La proeza que rozó Mireia Belmonte: "No se pueden hacer milagros en dos meses"

“En este país que hay hablar menos y trabajar más. Estamos cansados del verso”. Esta frase la utilizó Carlos Salvador Bilardo para referirse a Argentina, aunque es extrapolable a España. Quizás Mireia Belmonte no conozca al ‘Narigón’, pero su actuación en los 400 metros libres cumplió a la perfección con esta definición. A pesar de la lesión que sufrió en el hombro izquierdo y las dos hernias inguinales, no se le ha escuchado queja alguna. Al contrario. Se le ha notado una imborrable sonrisa como abanderada española, aunque llevara la mascarilla.

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“Si hace dos meses me hubieran dicho que iba a ser cuarta en unos Juegos Olímpicos, no lo hubiese creído. No se pueden hacer milagros en dos meses”, confesó Belmonte tras la prueba, en declaraciones recogidas por distintos medios. Estuvo cerca de lograr otra proeza: se quedó a 23 centésimas de conseguir el bronce. En Londres y en Río ya había dejado su sello. Y Tokio no iba a ser menos. Aunque comenzó mal, remontó.

La catalana no mostró su mejor versión en crol y espalda. Sin embargo, sí que lo hizo en braza, el estilo que aprovechó para comenzar su remontada. Iba sexta y rápidamente pasó a la cuarta posición. Desde ahí siguió de cerca a la estadounidense Flickinger. Sólo le faltaron un par de metros para superarla.

Queda revancha

El éxito de Belmonte es haber llegado hasta ahí con las molestias que arrastra. El mal sabor de boca con el que ha terminado la prueba podrá ser paliado la próxima semana. Siempre hay revancha. Mireia disfrutará de ella en diferentes estilos.

El lunes 26 a las 14:01 disputará los 1.500 libres. Si se clasificara a la final, tendría que nadar el miércoles 28 a las 04:54. Su tercera prueba serán los 800 libres, el jueves 29 las 12:02. En caso de pasar, competiría el sábado 31 a las 03:46. Su última prueba será el viernes 30 de julio a las 14:36. Su equipo en los 4x100 estilos lo componen África Zamorano, Lidón Muñoz y Jessica Vall. Si accede a la final, sería el domingo a las 04:15.

La sorpresa de su rendimiento no ha sido en exclusiva para los espectadores, también para ella misma. “No esperaba estar tan cerca de las medallas”, ha confesado. Queda por ver si las lesiones no vuelven a aparecer a lo largo de la competición.

Esta ha sido la síntesis de Mireia sobre la prueba. “Fue una carrera muy dura porque había mucha competencia y, aunque no llegaba en la mejor forma posible, lo he luchado bastante bien. En el sector de mariposa, a pesar de haberlo entrenado poquito, sabía que era una de mis bazas junto con el crol. Tenía que forzar como fuera para que después en la espalda no me sacaran tanto y no tuviera la braza tan difícil para remontar. Lo cierto es que ha sido una carrera bastante rápida para nada por la mañana. No estamos acostumbrados a nadar así por la mañana y ha estado bastante bien”.