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Alcaraz tritura a Tsitsipás con un tenis sublime en Roland Garros y Djokovic ya espera en semifinales
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Rompe su récord en el torneo

Alcaraz tritura a Tsitsipás con un tenis sublime en Roland Garros y Djokovic ya espera en semifinales

El tenista español no dio opción al griego en los cuartos de final (6-2, 6-1 y 7-6) para superar su registro en París y presentar su candidatura al título. Djokovic, rival en semis

Foto: Alcaraz remató a Tsitsipás en un tercer set durísimo. (Reuters/Benoit Tessier)
Alcaraz remató a Tsitsipás en un tercer set durísimo. (Reuters/Benoit Tessier)

No tuvo piedad. Carlos Alcaraz zarandeó al número cinco del mundo como si fuese un tenista del montón hasta el tercer set (6-2, 6-1 y 7-6, con tie-break). El griego Stéfanos Tsitsipás, consciente de que el español es un rival que se le ha atragantado en los últimos tiempos, intentó protagonizar un partido basado en la agresividad y los golpes ganadores rápidos. Sin embargo, la contundente contestación de Alcaraz impuso el guion de un encuentro de cuartos de final que avanzó a toda mecha por la pista Philippe Chatrier. Tsitsipas sufrió la exhibición del español, con un tenis sublime, de primer nivel e incontestable. Tan rico de golpes como letal, tan capaz de ser sutil como tajante. Preciso y precioso. La derecha ganadora del murciano, junto a su acierto en el saque y la dinámica ganadora, consiguió sacar del partido al heleno pese a los intentos del público francés de alargar el duelo. Tsitsipás amenazaría con la remontada en el tercer set, donde despertó de su letargo, logró empatar un 4-1 en contra y forzar el tie-break (7-5). Alcaraz superó su laguna y venció. Fue, sin ninguna duda, el mejor partido de Alcaraz desde que irrumpió en la élite del tenis. Novak Djokovic espera en semifinales. El número uno va lanzado y aterriza en una ronda donde nunca antes había estado.

Lo había avisado Stéfanos Tsitsipás en la previa del encuentro de cuartos de final: "En este momento es uno de los mayores obstáculos y desafíos para cualquiera. Nos empuja a todos a ser mejores", dijo sobre el tenista español. El del Palmar empezó como un rayo a pesar de que el primer juego se lo llevó el griego. Alcaraz castigó el revés de Tsitsipás y contrarrestó el buen inicio de su rival moviendo al heleno por toda la pista. La agresividad del griego no evitó que Alcaraz consiguiera el primer break point para colocarse con un 2-1 que pesó como una losa sobre Tsitsipás. Se mascó el rosco en el siguiente juego contra el número cinco del mundo y la derecha del español inclinó el 3-1 a su favor.

placeholder Foto: Reuters/Benoit Tessier.
Foto: Reuters/Benoit Tessier.

El viento jugaba malas pasadas a los tenistas, pero el verdadero ciclón era Alcaraz. Cuando no era con su martillo pilón de la derecha era con una dejada perfecta o un passing que ponía en graves problemas al griego. Tsitsipás reaccionó para el 3-2 en un encuentro de tenis de alto nivel entre dos deportistas de primer nivel y el murciano reventó la pista a cañonazos. Llegó el primer rosco con un tenis sublime y el 4-2. Mejor sería el 5-2 con otro casillero en blanco de su rival, al que liquidó con un passing estratosférico y le hizo el segundo break point de la noche. Su maestría con la dejada provocó el 6-2 en media hora.

Alcaraz bordó el tenis

Alcaraz desembarcó en el segundo asalto con una determinación letal y sumó su tercer break point (1-0). El público parisino estaba volcado con el español y Tsitsipás sufría, concatenando golpes defectuosos y ansiedad en la pista. Alcaraz, en cambio, distribuía una paleta de golpeos que combinó sutileza con violencia cuando tocaba. Alcaraz no dejó entrar en el partido al griego para el 2-0. El número cinco del mundo contraatacaría al límite del abismo para el 2-1, aguantando un momento muy duro.

