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El Barça asalta el Metropolitano y da un golpe en la mesa en la lucha por ganar LaLiga (0-1)
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El Barça asalta el Metropolitano y da un golpe en la mesa en la lucha por ganar LaLiga (0-1)

Ousmane Dembélé marcó el único gol del partido frente a un Atlético de Madrid de Simeone que especuló demasiado al inicio del encuentro y lo pagó muy caro

Foto: Los jugadores del Barcelona celebran el triunfo. (Reuters/Juan Medina)
Los jugadores del Barcelona celebran el triunfo. (Reuters/Juan Medina)

Golpe de efecto a LaLiga de los grandes. El Barça no falló en su visita al Metropolitano para arrancar los tres puntos del feudo rojiblanco y abrir distancia con el Real Madrid en la batalla por el campeonato gracias a un solitario gol de Ousmane Dembélé en la primera parte (0-1). El pinchazo del conjunto blanco en Vila-real del sábado (2-1) brindó la posibilidad al Barça de recuperar la distancia de tres puntos previa al derbi y el equipo de Xavi Hernández no desperdició el regalo de los de Carlo Ancelotti. Pudo matar el partido el Barça, si Dembélé llega a estar más acertado en la segunda parte se topó con la madera. También tuvo el Atlético ocasiones claras para el empate, pero ni Giménez (en la primera parte) ni Griezmann (en el descuento) atinaron de cara a portería. Savic y Ferran Torres, en una pelea absurda en el tiempo añadido, dejaron a sus equipos con diez jugadores cada uno.

Sin Robert Lewandowski ni Jordi Alba, pero con Ansu Fati como delantero centro y Alejandro Baldé en el lugar del lateral zurdo, el Barça saltó al Metropolitano con un dibujo que le otorgaba superioridad númerica por dentro. Diego Pablo Simeone, que alineó al joven Pablo Barrios junto a Koke Resurreción y entregó los costados a Yannick Carrasco y Marcos Llorente, sufriría continuos desajustes por dentro en el centro del campo. Pedri y Gavi recibían a la espalda de los centrocampistas colchoneros sin que los locales pudieran cerrar todas las grietas en su sistema defensivo, mientras Balde y Ousmane Dembélé estiraban la defensa por fuera. El Atlético trató de intimidar en los primeros compases del juego con un disparo en la frontal de Pablo Barrios, demasiado centrado.

placeholder Los azulgranas celebran el 0-1. (Reuters/Juan Medina)
Los azulgranas celebran el 0-1. (Reuters/Juan Medina)

Los rojiblancos se hundieron tras esa ocasión, literalmente. El equipo de Simeone quería defender muy cerca de las faldas de Jan Oblak, con lo que permitía al Barça progresar sin problemas y hasta probar disparos limpios desde la frontal, como el de Andreas Christensen. El Barça amasaba la pelota y el Atlético se pegaba un tiro en el pie con pérdidas sensibles que primero Savic y luego Giménez abortaban en el último momento. La posesión era del Barça, las llegadas eran del Barça y el agobio era de los colchoneros, que a pesar de recuperar pelotas, estaban muy lejos de ter Stegen.

El paso adelante... tarde

Ya fuera Griezmann, Joao Félix o Marcos Llorente quienes interceptaran la pelota, la distancia hacia el área rival era de unos 40-50 metros. Demasiado lejos. La presión pospérdida del Barça era certera y el Atlético se asfixiaba solo. Tanto iba el cántaro a la fuente que se terminó rompiendo, cuando Pedri recibió libre, le encimaron tarde, giró, aglutinó defensores, tocó para Gavi en el momento adecuado y la pelota llegó para Dembélé, que fusiló a Oblak a placer dentro del área en el minuto 22 de la primera parte.

