Tenis: horarios, españoles y sistema de competición con Rafa Nadal
Una de las disciplinas con más historia en el deporte español vuelve a tener un lugar de preferencia en estos Juegos Olímpicos. Hay opciones de medalla en los cinco cuadros
Historia
El tenis es uno de los deportes más universales, se juega en todo el planeta y destaca por su profesionalismo. Esto, de hecho, fue un gran problema para entrar en el programa de los Juegos Olímpicos, empeñados como estaban en un amateurismo que ya era historia en el deporte de la raqueta. El tenis es uno de los primeros deportes olímpicos, pues ya se compitió en 1896 cuando ganó el británico John Plus Boland. Seguiría con normalidad hasta 1924, con medallistas de gran brillo como Henry Cochet para, posteriormente, salir durante 64 años de los Juegos Olímpicos. Volvió por fin en 1988, cuando ya Samaranch había decidido que restringir los Juegos a no profesionales, con el rumbo que había tomado el deporte, era un sinsentido.
En el merdallero destacan Estados Unidos, con 20 oros y 36 medallas y Reino Unido, con 44 medallas, 20 de ellas de oro, la gran mayoría de ellas conseguidas en los inicios de los Juegos Olímpicos, España, con 11 medallas, es un valor seguro en los Juegos, aunque solo tiene un oro, el de Rafael Nadal en 2008. El equipo nacional cortó en Londres una excelente racha de victorias que fue desde 1988 hasta 2008 con al menos una medalla por Juegos.
Sistema de competición
El sistema es muy similar al que se ve en el circuito habitualmente: eliminatoria directa con cabezas de serie hasta la final. En el tenis olímpico se juegan, desde Londres, cinco disciplinas: individual y doble masculino, individual y doble femenino y dobles mixtos. La competición arranca tanto en individual como en dobles muy pronto, casi en la apertura, pero el dobles mixtos solo se incorpora a mitade de la prueba y está sujeto a posibles cambios de pareja por acontecimientos de la primera semana.
Horarios
La competición en tenis comenzará el día 6 de julio y se extenderá hasta el día 14. Como es costumbre en el deporte, los horarios se conocerán el día anterior.
Las fechas más importantes son:
- Final Individual masculino: Domingo 14, a partir de las 17.00.
- Final individual femenino: Sábado 13, a partir de las 17.00.
- Final dobles masculino: Viernes 12, a partir de las 17.00.
- Final dobles femenino: Domingo 14 de agosto a partir de las 17.00.
- Final dobles mixto: Miércoles 14 de agosto a partir de las 17.00
Españoles
Las opciones española son muchas y muy variadas, y prácticamente en todos los cuadros tendrá jugadores que, en buena lógica, deben ser competitivos. En el individual masculino España acude con Rafael Nadal, David Ferrer, Roberto Bautista y Albert Ramos. El primero de ellos ya es campeón olímpico y, a pesar de las lesiones y dos años fuera de su nivel, no deja de ser uno de los mejores tenistas de todos los tiempos. En el caso de Ferrer, parece difícil por lo visto recientemente que llegue a las medallas, pero siempre fue un jugador muy competitivo.
En el cuadro femenino España acude con dos de las diez mejores jugadoras del mundo. Carla Suárez ha probado este año en torneos importantes que sabe meterse en las rondas finales y vive uno de los mejores momentos de su carrera. Mayor aún son las opciones de Garbiñe Muguruza, número 3 del mundo, campeona de Roland Garros y una tenista con potencial para ganar a cualquiera, como ha demostrado en repetidas ocasiones.
Los equipos de dobles masculinos serán el compuesto por Rafael Nadal y su amigo Marc López por un lado y por David Ferrer y Roberto Bautista por otro. En el femenino la pareja Carla Suárez-Garbiñe Muguruza es una de las claras favoritas para la medalla, pues el año pasado consiguieron, por ejemplo, llegar a la final en la copa de maestras de final de año. Anabel Medina y Arantxa Parra también se han hecho con un hueco en el cuadro femenino.
En cuanto al dobles mixtos, la idea es que compitan juntos Garbiñe Muguruza y Rafael Nadal, dos estrellas colosales en sus respectivos cuadros.
Nombres a seguir
Todos los nombres candidatos son conocidos por el espectador, pues es una lista corta de los jugadores más conocidos del mundo. Ejemplos varios, como Novak Djokovic, Roger Federer o Andy Murray, que ya fue campeón olímpico en Londres. En el cuadro femenino una jugadora emerge sobre todas las demás: Serena Williams. La estadounidense tiene ya la impresionante cifra de cuatro oros olímpicos, y aspira al menos a dos más en Río, en individuales y en dobles con su hermana Venus, con la que resulta casi imbatible siempre que compite. Junto a ella otros nombres importantes serán Angelique Kerber, Agnieszka Radwanskao Simona Halep. En el dobles hay que sumar a las francesas Caroline Garcia y Kristina Mladenovic.
Curiosidades del deporte
Durante 68 años el tenis no fue competitivo en los Juegos Olímpicos, pero en dos ocasiones se disputó como deporte de exhibición. La primera de ellas fue en 1968 y España aún lamenta que no fuese oficial, pues consiguió el oro y la plata en individual masculino con Manuel Santana y Manolo Orantes así como la plata en el doble con Juan Gisbert y el propio Santana. También fue de exhibición en Los Ángeles 1984 y allí ganó el oro una sorprendente Steffi Graf, que en aquel momento tenía solo 15 años. Cuatro años más tarde, siendo ya oficial en Seúl, volvió a hacerse con el oro. Aquella temporada de 1988 es, probablemente, la más brillante de la historia para cualquier tenista, pues la alemana sumó a ese oro olímpico los cuatro torneos del Grand Slam.
Historia
El tenis es uno de los deportes más universales, se juega en todo el planeta y destaca por su profesionalismo. Esto, de hecho, fue un gran problema para entrar en el programa de los Juegos Olímpicos, empeñados como estaban en un amateurismo que ya era historia en el deporte de la raqueta. El tenis es uno de los primeros deportes olímpicos, pues ya se compitió en 1896 cuando ganó el británico John Plus Boland. Seguiría con normalidad hasta 1924, con medallistas de gran brillo como Henry Cochet para, posteriormente, salir durante 64 años de los Juegos Olímpicos. Volvió por fin en 1988, cuando ya Samaranch había decidido que restringir los Juegos a no profesionales, con el rumbo que había tomado el deporte, era un sinsentido.