Capello, el hombre de los 7 millones, está obligado a no pensar todavía en Rusia 2018

El Grupo H está loco. Mientras que Bélgica ha conseguido la clasificación dejando unas sensaciones bastante peores de lo que se esperaba en un primer momento -aunque deberá pelear por ser primera-, el resto de contendientes siguen con vida en busca de la clasificación. Y, sin duda, el más afortunado de estos equipos es Rusia. Después del ridículo que ha hecho en las dos primeras jornadas, el equipo europeoaún sigue dependiendo de sí mismo. Si el conjunto entrenado por Fabio Capello consigue ganar a Argelia, conseguirá el pase a los octavos de final.

El combinado ruso, de momento, ha decepcionado en el presente Mundial. Después de doce años de ausencias en la Copa del Mundo, el equipo de Capello sorprendía a propios y extraños tras lograr clasificarse como primera de grupo al torneo, por delante de un equipo tan poderoso como la Portugal de Cristiano Ronaldo. La euforia desatada por la afición fue desmedida, e incluso se empezó a soñar con la posibilidad de dar la sorpresa en Brasil. Pero, de momento, en los dos primeros partidos ha decepcionado sobremanera un equipo que estaba llamado a más.

Una vez conocido que el Mundial de 2018 se jugará en Rusia, suFederación decidió que había llegado el momento de dar un paso al frente en busca de diseñar una selección capaz de luchar por el título. Asi, a seis años vista y con otro campeonato del mundo de por medio, se decididó fichar a Fabio Capello como técnico, convirtiéndolo en el seleccionador mejor pagado del mundo, con un salario de 7 millones de euros. Sus primeros compases fueron brillantes, pero, a la hora de la verdad, Rusia está decepcionando y las críticas no se han hecho esperar.

Los escasos minutos con los que están contando jugadores como Alan Dzagoev, Igor Denisov, Yuri Zhirkov o Alexander Kherzakov han sido motivo de crítica en su país, donde tampoco ha pasado desapercibido el gran error de Igor Akinfeev en el primer partido o el mal estado de forma de Alexander Kokorin. La idea de la Federación Rusa era que Capello fuera capaz de crear un grupo potente que pudiera luchar por el título en su Mundial en 2018, pero los primeros ensayos en el presente campeonato han pinchado en hueso.Aunque, de manera increíble, el conjunto europeo sigue dependiendode sí mismo.

Tras fracasar en el primer partido del torneo ante Corea del Sur, con un empate completamente inesperado (1-1), Rusia perdía en el tramo final de partido ante Bélgica en un partido demasiado gris de los de Capello (1-0). Sin embargo, la victoria de Argelia sobre Corea del Sur (2-4) ha permitido seguir con vida al combinado del este europeo, que se jugará el pase a una carta: una simple victoria en el último partido ante los 'Zorros del desierto' les haría meterse en octavos, donde se medirían al segundo el Grupo H: es decir, Alemania, EEUU, Ghana o Portugal.

Argelia, por su parte, llega al partido tras brillar en el partido ante Corea del Sur, donde se destapó la última figura magrebí: Islam Slimani. El delantero del Sporting de Lisboa firmó un partido soberbio, tras conseguir un tanto y dos asistencias ante el combinado asiático, lo que le ha convertido en una de las grandes sorpresas del torneo. Tratará de seguir con el mismo nivel de juego ante Rusia, donde tiene todas las papeletas de jugar de inicio después del festival de fútbol ofrecido, que ha conseguido revitalizar a Argelia y darle opciones de pasar a octavos.

Bélgica, a cerrar el primer puesto

Por su parte, Bélgica está ante una ocasión única para pasar como primera de grupo. El conjunto de Marc Wilmots está considerado como uno de los grandes 'tapados' del torneo, pues el amplio elenco de estrellas que tiene en su equipo le convierte en unareferencia en el torneo. Pero, lo cierto, es que las dos victorias conseguidas hasta el momento han sido sin demasiado brillo, y ambas en los últimos momentos de sus dos partidos: la primera, tras remontar a Argelia con un tanto de Mertens en el 80'; la segunda, con un gol de Origi en 88'.

Enfrente estará una Corea del Sur que quiere dar la sorpresa. El conjunto asiático lo tiene complicado: necesita ganar por tres goles a Bélgica y que Argeliay Rusia empaten; o que Rusia gane y lograr otra victoria con un gol más ventaja que la que consiguieran los europeos. Pese a dar la sorpresa en el primer partido del Mundial tras empatar con el conjunto de Capello, los asiáticos se han desinflado. Algo que no quiere que le pase a Rusia, que quiere seguir dando minutos en un Mundial a una generación que está 'obligada' a no fallar en la Copa del Mundode su país.