El gol del Barça espabiló al Atlético de Madrid, que se despojó del miedo que lo agarrotaba. El equipo adelantó su defensa, presionó arriba y recogió los frutos. Marcos Llorente disparó al lateral de la red en una llegada, Giménez entró como una exhalación al remate en la ocasión más clara de la primera parte para los suyos y Nahuel Molina corrió al espacio. Griezmann tuvo una oportunidad muy clara desde la frontal y se topó de bruces con un paradón palomitero de ter Stegen. El paso por vestuarios al descanso no alteró el nuevo plan de Simeone, que optó por la valentía que no existió en el inicio del partido.

placeholder Pedri se lleva el balón ante el delantero francés del Atlético de Madrid, Antoine Griezmann. (EFE/Rodrigo Jiménez)
Pedri se lleva el balón ante el delantero francés del Atlético de Madrid, Antoine Griezmann. (EFE/Rodrigo Jiménez)

El Atlético apretó los dientes con dos llegadas calcadas. Nahuel Molina hacía daño por la derecha, impulsado por la confianza ganada en el Mundial con Argentina, y tanto Griezmann como Joao Félix conectaban un remate alto. Xavi, que se estaba viendo superado, realizó un doble cambio: se fueron Ansu Fati y De Jong y entraron Franck Kessié y Ferran Torres. El Barça pudo sentenciar el partido al contragolpe, cuando Reinildo se comió el bote de la pelota y Dembélé se quedó solo ante Oblak... antes de que su irregular control y conducción de la pelota le privara de poder disparar a puerta. Le robó el cuero Barrios en el último momento.

El Barça entonces hizo lo que no había hecho en toda la primera parte: tratar de defenderse a través de la posesión de la pelota sin renunciar a marcar el 0-2. En un pase en largo a la espalda de Reinildo de Koundé hacia Dembélé, el jugador francés aprovechó un nuevo fallo grosero de Reinildo para pisar área y envió el balón al palo. Simeone agitó el equipo, que amenazaba con quedarse sin energía: fuera Carrasco y Barrios y dentro Morata y Kondogbia. Fue salir y el francés dio un pase del que nació un disparo de Marcos Llorente... potente pero muy centrado.

placeholder Ousmane Dembélé estrelló la pelota en el palo. (Reuters/Juan Medina)
Ousmane Dembélé estrelló la pelota en el palo. (Reuters/Juan Medina)

El Barça corría al contragolpe bajo la dirección de Pedri y Dembélé, muy activo, pero sin determinación de cara a puerta tras protagonizar el 0-1, sacaba un latigazo desviado desde la frontal. El Barça había apagado el intento de rebelión local y los rojiblancos flaqueaban en ataque. Ferran Torres marcó, en claro fuera de juego. En el minuto 73, Simeone quemó todas las naves con la entrada de Correa y Lemar por Joao Félix y Koke. Raphinha hizo lo propio por Gavi.

Kessié perdería un balón muy peligroso y Griezmann intentaría el gol del empate en un disparo imposible. Xavi renovó pulmones, con Marcos Alonso y Sergi Roberto por Busquets y Balde. Reguilón sustituiría a un desacertado Reinildo en el tramo final. Una pelea entre Savic y Ferran Torres acabaría con ambos expulsados en el tiempo de descuento. El Atlético apretaría con corazón hasta el final del encuentro sin generar peligro real hasta el 94, donde Araújo sacó un balón en la línea de gol obra de Correa y Griezmann. El jugador francés también tuvo una falta en la frontal que impactó en la barrera y provocó la euforia de ter Stegen. El Barça da un golpe muy serio a la Liga y aprovecha el pinchazo del Real Madrid en Vila-real.

Golpe de efecto a LaLiga de los grandes. El Barça no falló en su visita al Metropolitano para arrancar los tres puntos del feudo rojiblanco y abrir distancia con el Real Madrid en la batalla por el campeonato gracias a un solitario gol de Ousmane Dembélé en la primera parte (0-1). El pinchazo del conjunto blanco en Vila-real del sábado (2-1) brindó la posibilidad al Barça de recuperar la distancia de tres puntos previa al derbi y el equipo de Xavi Hernández no desperdició el regalo de los de Carlo Ancelotti. Pudo matar el partido el Barça, si Dembélé llega a estar más acertado en la segunda parte se topó con la madera. También tuvo el Atlético ocasiones claras para el empate, pero ni Giménez (en la primera parte) ni Griezmann (en el descuento) atinaron de cara a portería. Savic y Ferran Torres, en una pelea absurda en el tiempo añadido, dejaron a sus equipos con diez jugadores cada uno.

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