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Suecia será la Dinamarca del 93, el escollo para el Mundial: "Necesitábamos un milagro"
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Una fase de clasificación parecida

Suecia será la Dinamarca del 93, el escollo para el Mundial: "Necesitábamos un milagro"

La Selección se jugó el pase al Mundial 94 también en Sevilla. Se enfrentaron a los daneses, vigentes campeones de Europa, y vencieron con un cabezazo de Fernando Hierro

Foto: España venció a Grecia tras la derrota de Suecia en Georgia. (EFE/Georgia Panagopoulou)
España venció a Grecia tras la derrota de Suecia en Georgia. (EFE/Georgia Panagopoulou)

España se enfrentará a Suecia en La Cartuja (21:00) para determinar si estará en el Mundial de Catar o tendrá que esperar a la repesca para certificar su presencia. Aunque a los más pequeños les parezca una utopía, la Selección ya pasó por una situación como esta: ocurrió en 1993 bajo la dirección de Javier Clemente.

‘El rubio de Barakaldo’ fue designado seleccionador en 1990 tras el fracaso de Vicente Miera, que no fue capaz de clasificar al equipo para la Eurocopa de 1992. Aquel torneo fue la última fase final a la que no acudió la Selección. Y una edición que ganó Dinamarca, cuya participación se debió al veto a Yugoslavia. La UEFA había decretado que no competiría por el inicio de la Guerra de los Balcanes.

La Selección fue emparejada en el grupo tres junto a Dinamarca, Albania, Letonia, Lituania, Irlanda del Norte e Irlanda. A priori, la clasificación era asequible, pero se atragantó hasta superar en un arduo partido a los daneses en el Sánchez Pizjuán (1-0) gracias a un tanto de Hierro. Fueron necesarias dos victorias en los dos últimos encuentros para estar en Estados Unidos 94. También fue fundamental la actuación de Cañizares, que debutó aquel día tras la expulsión de Zubizarreta. Pero ya habrá tiempo de regresar.

Foto: Cañizares, en Mestalla. (EFE)

Las entradas se agotaron con rapidez

Santi Cañizares recuerda en El Confidencial cómo fue aquel partido y su convocatoria: "Lopetegui fue citado, pero no pudo ir porque tuvo problemas de espalda. Aquella jornada se jugó un miércoles para que la concentración de la Selección, que jugaba el miércoles siguiente, fuera más larga. Así tenían más tiempo para preparar el partido. Yo jugué mi partido con el Celta y, tras ducharme, me dijeron que preparara mis cosas porque tenía que irme concentrado. El fax debió llegar en el transcurso del partido. Fue una sorpresa".

Sevilla se volcó con la Selección. La ciudad fue la sede del equipo entre 1984 y 1995, cuando Clemente prescindió de ella porque "jugar al fútbol en Sevilla es aliarse con el enemigo". Tras la victoria frente a Dinamarca, no pensó lo mismo: "Si hubiéramos jugado en otro sitio distinto a Sevilla, no hubiéramos ganado".

La UEFA puso 22.000 localidades a la venta y la ciudad se volcó con la Selección. Los aficionados comprar las entradas cuatro días antes del partido y se generaron grandes colas. 48 horas más tarde, ya no quedaba ninguna. Cuando se abrieron las taquillas, las radios se hicieron eco de la gran afluencia de aficionados y fueron rotundas: "Esto, ni cuando la Expo". El deseo de estar en el partido acabó con cargas policía, el único remedio para disolver el caos generado en las colas. Además, La Cruz Roja y el 061 atendieron a 21 personas afectadas por los altercados. Entre ellos, un niño que se rompió un tobillo.

placeholder Los jugadores de la Selección, tras el entrenamiento. (EFE/Pablo García)
Los jugadores de la Selección, tras el entrenamiento. (EFE/Pablo García)

La concentración fue en Sancti Petri

La Selección no estaba en Sevilla los días previos al encuentro, ya que Clemente optó por concentrase en Sancti Petri, en Chiclana de la Frontera (Cádiz). Los jugadores disfrutaron de un día libre durante la concentración que aprovecharon para jugar al golf, al mus, dominó o ping pong. También para bromear. Se disfrazaron y se colaron en la habitación de Clemente para asustarle, simularon caídas en la puerta del ascenso para ver la reacción de los huéspedes… Miguel Ángel Nadal se arrancó por sevillanas y otros compañeros simularon el carnaval de Cádiz con caretas y sábanas.

"Casi que yo no era un futbolista porque no lo tomaba como un partido en el que yo tuviera que jugar. Nunca me sentí como uno más en los entrenamientos, no por los compañeros, sino porque me sentía un invitado. España necesitaba un milagro porque Dinamarca era la campeona de Europa", rememora Cañizares.

