoGP batiendo otro récord. “Los recuerdos que me vienen de este circuito son maravillosos. Me vi a mí mismo por primera vez delante, lo cual era increíble: ¡en la máxima categoría y con esos grandes rivales!”.

Aquel 21 de abril, Marc bajó el listón a los 20 años y 63 días. Algo sobrepasado por lo que estaba viviendo comentaba que lo iba a “asimilar poco a poco”. Y a pesar de la digestión, el piloto más joven en ganar una carrera de MotoGP quería celebrar el hito después de ver cómo Valentino Rossi le perseguía por el circuito para felicitarle y los halagos llovían sobre su box. Fue entonces cuando saltaron las alarmas en los bares de Austin. Los dueños no sabían bien cómo actuar ante la situación: Márquez, a sus 20 años, quería celebrar su récord siendo menor de edad para Estados Unidos y para no entrar en conflicto con la ley, ningún bar se ofreció para el festejo. Eso sí, gracias al ingenio de algunos, hubo fiesta en el equipo Honda alrededor de la figura de Márquez.

Un año después, las cosas han cambiado. El de Cervera no sólo aterriza en Estados Unidos siendo mayor de edad, también lo hace con el título en el bolsillo y su nombre al frente de la tabla de MotoGP. Marc Márquez llega a Texas a punto de recuperar el tono físico perdido después de romperse el peroné haciendo ‘dirt track’. La lesión no pareció condicionarle mucho en Qatar, donde el piloto de Honda explicó que los numerosos giros a derecha de Losail le obligaron a compensar con su brazo derecho la debilidad de la pierna.

El paréntesis de dos semanas y ha sido vital para el de Cervera: “Desde Qatar me he centrado en fortalecer mi pierna y en estar en mejor forma física. Por suerte, la mayoría de curvas más duras en este circuito son de izquierdas, así que será más fácil para mi pierna que todavía no está al cien por cien”. Y si esta vez gana, los bares probablemente se pelearán por celebrar con Márquez la que sería su segunda victoria de la temporada.