El Barça aplasta a un Elche hundido con doblete de Lewandowski y la rabia de Ansu Fati (0-4)

Demasiado Barça para un Elche que se hunde a toda velocidad (0-4). Los azulgranas demostraron la solidez ofensiva que les ha acompañado durante toda LaLiga para hurgar en la herida de un equipo que jugará en Segunda División la temporada que viene con casi total seguridad. Robert Lewandowski logró un doblete para abrir distancia en la batalla por ser el máximo goleador (17 goles en 23 partidos), Ansu Fati volvió a marcar en LaLiga desde octubre de 2022 y Ferran Torres también encontró la paz goleadora que ansiaba. El primer gol llegó en la primera parte y la goleada se desató en la segunda tras el 0-2 de Ansu Fati hasta el 0-4 definitivo. Los azulgranas no fallan, se sitúan a 15 puntos de ventaja del Real Madrid y están mucho más cerca de levantar LaLiga 2022/23.

El Barça llegaba en cuadro a Elche y la situación en la enfermería obligó a Xavi Hernández a revolucionar el equipo. Con las grandes novedades de Eric García como centrocampista junto a Sergi Roberto y Frenkie de Jong, el morbo estaba en la delantera, donde Ansu Fati volvió a la titularidad en el Martínez Valero. El delantero hispanoguineano, sin apenas minutos en las últimas semanas, disfrutaría de una oportunidad de oro para reforzar el discurso de su padre, Bori Fati, y forzar a su técnico a darle más minutos en los próximos encuentros. También a cambiar de opinión a una directiva que plantea venderlo desde invierno.

Sin embargo, la pelota rodó y el delantero azulgrana volvió a recordar por qué juega tan poco en estos momentos. Sin confianza en su juego anterior, donde el desborde, la potencia y la verticalidad rebosaba, Ansu Fati optó por jugar fácil sin complicarse. Marcó un buen gol, sin oposición de por medio, después de que el Elche quedara desmembrado al contragolpe. Lo celebró con rabia, sabedor de que el club lo ha colocado en el mercado y que es muy probable que se vea empujado a salir este mercado de verano. Sigue muy lejos de su mejor nivel, pero el gol le brindará autoestima.

El martillo polaco marcó la diferencia

El Barça dominó el partido sin problemas en el debut de Sebastian Becacece en el banquillo ilicitano. El Barça presionó como siempre ante un Elche parapetado en una defensa de cinco que parecía maniatar a los azulgranas en un inicio dubitativo. Sin velocidad en el pase en la sala de máquinas ni desborde por fuera, Lewandowski aparecía como la mayor amenaza azulgrana. El polaco solo necesitó un cabezazo de Ronald Araújo, que abandonó el partido con molestias, para cazar la asistencia del uruguayo tras un balón parado y abrir la lata. El 0-1 desatascó al Barça, que jugó más cómodo y empezó a doblegar al Elche tras el minuto 20.

La superioridad no se plasmaba en ocasiones. El Elche se estiró, sin demasiado peligro. Cuando los locales reaccionaron, el Barça bajó las pulsaciones con acierto y se adueñó de la pelota para reconducir el partido. El equipo de Xavi dispuso de una gran oportunidad tras centro de Ferran Torres que Lewandowski remató por encima del larguero y que podía haber matado el encuentro. Igual que Jules Koundé, que perdonó con el portero ya batido. Se llegó al descanso con 0-1 y se aplazó la goleada para la segunda parte.

Sin cambios en ninguno de los dos equipos, la segunda parte inició con Marcos Alonso rozando el segundo tanto culé. Lo evitó Edgar Badía como pudo. El Elche respondió en un contragolpe que cogió a Jordi Alba con la espalda abierta en canal. Corrió Carmona a por el tanto del empate y cuando ya estaba plantado solo ante ter Stegen, se rompió. El Elche perdió el tanto del empate y solo dos minutos después, en el 56, Ansu Fati culminó un contragolpe con un buen disparo sin oposición que superó a Badía. La celebración fue el espejo de su tortura. Una explosión de rabia y felicidad.

El 0-2 hundió al Elche, que rápidamente encajó el 0-3 tras un error en salida de balón que castigó Lewandowski para su doblete en el minuto 66. El Elche sufría en un partido ya sentenciado y Ferran Torres lo rubricaría en el minuto 70, cuando recogió la asistencia del polaco para dejar su sello en una transición veloz de los catalanes. En los minutos finales, Fidel envió el balón al palo en busca del tanto del honor y Josan disfrutaría de un mano a mano en el minuto 93, pero el marcador ya no se movería más en el Martínez Valero. LaLiga cada día tiene más color azulgrana.