Enfrente estaba Dinamarca, cuyas estrellas eran los hermanos Laudrup, Michael y Brian. El primero militaba en el Barcelona de Cruyff y el segundo en el Milán. Brian habló claramente en la previa del encuentro: "Jugaremos contra el Barça sin extranjeros".

placeholder Michael y Brian Laudrup. (EFE/Liselotte Sabroe)
Michael y Brian Laudrup. (EFE/Liselotte Sabroe)

Más espectadores de los permitidos

Finalmente, accedieron más espectadores de los que permitía la UEFA, según publicaron las crónicas de la época. El partido empezó muy cuesta arriba tras la expulsión de Zubizarreta en el 10’ por derribar a Laudrup después de un pase que le llegó directamente al danés. El cancerbero discrepó con la decisión del colegiado: "No le he llegado a hacer falta, pero, tal y como lo ha visto el árbitro, estas acciones terminan con tarjeta roja".

Cañizares, que no estaba en el banquillo, se cambió rápidamente para reemplazar a su compañero. "Yo estaba en el foso porque la altura de los banquillos era muy baja y yo quería ver el partido. Cuando expulsaron a Zubi, pensé que tenía que ser frío. Yo no era el responsable de que la Selección hubiera llegado a esta situación", recuerda Cañete.

La Selección, no obstante, se repuso del golpe y fue a ganar el partido. Lo consiguió gracias a un tanto de Fernando Hierro, que cabeceó un córner tras el bloqueo de José Mari Bakero al portero danés, Peter Schmeichel. Aquello fue el golpe definitivo.

placeholder Peter Schmeichel. (EFE/Mario Cruz)
Peter Schmeichel. (EFE/Mario Cruz)

Clemente fue claro en el descanso

Habla Cañizares: "En el descanso, Clemente nos dejó cinco minutos para reposar por todo lo que había pasado en la primer parte. Lo único que hicimos fue defendernos del ataque de los daneses. Nos dijo que el único momento en el que se podían igualar las fuerzas era en las acciones a balón parado. Así fue. A partir de ahí tuve mucha tensión y el partido se me hizo eterno". El propio Cañete habló desde un teléfono del estadio con su madre tras la victoria. "Hijo mío, a punto estuvo de darme un infarto", le dijo su progenitora.

Aquel día, había personalidades de todo tipo en el palco. Desde el presidente del Madrid, Ramón Mendoza, al ministro de Comercio y Turismo, Javier Gómez Navarro, y el de Educación, Suárez Pertierra. También acudieron Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, y Rafael Cortés Elvira, secretario de Estado para el Deporte.

Las declaraciones de dichos representantes se sucedieron tras el partido. Estas fueron las de Gómez Navarro: "Esto sólo es comparable al ambiente de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Hemos sufrido mucho, pero ha valido la pena. Es un éxito muy importante para la moral del país. Y para mi propio sector, el turístico, el mes del Mundial será muy fructífero en todos los sentidos".

placeholder Zubizarreta fue expulsado aquel día. (EFE/Guillaume Horcajuelo)
Zubizarreta fue expulsado aquel día. (EFE/Guillaume Horcajuelo)

"Nadie podrá cuestionar nunca más la sede de la Selección. El espíritu andaluz es increíble. Aplauden hasta los fallos. Pero en estos momentos quiero ir a darle un abrazo a Zubizarreta. Sé que lo ha pasado muy mal. A mí, particularmente, la expulsión me ha dejado estupefacto. En general, ha sido el premio a todo un grupo humano. El justo premio a todo un trabajo", declaró Cortés Elvira.

Así habló Ramón Mendoza. "He dado un salto cuando Hierro ha marcado, pero aún otro mayor con la clasificación. Me enorgullece que el gol lo haya marcado un jugador del Madrid, pero sobre todo me alegro por España. Yo, posiblemente, habría traído algún jugador más, aunque todos lo han hecho muy bien".

Los jugadores se lanzaron al césped por indicación de Salinas para celebrar la clasificación. También hubo besos a los postes por parte de Kiko y Cañizares, que habló sobre ese tema: "Besé la portería porque en ese estadio siempre hemos tenido un gran apoyo y eso es fundamental".

placeholder Kiko fue uno de los cambios de Clemente aquel día. (EFE/Juanjo Martín)
Kiko fue uno de los cambios de Clemente aquel día. (EFE/Juanjo Martín)

Hubo presencia danesa en Sevilla aquel día. Se desplazaron 4.000 daneses para ver el encuentro, a los que les cantaron 'Canta y no llores' los espectadores que llenaron el Pizjuán. A pesar de la gran actuación de Cañizares, Clemente fue rotundo en rueda de prensa: "Estuvo muy bien, pero Zubi será el mejor portero del Mundial".

España fue al Mundial, en la que el enfrentamiento entre PRISA y Clemente tuvo casi el mismo protagonismo que la Selección. En cuartos, se enfrentaron a Italia, que salió vencedora (2-1). Aquel día fue el del codazo de Tassotti a Luis Enrique, precedido por el fallo de Salinas. Ahí se acabó lo que se cimentó en Sevilla.

España se enfrentará a Suecia en La Cartuja (21:00) para determinar si estará en el Mundial de Catar o tendrá que esperar a la repesca para certificar su presencia. Aunque a los más pequeños les parezca una utopía, la Selección ya pasó por una situación como esta: ocurrió en 1993 bajo la dirección de Javier Clemente.

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