Es noticia
Lewandowski explota, Piqué ve la roja en su último partido y el Barça sobrevive a El Sadar (1-2)
  1. Deportes
  2. Fútbol
El adiós del central culé

Lewandowski explota, Piqué ve la roja en su último partido y el Barça sobrevive a El Sadar (1-2)

El Barça de Xavi Hernández remontó un partido durísimo ante Osasuna y firmó un triunfo de esos que dan Ligas. Los azulgranas abren brecha con el Real Madrid y se colocan a cinco puntos

Foto: Lewandowski vio la roja por esta acción. (Reuters/Vincent West)
Lewandowski vio la roja por esta acción. (Reuters/Vincent West)

El Barça asestó un golpe en la mesa de LaLiga en una de esas victorias que dan títulos ligueros. En la semana en la que el Real Madrid se ha dejado cinco puntos por el camino, el conjunto de Xavi Hernández sacó un partido dificilísimo en El Sadar frente a un Osasuna ordenado, vertical, veloz y determinado que ya es el equipo revelación de esta competición. Fue un ejercicio de resistencia enorme y a Osasuna le faltó la convicción que suele demostrar. El gol de David García en el minuto ocho de la primera parte, tras un grave error de Sergio Busquets durante la marca en el córner y una falta sobre Marcos Alonso que Gil Manzano no vio, sirvió al cuadro de Jagoba Arrasate para adelantarse. Para colmo, el Barça se quedaría con uno menos en el minuto 31 por la absurda expulsión de Robert Lewandowski al propinar un codazo a un contrario. Pero las cosas aún se podrían más negras.

Los locales se fueron al descanso por delante en el marcador y con caras muy largas. Jordi Alba estaba desquiciado y vio la amarilla. La puesta en escena de los de Xavi Hernández había sido pobre, con muchos problemas para fabricar ocasiones en estático, sin desborde por fuera y con sus futbolistas más importantes (Lewandowski, Pedri y Dembélé) desconectados. Aunque fue mejorando levemente con el paso de los minutos. No ayudó que Sergio Busquets volviese a quedar señalado por las pérdidas en zonas sensibles que costaron ocasiones claras de gol para Osasuna, como en la acción del 1-0. Pudo haber igualado el encuentro el Barça antes del descanso, pero el gol de Ferran Torres, en clara posición irregular, fue anulado por fuera de juego.

Al descanso se produciría una imagen que ya queda para la historia. Gerard Piqué persiguió a Gil Manzano tras el pitido final en la primera parte y le increpó, tal y como pudieron captar las cámaras de televisión. El central fue expulsado por protestar en el que ya es su último partido como jugador del FC Barcelona al haber anunciado su precipitada retirada esta semana y cerró así su etapa como jugador en activo.

"¿Has visto qué córner nos has pitado? Eres el árbitro que más nos ha jodido con diferencia. ¡Es una puta vergüenza, me cago en tu puta madre!". Esto es lo que le dijo Piqué a Gil Manzano al descanso, según refleja el acta arbitral. Un final triste y marcado por el protagonismo para un futbolista que ha extinguido su tiempo en el transatlántico azulgrana y que no cumplirá la sanción. No será la última vez que lo veamos en la órbita culé porque la presidencia es su objetivo.

Osasuna rozó la victoria

Nada más reanudarse el encuentro en la segunda parte, Jordi Alba puso un centro al área, Pedri cazó el rechazo y el jugador canario, desaparecido en la primera parte, no dudó frente a Aitor Fernández. El Barça, con 10, dio la cara y traspasó la presión a Osasuna. Desde ese preciso instante, el Barça buscaría dejar a Osasuna con un futbolista menos, como cuando Lucas Torró, ya con una amarilla, derribó a Frenkie de Jong. Las protestas del banquillo azulgrana fueron tan constantes que Xavi Hernández vio la amarilla.

Arrasate, que vio peligrar la superioridad numérica, quitó rápidamente a Torró por Kike García. El entrenador del cuadro navarro fue descaradamente a por la victoria, pero su equipo no tuvo la personalidad suficiente como para imponerse a pesar de jugar 11 contra 10. El Chimy Ávila probó fortuna con un centro endiablado que estuvo a punto de sorprender a Ter Stegen, pero el portero alemán sacó una mano milagrosa en el último minuto para salvar el segundo tanto de los locales. Xavi introdujo a Gavi por Christensen, mientras Eric García esperaba en el banquillo y veía como un lateral izquierdo (Marcos Alonso) y un centrocampista (Frenkie de Jong) ocupaban su sitio. No confiaba Xavi en su poderío aéreo.

placeholder Los azulgranas celebran el empate. (Reuters/Vincent West)
Los azulgranas celebran el empate. (Reuters/Vincent West)

El técnico local sustituyó entonces a Rubén García por Rubén Peña y Aimar por Brasanac, y Xavi, a Dembélé y Ferran Torres por Ansu Fati y Raphinha. Justo después, Kike García infartó al sistema defensivo del Barça y su disparo se topó con el lateral de la red. El delantero murciano insistió una y otra vez, pero no encontró el camino del gol. A Osasuna le faltó valor y fútbol en la segunda parte.

Cuando el encuentro ya se encaminaba hacia los minutos finales, un pase maravilloso de Frenkie de Jong a la espalda de la defensa de Osasuna hacia Raphinha dinamitó el encuentro. El brasileño, más rápido y listo que el resto, sorprendió a Aitor Fernández con un cabezazo, este se quedó a media salida y el Barça remontó el partido. Osasuna pudo empatar el encuentro, pero tanto Budimir como Moncayola perdonaron frente a Ter Stegen y el Barça resistió en un ejercicio de supervivencia que coloca a los azulgranas como líderes de LaLiga (a cinco puntos del Real Madrid, con un partido menos) y vivirá el Mundial desde lo alto de la tabla.

El Barça asestó un golpe en la mesa de LaLiga en una de esas victorias que dan títulos ligueros. En la semana en la que el Real Madrid se ha dejado cinco puntos por el camino, el conjunto de Xavi Hernández sacó un partido dificilísimo en El Sadar frente a un Osasuna ordenado, vertical, veloz y determinado que ya es el equipo revelación de esta competición. Fue un ejercicio de resistencia enorme y a Osasuna le faltó la convicción que suele demostrar. El gol de David García en el minuto ocho de la primera parte, tras un grave error de Sergio Busquets durante la marca en el córner y una falta sobre Marcos Alonso que Gil Manzano no vio, sirvió al cuadro de Jagoba Arrasate para adelantarse. Para colmo, el Barça se quedaría con uno menos en el minuto 31 por la absurda expulsión de Robert Lewandowski al propinar un codazo a un contrario. Pero las cosas aún se podrían más negras.

FC Barcelona Robert Lewandowski Gerard Piqué
El redactor recomienda