Es noticia
"¡Quién nos iba a decir que íbamos a conseguir una medalla olímpica!"
  1. Deportes
  2. Juegos Olímpicos
la selección femenina jugará la final olímpica

"¡Quién nos iba a decir que íbamos a conseguir una medalla olímpica!"

El baloncesto español se aseguró una medalla olímpica por primera vez en su historia al ganar a Serbia en las semifinales de los Juegos de Río. El sábado jugará la final contra Estados Unidos

Foto: Las jugadoras españolas celebran la victoria (Shannon Stapleton/Reuters)
Las jugadoras españolas celebran la victoria (Shannon Stapleton/Reuters)
Foto: Delirio de las jugadoras españolas al final del partido (Jim Young/Reuters).

¿Qué se hace cuando acabas de ganar una semifinal de unos Juegos Olímpicos? Alba Torrens y Laura Nicholls, además de saltar y gritar de alegría como el resto de sus compañeras, recordaron dónde había empezado todo: en el Campeonato de Europa sub-16 disputado en Cuneo (Italia) en el año 2004. Allí gaanron su primer título con la selección española. Doce años después, también han ganado juntas una medalla olímpica. "Esto es lo único que nos faltaba. Me lo decía Alba, con la que llevo jugando desde los 13 años: Todo el camino que hemos hecho desde el primer Europeo. ¡Quién nos iba a decir a nosotras que íbamos a conseguir una medalla olímpica!", contó Nicholls.Ella y Torrens tenían solo 15 años entonces y jugar con la selección absoluta aún era un sueño, pero la oportunidad no tardó en llegar: cuatro años después disputaron los Juegos de Pekín, donde España cayó en cuartos de final. Ese era hasta esta semana el techo del baloncesto español, un techo que ha salido volando por culpa de un equipo que va a cerrar un ciclo difícilmente mejorable si no eres Estados Unidos: campeón de Europa en 2013, subcampeón del mundo en 2014 y medallista olímpico (plata u oro) en 2016. "Esto es demasiado para aceptarlo ahora. Suena a mucho, a muy bonito, a que tendré que tener nietos para poder contárselo", dijo Nicholls, la mejor contra Serbia con 13 puntos y 12 rebotes.

placeholder El abrazo de Lucila Pascua y Laia Palau, la dos jugadoras más veteranas del equipo (Jim Young/Reuters)
El abrazo de Lucila Pascua y Laia Palau, la dos jugadoras más veteranas del equipo (Jim Young/Reuters)

Las jugadoras se quedan sin palabras

El ambiente entre las jugadoras era casi de estupefacción; algunas no asimilaban lo que acababan de conseguir. Las más jóvenes no tenían palabras —"No me creo todavía que estemos en la final y nos vayamos a llevar una medalla colgada", dijo Laura Quevedo— y las veteranas estaban muy emocionadas. "Sueño con esto desde que existen los Juegos Olímpicos para mí. Toda la vida. Y desde que empecé a participar en Atenas. Estos son los terceros Juegos y nunca había imaginado que podía llegar hasta aquí", comentó Lucila Pascua.

Foto: Un lance del partido entre Estados Unidos y Francia (Larry W. Smith/EFE)

La capitana, Laia Palau, que como Pascua también estuvo en Atenas 2004, recordaba a las que no están. como Sancho Lyttle, una baja importantísima de la que el equipo ha sabido reponerse. "No está Sancho, que es una cosa de lo que sigo acordándome hoy. Pero Astou (Ndour) ha hecho un campeonato... Hemos hecho mucho equipo. Un día ha sido una, otro día ha sido la otra. Y cada día hemos sido todas", explicó, antes de salir corriendo por un pasillo gritando y saltando como una niña (no es la primera vez que lo hace en estos Juegos).

"Una final... olímpica. No me sale decirlo", acertaba a decir Anna Cruz, la heroína de los cuartos de final. La jugadora catalana repasó los últimos cuatro años, desde la decepción no estar en Londres a esta final en Río. "Somos un equipo ambicioso que siempre quiere más. Desde 2012 hemos ido subiendo peldaños hasta llegar hasta aquí. Es un grupo que se lo merece todo", continuó Cruz. "Somos la suma de muchas compañeras", afirmó Nicholls, en referencia a todas las jugadoras que han pasado por la selección.

Esta medalla, la única que quedaba por conseguir, era la más deseada del baloncesto español, sin la etiqueta de femenino. España es el sexto país que gana una medalla olímpica en ambas categorías. Los otros cinco son Estados Unidos, la URSS, Yugoslavia, Brasil y Francia. "Estamos en una nube y no nos queremos bajar de ella", comentó Pascua. Ni la previsible derrota en la final las va a bajar de ahí.

Foto: Delirio de las jugadoras españolas al final del partido (Jim Young/Reuters).

¿Qué se hace cuando acabas de ganar una semifinal de unos Juegos Olímpicos? Alba Torrens y Laura Nicholls, además de saltar y gritar de alegría como el resto de sus compañeras, recordaron dónde había empezado todo: en el Campeonato de Europa sub-16 disputado en Cuneo (Italia) en el año 2004. Allí gaanron su primer título con la selección española. Doce años después, también han ganado juntas una medalla olímpica. "Esto es lo único que nos faltaba. Me lo decía Alba, con la que llevo jugando desde los 13 años: Todo el camino que hemos hecho desde el primer Europeo. ¡Quién nos iba a decir a nosotras que íbamos a conseguir una medalla olímpica!", contó Nicholls.Ella y Torrens tenían solo 15 años entonces y jugar con la selección absoluta aún era un sueño, pero la oportunidad no tardó en llegar: cuatro años después disputaron los Juegos de Pekín, donde España cayó en cuartos de final. Ese era hasta esta semana el techo del baloncesto español, un techo que ha salido volando por culpa de un equipo que va a cerrar un ciclo difícilmente mejorable si no eres Estados Unidos: campeón de Europa en 2013, subcampeón del mundo en 2014 y medallista olímpico (plata u oro) en 2016. "Esto es demasiado para aceptarlo ahora. Suena a mucho, a muy bonito, a que tendré que tener nietos para poder contárselo", dijo Nicholls, la mejor contra Serbia con 13 puntos y 12 rebotes.

Selección Española de Baloncesto Serbia Alba Torrens Anna Cruz Astou Ndour Laia Palau Sancho Lyttle Juegos Olímpicos
El redactor recomienda