Los 3 cm. de Eusebio Cáceres y la medalla que rozó y no quiso celebrar: "Es lo que hay"

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​Tras un fin de semana en el que el medallero español ha ido cogiendo velocidad, el español Eusebio Cáceres ha rozado la gloria, aunque se ha quedado fuera por solo tres centímetros. Durante unos segundos, el saltador olímpico saboreó la medalla de bronce de salto de longitud en Tokio, aunque finalmente se quedó fuera del podio. Aunque no está "triste". "Esto es lo que hay, mi forma de ver la vida es sencilla, tenemos unas cosas y no otras. Tampoco es tan difícil de entender, ahora mismo es lo que hay, han sido mejores que yo", dijo en declaraciones a la cadena COPE.

"Se puede ver de otra manera pero no creo que yo haya fallado, o ellos hayan tenido suerte, es que ellos han sido mejores. Así está el tema", añadió. El alicantino entró a la lucha por las medallas con un 8.09 en su segundo salto, con el que tuvo durante mucho tiempo el podio a solo dos centímetros. El estadounidense Juvaughn Harrison lo elevó al 8.15 y el español fue a por todas en sus dos últimos saltos. Tras saber lo que es quedar cuarto en un Mundial y también en un Europeo, Cáceres quiso volar en el Estadio Olímpico de Tokio y se acercó de nuevo, a tres centímetros, con un 8.12. El de Onil no cayó en frustración, a pesar de saber que tenía un salto mejor.

En el último, Cáceres se fue al 8.18, un bronce provisional que no celebró ya que además sintió que podía haber sido mejor por pequeños detalles. Faltaba por saltar el heleno Miltiadis Tentoglu, todo un campeón de Europa que iba también sin freno en busca de colarse en el podio. El griego lo hizo y de qué manera, directo al oro con un 8.41, el mismo que Juan Miguel Echevarría. El cubano volvió a enfilar la carrera pero se lesionó sin poder buscar la mejora y con la plata finalmente. Del mismo modo, el cubano Maykel Masso estuvo lesionado desde su segundo salto, pero se quedó con el bronce (8.21).

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Lo llegó a rozar un Cáceres, a tres centímetros del metal; un broche amargo para la delegación española, aunque la cuarta jornada en sesión matinal fue buena. "Ya lo he dicho en otra entrevistas, físicamente soy un avión pero técnicamente tengo todavía un mundo por hacer. Tengo intención de continuar porque esto no ha acabado. Soy muy ambicioso, quiero más. Yo lo entiendo perfectamente, ahora son mejores que yo, pero sé que puedo llegar a ellos. Hay que seguir hacia delante", sentenció Cáceres.

La primera carrera de hecho ya tuvo representación nacional, con una debutante Marta Pérez que logró el pase a semifinales en el 1.500, con 4:04.74, marca personal. La tercera mejor atleta española por marca, tras Maite Zúñiga (4:00.59 en 1992) y Natalia Rodríguez (4:03.01 en Atenas 2004), Marta aguantó siempre en el grupo de cabeza y en la última recta ganó una posición para terminar séptima. Después del resto de series, la soriana conoció su clasificación por tiempos.

Mientras, Esther Guerrero, que llegaba en gran estado de forma, no pudo enseñarlo en la capital japonesa, bloqueada en la recta para terminar octava y quedarse fuera con 4:07.08. Además, Jael Bestué corrió la tercera serie de los 200 metros y quedó cuarta, sin billete para seguir compitiendo pero aprovechando su debut en unos Juegos para dejar su mejor marca personal (23.19). Por otro lado, Javier Cienfuegos estará en la final de lanzamiento de martillo el miércoles, después de clasificarse con un último intento en el que logró 76.91 metros, superando su actuación en Londres 2012 para estar entre los mejores en Tokio.