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La unidad nacional del Madrid aparece en el momento oportuno para convencer a Ancelotti
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LOS TRES, PENDIENTES DE RENOVAR

La unidad nacional del Madrid aparece en el momento oportuno para convencer a Ancelotti

Nacho, Asensio y Ceballos han dado un rendimiento espectacular en las últimas semanas, especialmente el sevillano. Han llamado a la puerta de Carletto y a la de Florentino

Foto: Asensio y Ceballos están a un gran nivel en el Real Madrid. (Reuters/Susana Vera)
Asensio y Ceballos están a un gran nivel en el Real Madrid. (Reuters/Susana Vera)

120 años tuvieron que pasar para que el Real Madrid presentara por primera vez una alineación en la que no había ningún español. Atrás quedaron los tiempos en los que solo había tres extranjeros por equipo. No hubo jugadores nacionales en el once por falta de confianza de Carlo Ancelotti, porque las últimas semanas han demostrado que están a la altura. Ellos han sido los que ha cambiado la cara del Madrid tras la dura derrota frente al Barcelona en la Supercopa de España. (1-3).

Dani Ceballos, cuyo contrato finaliza en junio, es el mejor ejemplo. Llegó al Madrid procedente del Betis en 2017. Con apenas 21 años, y con Toni Kroos y Luka Modric en su apogeo, su protagonismo fue mínimo. La solución fue hacer una mili inglesa, una cesión al Arsenal. Allí jugó con bastante regularidad, pero no le convenció Londres. Si eres de Utrera, buscas una ciudad en la que haya un sol parecido al de Sevilla en abril. Madrid, por momentos, lo tiene.

Sus buenas actuaciones en el club han llegado en el peor momento de Kroos y Modric en la presente temporada. Ceballos ha sido la brújula del equipo en los últimos partidos porque se empeña en reivindicar el barrio cada vez que juega. Además, tiene una capacidad exquisita para robar balones y para estar tácticamente acertado. Es un seguro de vida al que Florentino Pérez tiene que citar en su despacho. Perder un jugador así, tal y como está el mercado, sería un error.

placeholder Dani Ceballos, en pleno partido ante la Real Sociedad. (EFE/Rodrigo Jiménez)
Dani Ceballos, en pleno partido ante la Real Sociedad. (EFE/Rodrigo Jiménez)

Las renovaciones pendientes

Si en el Betis suspiran porque el utrerano se vista de verdiblanco de nuevo, en París están ansiosos porque Marco Asensio se ponga la camiseta azul. El balear aterrizó en Madrid y se convirtió en un jugador habitual para Zidane, aunque no titular. La personalidad que mostró a pesar de su juventud hacían prever que se convertiría en estandarte de los blancos en el futuro. Pero llegó la lesión del ligamento cruzado.

Aquella rotura, no obstante, fue hace mucho y parece que Asensio la ha olvidado. Está llamando constantemente a la puerta de Ancelotti para conseguir la ansiada titularidad. Frente al Valencia, hizo puntos, porque ese golazo recordó al que le marcó al Barcelona en la Supercopa de España de 2017. En el Santiago Bernabéu se frotan las manos con esta versión del balear, un jugador que debe dejar atrás la etiqueta de promesa para convertirse en una realidad.

placeholder Asensio celebra el gol ante el Valencia. (EFE/Rodrigo Jiménez)
Asensio celebra el gol ante el Valencia. (EFE/Rodrigo Jiménez)

El compromiso de Nacho

No es tan espectacular como Ceballos y Asensio, pero merece el mismo reconocimiento por su papel en las últimas semanas. Es Nacho. No importa que juegue los minutos de la basura, siempre cumple. De hecho, es incomprensible que un jugador como él haya tenido tan poco protagonismo en el Madrid. Su polivalencia es un recurso que han agradecido todos los entrenadores que ha tenido en el Madrid.

Nacho estuvo impecable en el corte, además de aportar veteranía y personalidad, en los partidos ante Atlético de Madrid y Valencia. Hacía falta un jugador como él, de la casa, para contagiar ese gen madridista a los más jóvenes. Junto a Dani Carvajal, tienen la obligación de enseñar a los más jóvenes los valores del club. Y demostrarles que no están en un club cualquiera, quizá en el más laureado de toda la historia.

Como si aquella alineación hubiera supuesto abrir la caja de Pandora, Ancelotti, ante la plaga de bajas, se ha encontrado con la mejor versión de la unidad nacional del Madrid. Si el italiano siguiera más tiempo en la capital de España, seguro que estaría agradecido de contar con ellos en su equipo. Son seguros de vida, especialmente Nacho. Ese tipo de jugadores ya no quedan.

120 años tuvieron que pasar para que el Real Madrid presentara por primera vez una alineación en la que no había ningún español. Atrás quedaron los tiempos en los que solo había tres extranjeros por equipo. No hubo jugadores nacionales en el once por falta de confianza de Carlo Ancelotti, porque las últimas semanas han demostrado que están a la altura. Ellos han sido los que ha cambiado la cara del Madrid tras la dura derrota frente al Barcelona en la Supercopa de España. (1-3).

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