El ocaso de Griezmann coloca a Simeone y al Atlético en un dilema que apunta a la MLS

Antoine Griezmann vive un momento decisivo en su segunda etapa en el Atlético de Madrid. El futbolista francés, crucial para Diego Pablo Simeone, cumplirá 34 años el próximo 21 de marzo y es el segundo jugador rojiblanco más utilizado por el técnico argentino esta temporada. Solo Jan Oblak ha disputado más minutos este curso y el galo ya supera la barrera de los 3.000 minutos. Además, también es el segundo máximo goleador del equipo con 16 tantos, únicamente por detrás del estelar Julián Álvarez y sus 23 dianas.

El problema es que Griezmann, que ya renunció a la Selección de Francia en septiembre de 2024, es una estrella que afronta el ocaso de su carrera. El delantero francés enamoró a Simeone por su ética de trabajo y su talento le impulsó a convertirse en el máximo goleador en la historia del Atlético de Madrid. No fue un camino fácil.

"Había momentos que llegaba a casa después de los entrenamientos y le decía a mi mujer 'a este no lo aguanto más, no entiendo qué quiere de mí'. Yo era más un jugador que no disparaba mucho a puerta y a veces paraba el entrenamiento diciéndome que había que chutar y hacer goles", contó Griezmann en un homenaje del Atlético de Madrid.

Más de una década después de que el Atlético lograra cerrar su contratación, Griezmann está a un año (junio de 2026) de terminar su contrato con el club colchonero. El jugador francés mira con deseo y curiosidad a la MLS de Estados Unidos.

Un país en el que se le ha podido ver en multitud de ocasiones en encuentros de la NBA, la MLB (béisbol), así como en la Superbowl de la NFL. Dos excompañeros franceses de Griezmann como Hugo Lloris y Olivier Giroud están en los Ángeles FC. Relevo informó que sería el equipo escogido por Griezmann en caso de saltar el charco.

Griezmann y una acción muy fea con Casadó

En el decisivo partido por LaLiga frente al FC Barcelona, Griezmann igualó los 520 partidos de Messi como el futbolista extranjero con más encuentros disputados en LaLiga. El galo se inventó un pase fantástico para que Giuliano Simeone asistiera a Julián Álvarez y el argentino colocase el 2-0 en el marcador del Metropolitano. El delantero francés también protagonizó una acción muy fea que tanto los jugadores del Barça como la afición culé le echaron en cara: una entrada a destiempo sobre Marc Casadó que ha acabado con el jugador fuera de combate.

"Las pruebas realizadas esta mañana han mostrado que el jugador del primer equipo, Marc Casadó, tiene una lesión en el ligamento de la rodilla derecha", informó el Barça en sus redes sociales. Aunque el club todavía no ha determinado el alcance de la lesión de su centrocampista, Casadó podría perderse lo que resta de temporada. No fue una noche fácil para Antoine Griezmann, que jugó hasta el minuto 86 del choque.

Cada vez menos decisivo

Griezmann es un futbolista distinto y especial. Un jugador que ha tratado de suplir su bajón físico, aquel que le impide aparecer en el área tanto como antes y liderar contragolpes con poderosas conducciones, con su descomunal talento. La figura de Julián Álvarez le ha quitado responsabilidad ofensiva a la hora de finalizar jugadas y le ha liberado de la presión que afrontaba por liderar al Atlético de Madrid en ataque. Sin embargo, como ya sucediese el curso pasado, Griezmann va de más a menos.

A finales de enero, Simeone habló de Griezmann tras golear al RB Salzburg en la Champions League. "Un partido de los mejores de estos últimos meses, muy concreto, contundente, cercano al gol, tuvo la opción de hacer más goles. Lo necesitamos así, es muy importante para nosotros y esperemos que pueda sostener lo que nos da".

Sin embargo, el astro francés solo ha marcado un gol y ha dado una asistencia en los últimos 10 partidos entre todas las competiciones. Además, esta es la segunda temporada en que menos pases por encuentro está realizando el galo (22.4), según el portal estadístico FBref, desde que llegase al Atlético. Eliminado de la Champions y con LaLiga cuesta arriba, Griezmann abraza la Copa del Rey para engordar su palmarés con el Atlético de Madrid. Con solo tres títulos como rojiblanco (Supercopa de España, Europa League y Supercopa de Europa), Griezmann debe volver a decidir.