Del campo al supermercado: la conciliación de un golfista y padre primerizo
Javier Colomo, segundo a un golpe del líder en el Challenge de Madrid, fue padre hace unas semanas, lo que obligó a perderse el Open de España disputado en Valderrama
Javier Colomo ha comenzado el Challenge de Madrid con una vuelta de 65 golpes en el Real Club de Golf de la Herrería. No es el líder, pero casi. Está arriba, a un golpe del primero. Donde le gusta. Donde dicta su golf. Donde sabe que puede estar. Tras firmar su tarjeta se iba directo al súper, a hacer la compra. “Es lo que toca a un padre primerizo”, aseguraba a Tengolf entre risas.
Colomo ha sabido sacar su mejor golf después de unos días que no han sido fáciles. No es sencillo estrenarse como papá ni tener que renunciar a un torneo como el Valderrama Open de España por el nacimiento de tu hija. Siempre tuvo clara cuál era su prioridad, por nada del mundo se iba a perder un acontecimiento tan importante en su vida, pero eso no quita para que la decisión fuera muy difícil de digerir, especialmente para un golfista al que nunca le han regalado nada.
Colomo es un currante del golf. Es su vida, lo sabe, lo asume, lo afronta y se la gana como puede y donde puede. Fue pionero en el Asian Tour. Abrió para el golf español una frontera que parecía cerrada a cal y canto. Demostró que también te puedes ganar la vida al otro lado del globo, aunque sea difícil, aunque tengas que ir librando cornadas semana a semana, conciliando la vida familiar con la profesional, sacrificando algunas cosas, haciendo esfuerzos. Tuvo momentos muy difíciles, pero siempre miró hacia delante. Por supuesto que a veces le han dado ganas de mandarlo todo a tomar viento, pero después volvía al campo de prácticas y se ponía a dar bolas. El golf le corre por las venas.
Tras renunciar al Open de España, Colomo ha ganado una prueba del Campeonato de Madrid de Profesionales, en Torrejón hace una semana, y ha firmado 65 golpes en el estreno del Challenge Tour de Madrid. “Por qué no, ojalá, ojalá me pase como a Danny Willett”, confesaba el madrileño de adopción nacido en Cáceres. Willett ganó el Masters de Augusta apenas dos semanas después de estrenarse como padre.
Colomo juega en casa, en Madrid, en la Herrería. Aquí está a gusto, no en vano ha ganado hasta once veces en la capital de España en los últimos cuatro años y ha conquistado los dos últimos torneos del Circuito de Madrid que se han disputado en La Herrería. “Me encanta este campo, pero bueno, sólo es el primer día”, asegura con ese tono prudente inherente a un golfista que las ha visto de todos los colores. Colomo busca la 12 en Madrid, la victoria número 12, y la más importante de su carrera. Es la única pieza del puzle que le falta.
Pero hablando de La 12, ya saben, posiblemente la afición más ruidosa y jubilosa del mundo, la barra brava de Boca Juniors, Colomo ya tiene su particular 12 en casa, su hija. Ningún grito de aliento será mayor motivación que ver la cara de su hija antes de salir a jugar una nueva ronda de golf. No será lo último que vea antes de pegar su primera bola del día, pero a buen seguro que será la imagen que tenga más nítida en su cabeza.
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Javier Colomo ha comenzado el Challenge de Madrid con una vuelta de 65 golpes en el Real Club de Golf de la Herrería. No es el líder, pero casi. Está arriba, a un golpe del primero. Donde le gusta. Donde dicta su golf. Donde sabe que puede estar. Tras firmar su tarjeta se iba directo al súper, a hacer la compra. “Es lo que toca a un padre primerizo”, aseguraba a Tengolf entre risas.
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