Griezmann desata la locura con un gol épico y el Atlético de Madrid sueña con LaLiga (4-3)

El Atlético de Madrid tumbó al Sevilla en un partido de altos vuelos en el Metropolitano que no se resolvió hasta el minuto 93 (4-3). Los rojiblancos, que empezaron ganando gracias al golazo de De Paul, perdieron la cabeza con el gol de Lukebakio y vieron cómo Isaac Romero remontaba el choque en el primer tiempo. Ya en la segunda parte, Juanlu Sánchez puso tierra de por medio cuando el Sevilla lo estaba pasando muy mal. Los rojiblancos desperdiciaron un gran número de ocasiones claras, especialmente en el caso de Sorloth.

Sin embargo, el empuje y el corazón del Atlético de Madrid, muy enfadado por un penalti claro no pitado sobre Gallagher, logró poner las tablas con los goles de Antoine Griezmann y Samuel Lino. Cuando parecía que el Sevilla podía salir con un punto de un campo negro para los andaluces, Griezmann marcó un gol descomunal para desatar la locura en el Metropolitano. El Atlético se coloca a tres puntos del Barça y entra de lleno en la lucha por LaLiga.

El conjunto de Diego Pablo Simeone empezó el encuentro como un tiro, tomando la iniciativa y dibujando la primera gran ocasión clara del partido. Antoine Griezmann estrelló la pelota en el larguero después de que Julián Álvarez detectara la entrada al área del galo. Los rojiblancos evadieron la presión del Sevilla y otra vez Griezmann, incontrolable para los sevillanos, forzó un paradón de Álvaro Fernández.

Solo tres minutos más tarde, en el minuto 10, el Sevilla tuvo una pérdida absurda en su frontal y De Paul sacó un latigazo para adelantar al Atlético de Madrid. Sin embargo, el Sevilla reaccionó con celeridad a balón parado. El conjunto de García Pimienta sacó el córner en corto, Lukebakio dribló a Julián Álvarez y firmó un zapatazo que Oblak no pudo detener en el minuto 12.

El gol sevillista significó un mazazo para el Atlético de Madrid, que siguió tratando de robar la pelota arriba, pero sin tanto éxito como en los primeros compases del choque. Los andaluces conservaron la pelota, atrayendo futbolistas rivales y manipulando la presión local. En una escapada perfecta al contragolpe tras una pérdida de De Paul, Kike Salas encontró la carrera de Isaac Romero a la espalda de Giménez y Lenglet, a los que dejó desparramados por el camino, y batió a Oblak en el 31.

Un penalti claro que no Alberola Rojas no vio

Los rojiblancos enloquecieron en ese momento, volcándose en ataque pero dejando las puertas abiertas al tercer tanto visitante. La precipitación y falta de contundencia colchonera dotaron de oxígeno al Sevilla, quienes evitaron el gol de Gallagher en el último momento. Los locales pidieron penalti de Álvaro Fernández por golpear claramente al centrocampista inglés cuando el guardameta trataba de evitar el tanto, pero el equipo arbitral encabezado por Alberola Rojas no señaló nada punible.

Ya en el descuento de un primer tiempo con mucho ritmo y alternativas, De Paul encontró a Julián Álvarez en el interior del área, aunque el gol no subió al marcador por fuera de juego. El Sevilla rozó el 1-3, porque Lenglet abortó el pase de la muerte de Lukebakio cuando su compañero ya se relamía. Los rojiblancos habían generado ocasiones claras, pero habían perdido el hilo con el tanto sevillista y quedaban muy expuestos al contragolpe.

El mazazo del Sevilla

La segunda parte inició con un Atlético de Madrid dominador y un Sevilla que esperaría su oportunidad al contragolpe. La luz de la creatividad rojiblanca se apagaba en el último tramo del campo, donde Julián Álvarez y Griezmann no acabaron de entenderse. A los andaluces les duraba la pelota muy poco, mientras Giuliano Simeone se topó con Álvaro Fernández en otra llegada loca.

Sin embargo, sería el Sevilla el primero en ver portería en el minuto 56. Los andaluces trenzaron una jugada coral muy larga, donde fueron batiendo líneas de presión locales, mientras Javi Galán llegaba tarde a su marca y Juanlu Sánchez entraba en el área con todo para poner el 1-3. El Metropolitano respondió con silbidos y los rojiblancos contestaron con el gol de Griezmann en el minuto 62 a pase magistral de Pablo Barrios para recortar distancias en el marcador.

Griezmann, líder del Altético

El estadio colchonero bramó y Simeone echó más leña al fuego con Sorloth y Koke por Gallagher y De Paul, mientras que Saúl Ñíguez ocupó el lugar de Peque y se llevó la ovación del Metropolitano en su vuelta a casa. El partido entró en ebullición. Galán disparó por encima del larguero y Simeone pidió coraje y ánimo a los suyos. Los colchoneros se precipitaban y Álvaro Fernández vio la amarilla por perder tiempo.

Sorloth tendría la gloria a un cabezazo, pero el portero del Sevilla sacó una mano imperial para negarle el gol al ariete noruego. Solo un minuto después, Javi Galán encontró solo en el área al delantero nórdico y Sorloth, con un cabezazo al medio, se chocó con Álvaro Fernández. Sorloth desperdiciaría otras dos ocasiones claras más, con un hat-trick de cabezazos al limbo y un intento de remate infructuoso.

Sin novedades del noruego, Lino recibió la pelota en la frontal y ajustó su disparo a la base del palo para colocar el 3-3 en el minuto 80. El brasileño, con muchas dificultades en los últimos encuentros, dio un golpe en la mesa cuando el Atlético de Madrid no encontraba la puntería suficiente para empatar el choque. Los últimos 10 minutos serían para el Atlético de Madrid, volcado en ataque y controlando los contragolpes a campo abierto de los andaluces. En el minuto 93, Lino encontró a Griezmann en el interior del área y el francés marcó un gol descomunal para darle la victoria al Atlético de Madrid.