El 'tifón' español que busca medalla con sus puños: "He venido a arrancar cabezas"

Enmanuel Reyes se ha convertido en la gran esperanza del boxeo español en los Juegos de Tokio. El boxeador de origen cubano llegaba a la competición de los pesos pesados con mucha confianza y en un gran estado de forma..., pero su debut en la prueba olímpica ha ido mucho más allá de lo esperado, confirmando su poder. En estos momentos, se encuentra a un combate de conseguir medalla y lo tiene claro: "Aquí he venido a arrancar cabezas".

El español había anunciado que llegaba en gran estado de forma, pero su piedra de toque no era sencilla. Su debut sería ante el kazajo Vasili Levit, medalla de plata en los anteriores Juegos Olímpicos de Río 2016... Y lo cierto es que no defraudó lo más mínimo. Durante el primer asalto, el español estuvo muy rápido de pies y manos, pero Levit impactó una gran derecha contra una de sus cejas, que le provocó un corte que tuvo que ser subsanado en su esquina.

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Este golpe no solo no desmoralizó al español, sino que salió enrabietado por haber recibido ese brutal impacto. Y ahí se acabó todo: Reyes metió un gran derechazo, combinado con un gancho de izquierda. El kazajo sufría y el púgil nacional no perdió su oportunidad: tres potentes golpes al mentón terminaron por hacer caer a Levit al suelo, dando la victoria al español por KO en menos de un minuto desde el comienzo del segundo asalto. A todo un subcampeón olímpico.

Al acabar el combate, Reyes hizo gala de su nivel y de su objetivo: conseguir una medalla para España. Tras clasificarse a cuartos de final, sabe que el próximo viernes 30, a partir de las 12:54 horas, deberá de enfrentarse a Julio la Cruz, su compatriota de nacimiento pero rival de selección. El español está seguro de que va a derrotar al cubano y que se va a meter en las semifinales del peso pesado, que automáticamente ya le otorgarían, como mínimo, la medalla de bronce.

Y tiene claro su objetivo: "Aquí hemos venido a arrancar cabezas", indicaba a 'Tiempo de Juego', de la Cadena COPE, tras el combate. "Decían que venía un tifón y aquí está. Es la mejor manera de empezar, pero el trabajo solo acabará con el oro. Eso es, el oro. Solo quiero mi oro. Respeto a mis rivales, pero el tifón soy yo", explicaba. Sabe que está en un momento dulce y que está a un combate de sumar medalla... y a tres de ser campeón olímpico.

Reyes es consciente de que una oportunidad así no se tiene muy a menudo y, tras derrotar por KO al subcampeón de Río, está convencido de que puede optar a todo: "Vinimos a buscar el oro y rival que nos pongan delante, rival que vamos a barrer. Vamos a por él. A arrancar cabezas. Me da igual que sea de Cuba. Yo vine a buscar mi oro y el que se ponga encima del 'ring', se va a caer", explicaba. En tres días, veremos si Enmanuel Reyes consigue otra medalla para España.