El problema para Tsitsipás es que el saque de Alcaraz, uno de los puntos fuertes del griego, era incontestable (3-1). La tercera doble falta del tenista heleno precipitó el 4-1 favorable al murciano. El público de Roland Garros animó al griego, alicaído y sin escudo para el tenis de Alcaraz, que encontraba cualquier recoveco para triturar las esperanzas de su adversario. Otro break point. Alcaraz tenía todas respuestas correctas y para Tsitsipás todo eran incógnitas. El 5-1 era el fiel reflejo de la tremenda superioridad del tenista español. El desespero del heleno hizo que entrase en una conversación eterna con su cuerpo técnico... y perdiese el segundo set por un contundente 6-1.

El español sacó a relucir su derecha en el primer juego del tercer set y se llevó el gato al agua (1-0). Tsitsipás volvió a notar el aliento de la Philippe Chatrier, donde el público no quería que el partido avanzase tan rápido. No cambiaría el destino del partido con otro break point para el español (2-0). El tercer juego sería de Alcaraz con el rosco del heleno (3-0). Fue aquí donde Tsitsipás tiró de orgullo para el 3-1 y amenazaría con soltarse. Alcaraz en firmar el 4-1. Tsitsipás pondría el 4-2 en un juego más sólido. Por primera vez en el partido, el ateniense igualaría a 40 al español con saque de Alcaraz.

El saque directo de Alcaraz decantó el 5-2 y Tsitsipás se agarró al abismo (5-3). En la primera bola de break para el heleno, el griego logró colocar el 5-4 para rozar la remontada. El griego empató un set que apuntaba a dramático (5-5). Tuvo que sacar el puño con el 40-0 a favor para cerrar un juego en blanco y subir el 6-5 al marcador. Tsitsipás sacó su mejor tenis forzando el tie-break. Alcaraz, en el momento clave, castigó con su saque al griego para el 4-1, donde Tsitsipás contestó con una volea fantástica con el 4-2. Alcaraz fracturó el resto del heleno con otra volea extraordinaria. La defensa magistral al revés paralelo del heleno, subiendo a la red y presionando un mal golpeo, firmó el 6-3. Se le escaparon la cuarta y quinta bola de partido (6-5), no la sexta, donde tumbó a Tsitsipás.

No tuvo piedad. Carlos Alcaraz zarandeó al número cinco del mundo como si fuese un tenista del montón hasta el tercer set (6-2, 6-1 y 7-6, con tie-break). El griego Stéfanos Tsitsipás, consciente de que el español es un rival que se le ha atragantado en los últimos tiempos, intentó protagonizar un partido basado en la agresividad y los golpes ganadores rápidos. Sin embargo, la contundente contestación de Alcaraz impuso el guion de un encuentro de cuartos de final que avanzó a toda mecha por la pista Philippe Chatrier. Tsitsipas sufrió la exhibición del español, con un tenis sublime, de primer nivel e incontestable. Tan rico de golpes como letal, tan capaz de ser sutil como tajante. Preciso y precioso. La derecha ganadora del murciano, junto a su acierto en el saque y la dinámica ganadora, consiguió sacar del partido al heleno pese a los intentos del público francés de alargar el duelo. Tsitsipás amenazaría con la remontada en el tercer set, donde despertó de su letargo, logró empatar un 4-1 en contra y forzar el tie-break (7-5). Alcaraz superó su laguna y venció. Fue, sin ninguna duda, el mejor partido de Alcaraz desde que irrumpió en la élite del tenis. Novak Djokovic espera en semifinales. El número uno va lanzado y aterriza en una ronda donde nunca antes había estado.

Carlos Alcaraz Tenis - Roland Garros
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