Es noticia
Alicante cumple con el guion previsto y silba con contundencia a Piqué
  1. Deportes
  2. Fútbol
lo que se esperaba DE ANTEMANO

Alicante cumple con el guion previsto y silba con contundencia a Piqué

La afición que se congregó en el Rico Pérez expresó con mucha claridad que no comulga con el pensamiento de Piqué. Como sucedió en otros estadios, el barcelonista fue silbado con fuerza

Foto: En la imagen, Gerard Piqué durante el España-Albania. (EFE)
En la imagen, Gerard Piqué durante el España-Albania. (EFE)

Tras jornadas cargadas de tensión, llegó el momento de la verdad para Gerard Piqué. Tuvo que comparecer ante los medios para dar explicaciones sobre su posicionamiento en el conflicto catalán. Se trataba de calmar el ambiente ante la cita de España ante Albania en el Rico Pérez. Y no, a la afición española no pareció que le convencieran plenamente las declaraciones del jugador del Barcelona. Una vez más, la enésima, escuchó silbidos el zaguero, que vio tarjeta amarilla y se perderá el partido ante Israel del próximo lunes.

Poblado de miles y miles de banderas, el estadio alicantino expresó su opinión a las primeras de cambio. Con gesto serio escuchó el himno Piqué, que en cuanto tocó el balón por primera vez, tuvo que aguantar lo de siempre, al menos lo que ha vivido durante los últimos años. Silbidos muy contundentes en cuanto a las primeras de cambio entró en contacto con el balón. Y así siguió sucediendo, por momentos con mucha más fuerza.

Por mucho que desde el interior de la Selección se ha intentado, desde hace tiempo, convencer a la afición española de que no es conveniente pitar a Piqué por el bien del grupo, los últimos acontecimietos ocurridos en Cataluña, más el posicionamiento del zaguero, han hecho imposible pacificar el ambiente. Cuando aparecía en escena, lo normal era que soltará el balón sin dejar pasar demasiado tiempo; cuando lo hacía suyo durante más segundos de lo habitual, la ruidosa pitada se estiraba temporalmente lo que hiciera falta.

placeholder El Rico Pérez estuvo poblado por miles de banderas de España. (Reuters)
El Rico Pérez estuvo poblado por miles de banderas de España. (Reuters)

Es cierto que también desde diferentes puntos del estadio se pudo apreciar que numerosos seguidores animaban a Piqué. También se pudo ver alguna pancarta cargada de cariño hacia el defensa, pero la realidad es que los pitidos se impusieron casi siempre con nítida claridad. Misma situación se dio cuando fue sustituido por Nacho. El central catalán se despidió aplaudiendo a la afición, mientras que la grada siguió dividida, aunque sí se pudieron oír más aplausos. El momento más simbólico llegó a diez minutos del final. Parte de la afición comenzó a corear 'Piqué, Piqué', pero ni con esas: algunos de los asistentes al Rico Pérez silbaron el cántico.

La respuesta de la afición que se congregó en el estadio del Hércules era esperada. Ya cuando aterrizó el equipo nacional en Alicante, el zaguero fue blanco de abucheos y sonoros silbidos, tanto en el aeropuerto como en el hotel de concentración. Por la tarde, en el último entrenamiento del combinado previo al encuentro, también tuvo que escuchar música de viento y diferentes improperios, aunque la bronca con la que fue recibido al pisar el césped del estadio, dio paso después a un coro de afectuosos aplausos que se dejaron sentir. Por contra, la gran ovación en ese momento fue para Sergio Ramos, que al ingresar en el campo fue calurosamente recibido.

[Más noticias de fútbol]

La compleja situación incomoda cada vez más a Julen Lopetegui y el resto de jugadores. El seleccionador español ha tratado, en público y en privado, de normalizar la situación, algo que no ha conseguido por el momento. Mientras, muchos futbolistas están muy cansados de tener que dar siempre la cara por Piqué, cuando éste, muchas veces, es con sus intervenciones el que enciende la mecha de la polémica. Por el momento, siempre con Sergio Ramos ejerciendo de capitán y lanzando más de un aviso al catalán, todos cierran filas cuando dan la cara ante los medios, pero más de uno comienza a perder la paciencia al tener que pacificar el ambiente —el compañerismo obliga a ello— en cada concentración de la Roja.

Tras jornadas cargadas de tensión, llegó el momento de la verdad para Gerard Piqué. Tuvo que comparecer ante los medios para dar explicaciones sobre su posicionamiento en el conflicto catalán. Se trataba de calmar el ambiente ante la cita de España ante Albania en el Rico Pérez. Y no, a la afición española no pareció que le convencieran plenamente las declaraciones del jugador del Barcelona. Una vez más, la enésima, escuchó silbidos el zaguero, que vio tarjeta amarilla y se perderá el partido ante Israel del próximo lunes.

Gerard Piqué Alicante Albania Julen Lopetegui
El redactor recomienda