Mbappé no 'falta' a su cita: un Panenka y un gran tiro libre firman la remontada del Madrid

El Real Madrid logró una trabajada victoria ante un peleón Leganés (3-2), en un partido donde los blancos se adelantaron pero, tras dormirse en los laureles, tuvieron que pelear de lo lindo para dar la vuelta al marcador. Un doblete de Mbappé, de penalti y de lanzamiento de falta, amén de una gran acción de Bellingham, firmaban la victoria blanca que les permite seguir en la pelea por la Liga y, sobre todo, despegar al Atlético de la pelea. Un triunfo trabajado que sabe a gloria.

Ancelotti decidió apostar por un par de cambios de inicio para, así, dar descanso a los jugadores sudamericanos, con menos horas de descanso. Arda Güler, Brahim y Modric salieron de inicio, en lugar de Vinícius, Rodrygo y Valverde. La idea era tener balón y encontrar oportunidades por fuera, haciendo grande el campo, en busca de los espacios que Mbappé pudiera encontrar ante un Leganés que se cerraría y trataría de sorprender en velocidad. Y el guion se cumplió.

El Madrid comenzó dominando el balón y solo encontraba oportunidades cuando Modric y Bellingham movían el balón con velocidad de dentro hacia afuera. El croata y Mbappé eran los más activos, dominando los espacios y hallando combinaciones donde no parecían haberlas. Pasaban los minutos sin ocasiones claras, donde los blancos controlaban el balón, pero no encontraban el último pase. Y, pasada la media hora, en la primera combinación con profundidad, llegaría el gol blanco.

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Rubén Rodríguez

En un balón filtrado al área, Óscar iba a impactar de manera inocente con Arda Güler, al que tiraba al suelo. González Fuertes señalaba penalti y Mbappé asumía la responsabilidad. Sin nervios, a lo Panenka y con mucha clase, el francés ponía por delante al Madrid en el marcador. Pero, precisamente cuando los blancos habían encontrado la manera de romper la igualada, se iba a venir el plan abajo. El Leganés sorprendía para dar la vuelta al marcador en ocho minutos.

Justo en la jugada posterior al tanto blanco, los pepineros aprovechaban el desorden blanco para empatar. Juan Cruz se marchó en velocidad y conectó con Rosier, quien filtró un balón al área para que Diego García marcara a placer tras un lamentable fallo de Lucas Vázquez. Brahim perdonaba una ocasión clara un minuto más tarde, lo que no hizo Raba en el 41' donde, tras un contraataque mal cerrado de nuevo en banda derecha, empujaba a gol un pase de la muerte de Óscar.

Era el momento de reaccionar

Antes de marcharse a los vestuarios, Mbappé tuvo dos ocasiones, pero no encontró el camino del gol. Algo tenía que cambiar el Madrid si quería aprovechar el pinchazo del Atlético y seguir peleando por la Liga... y fue dicho y hecho. Solo hicieron falta unos segundos tras la reanudación para igualar el partido. En una gran combinación, Dmitrovic desviaba el disparo de Bellingham, Tapia salvaba en la línea el posterior remate de Brahim y, tras pegar en el travesaño, Jude remataba a gol.

El Madrid saltó con garra, intensidad y mucho más vértigo, pero seguía teniendo problemas para cerrar en defensa. De hecho, a punto estuvo de volver a marcar Diego García solo un minuto después, que no embocó a portería un mano a mano contra Lunin. Pero el Madrid era otro. Fue en el 53' cuando, en un tiro desde la frontal, Brahim se encontraba con el palo. La avalancha era evidente. El encuentro marchaba 2 a 2, pero Dmitrovic había hecho 7 paradas; Lunin, ninguna.

Los blancos querían los tres puntos y, pasada la hora de partido, Vinícius y Rodrygo saltaban al césped. El Madrid necesitaba más vértigo. Solo unos minutos después, era Valverde el que entraba al campo. Ancelotti ponía toda la carne en el asador. Pero quien iba a cambiar el partido era el de casi siempre, pero haciéndolo como casi nunca. Y es que Mbappé iba a marcar un gran gol de falta, no sin cierta polémica, pues la falta que derivó en el gol estaba cogida con pinzas.

En una buena conducción de Rodrygo, Tapia se lanzaba al suelo para tratar de cortar el balón, rozando mínimamente al brasileño. Tras señalar la falta, Mbappé engañaba a todo el mundo y, cuando parecía que iba a colgar el balón al área, sorprendía a Dmitrovic para anotar un golazo en el lanzamiento directo. El francés, con un gran doblete, comandaba al Madrid a una victoria vital en sus aspiraciones ligueras. Ahora, era momento de cerrar el partido y evitar sustos.

Pudo cambiar el marcador por parte de ambos equipos, pero ninguno encontró el camino del gol. Al borde del 90', Munir no acertaba con un cabezazo meridiano con la meta de Lunin; escasos minutos después, Vini no finalizaba una buena contra en la que le acompañaba Mbappé. Y, en una nueva remontada, el Madrid se llevó tres puntos de oro en su lucha por la Liga, un triunfo que le permite seguir peleando por reeditar uno de los títulos de los que es vigente campeón.