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España desaparece dos cuartos para que Estados Unidos se lleve el oro de waterpolo
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LAS CHICAS DE OCA FIRMAN UN GRAN TORNEO Y SE LLEVAN LA PLATA

España desaparece dos cuartos para que Estados Unidos se lleve el oro de waterpolo

No se merecían una final así. Lucharon y pelearon por llegar al último partido de la competición para poder luchar por el oro, pero llegó

Foto: España desaparece dos cuartos para que Estados Unidos se lleve el oro de waterpolo
España desaparece dos cuartos para que Estados Unidos se lleve el oro de waterpolo

No se merecían una final así. Lucharon y pelearon por llegar al último partido de la competición para poder luchar por el oro, pero llegó el momento y se desinflaron. Nada pudieron hacer ante el poderío de la selección norteamericana, que se aprovecharon del único día tonto que tuvo el equipo de Miki Oca en la competición. El despiste llegó en el peor momento, el día en el que la gloria olímpica estaba en juego, pero ellas ya la habían conseguido. Han dado una lección y han logrado que toda España estuviera pendiente de una selección repleta de juventud y que apunta a más éxitos internacionales. De momento subcampeonas olímpicas. Ahí queda. Acabaron rotas, llorando por la derrota, pero la medalla de plata es suya.


Jennifer, Laura, Maica, Anni... se tienen que marchar orgullosas de lo que han hecho en Londres. Venían a ganar un partido y pese a perder el último y por goleada, han demostrado que tienen casta y waterpolo en sus piernas y manos para repetir dentro de cuatro años en Río de Janeiro. Ante Estados Unidos lo que otros días entraba, en esta ocasión se encontraba con la madera o con las manos o la cara de la portera Armstrong, que incluso detuvo un penalti. 

Las españolas no regalaron ni una pelota y pese a llegar ir seis goles abajo, nunca dejaron de nadar, de pelear y de luchar hasta la bocina final. Tanto que del demoledor 8-2 que llegó a figurar en el marcador, terminaron colocando un más que decoroso 8-5 gracias a la aparición de Anni Espar, que con dos tantos maquilló el resultado, que contó con la presencia de los Príncipes de Asturias en la grada.

Las de Oca desaparecieron en el segundo y tercer cuarto. Ahí estuvo la clave del partido y del oro olímpico. Tras dominar durante casi todo el primer cuarto con el gol de la capitana Jennifer Pareja, llegó el apagón. La adelantada defensa norteamericana y los cinco goles de Maggie Steffens dejaron sin capacidad de respuesta a las españolas. El brazo de la jugadora del Sabadell (logró tres goles) era el único que aparecía. Las demás no lograban ver hueco alguno entre los brazos de las defensoras y la portera yankee. Y cuando atacaban, Laura Ester nada podía hacer pese a sus tres paradas iniciales. Del 0-1 a favor de España se pasó a un contundente 8-2, que dejó sentenciado el partido y el oro olímpico, que se marcha hacia Estados Unidos.

- Ficha técnica

8 - Estados Unidos (1+4+2+1): Armstrong; Villa (1), Wenger (-), Maggie Steffens (4, 1p), Windes (-), Rulon (-), Craig (-), -equipo inicial-, Jessica Steffens (1), Petri (1), Seidemann (1), Mathewson (-) y Dries (-).

5 - España (1+1+0+3): Laura Ester; Espar (2), Ortiz (-), Pareja (3), Pilar Peña (-) Maica García (-), Laura López (-) -equipo inicial-, Bach (-), Meseguer (-), Tarragó (-), Miranda (-) y Blas (-).

Árbitros: Deslieres (CAN) y Stavridis (GRE). Exclusiones: Windes (2), Rulon, Maggie Steffens, Jessica Steffens (2), Seidemann, Petri y Craig. Ortiz (2), Bach, Miranda, Maica García, Espar y Laura López

Incidencias: Partido correspondiente a la final del torneo femenino de waterpolo, disputado en el Centro Acuático de Londres. Entre los asistentes se encontraba el príncipe de Asturias. Totalmente lleno. 

No se merecían una final así. Lucharon y pelearon por llegar al último partido de la competición para poder luchar por el oro, pero llegó el momento y se desinflaron. Nada pudieron hacer ante el poderío de la selección norteamericana, que se aprovecharon del único día tonto que tuvo el equipo de Miki Oca en la competición. El despiste llegó en el peor momento, el día en el que la gloria olímpica estaba en juego, pero ellas ya la habían conseguido. Han dado una lección y han logrado que toda España estuviera pendiente de una selección repleta de juventud y que apunta a más éxitos internacionales. De momento subcampeonas olímpicas. Ahí queda. Acabaron rotas, llorando por la derrota, pero la medalla de plata es suya.