Inglaterra castiga la fragilidad de Senegal con un festival goleador y el fenómeno Bellingham

La selección inglesa derrotó a Senegal en un partido donde lo pasó mucho peor de lo que dicta el marcador. Inglaterra, con jugadores de gran talento en el equipo titular como Harry Kane, Jude Bellingham, Phil Foden o Bukayo Saka, aguantó contra las cuerdas las embestidas del equipo africano y castigó con puño de hierro cuando Senegal se cayó como un castillo de naipes en defensa. Jude Bellingham rompió al espacio para asistir a Jordan Henderson en el minuto 38 y poco después, otra vez, el futbolista del Borrusia Dortmund inició un contragolpe demoledor que no frenó Pathé Ciss, futbolista del Rayo Vallecano, condujo Foden y Kane remató a placer para el 2-0 en el descuento de la primera parte. Saka haría el definitivo 3-0 nada al inicio de la segunda parte. Senegal, sin la gran estrella de Sadio Mané, baja por lesión en Qatar, no tuvo el suficiente colmillo goleador para adelantarse previamente ni para recortar distancias después. Jude Bellingham fue la gran estrella del encuentro. Inglaterra ya está en cuartos de final, donde se medirá a Francia el próximo 10 de diciembre a las 20:00.

El fútbol puede llegar a ser muy cruel si no dominas las áreas. En una primera parte marcada por el dominio territorial de Senegal, Inglaterra sobrevivió a los peores momentos desde que desembarcase en Qatar. La selección africana, que mordió arriba y robó donde quiso durante muchos minutos, inquietó a Jordan Pickford. En el minuto cinco, con los dos equipos tanteándose, Ilman Ndiaye tuvo una ocasión de oro para abrir la lata, pero Harry Maguire salvó el gol africano sobre la bocina. Era el primer aviso, que no el último. Senegal amenazaba con alguna desconexión en defensa, pero lo solventó a tiempo cuando Saka se relamía.

Inglaterra tocaba la pelota sin ningún tipo de intención. Sin movilidad arriba y solo con Kane y Bellingham ofreciéndose. No progresaban ni generaban pánico en la zaga africana, así que Senegal, que tenía el plan de partido más claro, estuvo cerca de poner el susto en el cuerpo a Inglaterra cuando Sarr ganó a Maguire la partida, pero no obtuvo rédito de la jugada. Acto seguido, Senegal pidió penalti por mano de Stones tras el remate de Sarr, pero el árbitro no vio penalti. Dia tendría la más clara para Senegal a la media hora tras una gran acción, de nuevo, de Sarr. Pickford sacó una mano de titanio y evitó el gol senegalés. Senegal las había tenido, pero había perdonado... y lo pagaría muy caro.

El festival de contundencia inglés

El mérito de Inglaterra es tener grandes jugadores a pesar de no alcanzar su pico de juego colectivo. La calidad se le cae de los bolsillos. Por eso, en el minuto 38, después de una primera parte horrible, Harry Kane recibió el balón en tres cuartos, detectó la carrera al espacio de Bellingham y este, tras llegar a línea de fondo, puso una asistencia perfecta para que Jordan Henderson hiciera el primero sin oposición y dentro del área. No sería el último premio para los ingleses, que lograrían el 2-0 en un contragolpe de manual capitaneado por Bellingham. El jugador del Borussia Dortmund, capitán con solo 19 años en su club, se libró de Pathé Ciss tras perder la pelota, lanzó a Phil Foden y en una acción con similitudes a la del primer tanto, Kane pisó solo el área y envió el balón al fondo de la red.

Al inicio de la segunda parte, el técnico senegalés, Aliou Cissé, hizo un triple cambio y sacó a Pathé Ciss, Ndiaye y Diatta por Pape Saar, Dieng y Gueye, pero ya nada cambiaría. Saka dio el primer asusto en busca de la sentencia y en el minuto 57, Foden sacó petróleo de una jugada aislada, puso el centro para Saka y el jugador del Arsenal remató muy solo. Demasiado. Los errores defensivos de las selecciones africanas en este Mundial han dejado mucho que desear... a la espera de ver a Marruecos contra España.

El partido se había acabado, aunque todavía quedaba media hora por jugar. Gareth Southgate aprovechó para reservar a Saka, Foden, Stones, Bellingham y Henderson y dar minutos a los menos habituales, como Grealish, Mount, Rashford, Dier o Philipps. Kane estuvo cerca del doblete, pero se le escapó por muy poco. Al final, Inglaterra avanza a cuartos de final, donde ya espera la Francia de Kylian Mbappé y Antoine Griezmann, con una hoja de servicios impoluta en el marcador: 12 goles a favor y solo dos en contra, en el primer partido inaugural ante Irán.